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Opinión 13 de diciembre de 2016

Abad le dio una inesperada oportunidad a sus adversarios internos

Por Gerardo Gómez Muñoz

Cuesta creer que un dirigente tan avezado, aunque joven, haya incurrido en los errores que constituyeron una mesa servida para que sus resentidos adversarios internos y la dirigencia política, empresaria y sindical del puerto se regodearan a gusto para desmenuzarlo. Algunos alegan que fue víctima de la prensa. Exagerado juicio porque él fue como mariposa frente a la luz al brindar su supuesta noticia bomba sobre “el puerto pirata” al monopolio que se especializa en tridimensionar las informaciones, ciertas o no, que causen devastación a sectores opuestos a su periodismo abiertamente militante.
El cuidado y el acierto de los pasos cada vez más exitosos que Maximiliano Abad viene ejercitando en la política local y provincial -con proyección nacional- que ya lo erigieron en secretario general de UCR bonaerense, pueden fundamentar la creencia en que la aparatosa denuncia contra desarreglos y algo más en la Aduana y puerto marplatense, obrante en la AGN, no fue armado con el propósito de sacar provecho político. Sin seguir opinando sobre intenciones existentes o no, a la vista de la reacción política interna y externa como de los importantes actores empresariales y laborales afectados, no se puede obviar el grave error cometido por un dirigente tan calificado, de tanta conexión con elevados círculos de peso en el escenario nacional. La consecuente reacción operada en Mar del Plata que eclosionó en la espontánea asamblea en un hotel de la calle Irigoyen, no debería ser tomada a la ligera ni con las anteojeras de supuestos fieles seguidores. Más allá de las contundentes y duras manifestaciones, allí surgió un severo documento que lo ataca con argumentos y calificaciones que ameritan que el juicio de los afectados debe ser atendido. Abad no llegó a ser presidente de la Federación Universitaria Argentina, concejal, diputado provincial y ostentar partidariamente a uno de los cargos máximos de la conducción de su partido, por casualidad. Esto da honores, pero también responsabilidades y deberes para con la sociedad en su conjunto.

No bastan excusas “light”

Abad fue advertido con tiempo que en el puerto principalmente se había generado una más que sorda reacción llegando a enojos, por las denuncias y el recorrido mediático que, enancado en ellas, estaba haciendo el legislador. Un día después ya se supo que se estaba organizando la comunidad portuense y sectores políticos para una manifestación pública de repudio. Otro error, creyó que bastaba con entrevistar a ciertos empresarios, mayormente los comprometidos con el gobierno actual, pero no se llegó a los mas dolidos en actitud sospechada “de sobradora”. Así se llegó al encuentro, muy representativo, del hotel de marras, donde lo primero que llamó la atención fue la nutrida delegación de concejales de su partido y del oficialismo de “Cambiemos”. También hubo más dirigentes de sindicatos vinculados con la actividad de pesca y fundamentalmente el presidente del sindicato de trabajadores de la aduana, Hernán Caille, que con dolor y severidad impuso de la afrenta que Abad había inferido a los ochenta afiliados y a sus respectivas familias, que de pronto habían sido calificados como integrantes necesarios “del puerto pirata”. Y le reclamaron que ese baldón merecía público pedido de disculpas. En la circunstancia quedó al desnudo el grave conflicto existente en la UCR marplatense porque la mayoría de sus concejales -Nico Maiorano, Cristina Coria y Gonzalo Quevedo- estuvieron presentes, también la secretaria de desarrollo social Vilma Baragiola. Cabe señalar que ellos integraron la lista adversaria que hace poco fue derrotada por Abad pero no admitieron integrarse a una unidad partidaria. Asimismo los integrantes de la bancada de “Agrupación Atlántica” con Patricia Leniz y Alconada participaron de este verdadero acto de repudio a su correligionario de “Cambiemos”. No se debe soslayar que hubo una calificada representación de la CGT entre los que se vio a Pedro Vattimo, Miguel Angel Guglielmoti y Sergio Arista. El sector político también tuvo importante participación en la convocatoria. Con derecho propio “MPR”, o sea “Mar del Plata Puerto y Región”, con Daniel Sosa, a la cabeza cumplieron la tarea relevante de coordinar la proyección del acto. Lo mismo puede decirse de Lucas Fiorini, Maiorano y Leniz, que con Chaile compartieron la conducción de la asamblea. Suficiente para destacar que la presencia radical implica la concreción de una división por ahora no mensurable en el partido y en la alianza gubernamental de la ciudad. Los próximos días tal vez tengan la respuesta a tantos intríngulis. También el Ejecutivo aportó lo suyo a través de la activa participación de la secretaria de Desarrollo Social Vilma Baragiola y del vicepresidente del ente de Turismo Jorge Zanier. Los otros bloques como Acción Marplatense con Héctor Rosso, el FpV con Marina Santoro y el Sciolismo con Balut Tarifa, el Frente Renovador con la participación conductiva del mencionado Fiorini y de Alejandro Carrancio fueron protagonistas de la jornada. La envergadura de la asamblea redujo a líneas de poca repercusión al apoyo brindado por el comité -propia tropa de Abad- de la UCR.

No todas espinas

La estatura política de Abad tenía anoche un severo desafío cuyo resultado al cierre de esta página aun no se conocía porque el plenario del comité de la UCR con fecha de anuncio muy anterior al conflicto podría ser, según se presumía, un nuevo escenario para que la contra interna y minoritaria le volviera a mostrar los dientes. Pero había dudas de que la entidad de los contestatarios diera para llevar a ese escenario la confrontación y aun de que fuera capaz de asistir. Maxi, en todo caso, iniciaría la sesión con la incorporación en grado de vicepresidente del comité por parte de su amigo el diputado nacional (MC) Tato Serebrinsky.
Además demostrando la enjundia de su inserción en el escenario mayor de su partido estuvo estos días en San Rafael junto a su esposa Mari, como invitado de honor junto a otras nueve parejas -entre las que encontraban el vicepresidente de Techint Héctor Betnaza, Ricardo Gil Lavedra y otras siete parejas de la intimidad de Ernesto Sanz-, que cumplía 60 años. Fueron varios días en la finca sanrafaelina donde hubo piscina, equitación, tenis, otras recreaciones y las consabidas tertulias sociales y políticas. Eso sí, el fin de semana y como cierre hubo el infaltable asadote para centenares de dirigentes y amigos en general.

La Cámpora con amigos

Unos cuatrocientos asistentes concurrieron al agasajo que para despedir el año organizó La Cámpora a través de la concejal Marina Santoro. Hubo miembros de las más diversas organizaciones del Frente para la Victoria de sectores vinculados, desde otros partidos, el kirchnerismo, de la CGT, de la CTA, de la dirigencia vecinal y del activismo barrial. Desde luego abundaron las críticas a los gobiernos municipal, provincial y nacional. Se dieron datos y cifras precisas sobre la caída de los servicios y prestaciones sociales, como premisa y objetivo de esas administraciones. Habida cuenta del entusiasmo reinante se formularon propósitos de intensificar la acción proselitista y el acompañamiento a los reclamos populares con vistas a las elecciones del año próximo.
Diversas agrupaciones que se suman constantemente a las convocatorias del “Peronismo Marplatense” y del PJ que hacen punta con J. M. Rapacioli, Rodrigo Bogdanich y otros dirigentes anuncian para las próximas horas otros encuentros similares. Otros agrupamientos como el conducido por Estela Casasola, etc., ya han celebrado encuentros similares.

Empiezan a verse indicios

Una reunión de las que viene celebrando el ex embajador Carlos Cheppi con la ex concejal Alejandra Urdampilleta permitió filtrar datos de relevancia con miras al acelerado tiempo preelectoral que se avizora en el kirchnerismo-peronismo que encabezan el citado Cheppi y Pablo Vacante, entre otros. Contrariamente a lo que podría presumirse este sector está lejos de encaminarse a un acuerdo con la diputada Fernanda Raverta porque el ex diplomático lejos estaría de aceptar a estas alturas lejanas candidaturas puestas para el 2019. El jugará con todo para el 2017 y de acuerdo a sus resultados su gente decidirá el futuro.
La situación quizás determine que otro grupo como el que lidera Daniel Rodriguez clarifique prontamente el rumbo interno con vistas a la próxima elección. Por otra parte se comenta que está trabando muchas conversaciones la posición del concejal Marco Gutiérrez, que se creería ungido sí o sí por el destino manifiesto a la reelección de su banca de concejal.
Por ahora nadie, sugestivamente, habla de un cargo que es inmensamente apetecido, el de senador provincial. Algunos dicen que la ya intensa participación en las actividades múltiples del grupo “Peronismo marplatense” y de los que activan en la quinta sección electoral esconden a un pretendiente. Por ahora resguardado en el apodo de “Juanjo”, él apunta a esa posición de la que nadie habla, al menos abiertamente en ese campo.

Nobleza obliga

Se señala más arriba el protagonismo que tuvo en la asamblea en la que se juzgó severamente al diputado Abad el concejal massista Fiorini. Ahora, expresamente, relevó de algunos cargos al legislador. Fue más allá al destacar enfáticamente la actitud de quien había sido severamente juzgado por sus excesos en la calificación del puerto marplatense y de sus actores empresariales, laborales y sindicales a partir de las denuncias obrantes en la ANG Fiorini declaró que Abad públicamente y ante cada sector afectado expresó sus disculpas y levantó lo que pudo considerarse algún cargo contra ellos.
En la ocasión consultado dada la conocida y antigua relación desde el peronismo inicial de ambos, con el flamante ministro de María Eugenia Vidal, Joaquín de la Torre, dijo que él no ha participado ni participa de reuniones políticas, en función de valoración o juzgamiento del gobierno municipal.
“Por lo que conozco al ministro las reuniones las lleva a cargo especialmente con protagonistas de la vida empresarial, comercial, laboral y sindical de Mar del Plata, en la búsqueda de inquietudes y anhelos para el desarrollo de la ciudad en todos sus niveles”, sostuvo. Agregó que la intención “única es encontrar y facilitar caminos y apoyos para esas concreciones que deben llegar lo más directamente posible a la gobernadora. Ese es el único mandato político que me asiste”.