La justicia de Garantías dictaminó la prisión preventiva para  Lucía Sosa (33) y Héctor Picart (52), acusados de abusar y matar a su hija Yazmín Milagros de 11 meses.

La decisión fue tomada por el magistrado Gabriel Bombini por lo que la pareja seguirá detenida mientras avanza la investigación.

Yazmín Milagros falleció en el Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA) por una complicación general pero la autopsia reveló un dato escalofriante: la bebé de 11 meses había sido abusada sexualmente.

Ante esta situación, la fiscal Sánchez comenzó a investigar lo ocurrido y en principio dispuso la orden de captura para los padres de la niña. Además se ordenó un allanamiento en su vivienda del barrio Las Américas donde secuestraron ropas de bebé tiradas en la basura. Después de unas semanas  prófugos, la pareja finalmente cayó el lunes 17 de octubre, cuando la policía los encontró en Rawson y 228.

De acuerdo a la carátula del caso, Sosa y Picart están imputados por el delito de “abuso sexual agravado seguido de muerte”.

A la pareja ya se le había muerto una bebé, de 5 meses, en 2013 bajo circunstancias sospechosas. Incluso un informe médico preliminar mencionó la presencia de cocaína en la sangre de la bebé aunque esto no pudo ser ratificado posteriormente.

Lo cierto es que a raíz de ese fallecimiento y de otras circunstancias de alarma y riesgo para los demás hijos -otros tres- la Justicia ordenó quitarle al matrimonio la tenencia. Los chicos fueron dados en adopción y la pareja inició una campaña para recuperarlos, patrocinados por la ONG En Red.

La Justicia no atendió el reclamo y los niños no volvieron a estar con sus padres.

Sin embargo, la pareja tuvo a otro pequeño, a la niña Yazmín Milagros.