por Vito Amalfitano

Avellaneda toda de Racing en el verano. Racing fue más en los 90 reglamentarios, pese a un par de sustos en el final, y después se quedó con todo, también en Copa Revancha, en la definición con tiros desde el punto del penal, en la que se impuso a Independiente por 8 a 7 después de un empate en cero en el Minella ante buena cantidad de público en el cierre del Fútbol de Verano 2017.

Racing asumió el protagonismo desde el vamos, con la salida de Diego González, el control de Marcos Acuña, la calidad de Lisandro López.

Independiente, con autoestima baja, no terminó de soltarse nunca en el primer tiempo, más allá de la actitud de Tagliafico para llevarlo adelante y la pelea desigual de Diego Vera para partir desde el medio y progresar en el campo contrario en demasiada soledad.

Así Racing generó las situaciones más claras a lo largo de la etapa inicial. En las dos que estuvo más cerca el arquero Martin Campaña salvó a Independiente. Primero en un remate de Aued que se desvió en un defensor, y el golero, con reacción rápida, pudo neutralizar con mucho esfuerzo contra el palo izquierdo.

Entraron Nery Domínguez y Domingo Blanco para tratar de darle más volumen de juego a Independiente en el segundo tiempo. Se soltó un poco, no demasiado.

Pero otra vez fue más peligroso Racing con un centro cruzado que conectó Vittor y volvió a tapar Campaña, figura del partido.

Pero como Racing no pudo consolidar su dominio, cuando llegaron los cambios, y salió Acuña, por ejemplo, se emparejaron más las acciones e Independiente tuvo su gran oportunidad, la primera y la mejor, en el minuto 32’ cuando Nery Domínguez dejó de cara al gol a Diego Vera, quien desvió el remate final en clara posición para definir.

Vera tuvo otra, tras centro de Martín Benítez, pero también la desperdició. Y Orión sacó muy bien abajo un remate sobre la hora de Rigoni.

Fueron a los penales. En esa Racing se quedó con lo que mereció por haber hecho un poco más en el juego, más allá de la recuperación de

Independiente en el final. Orión atajó el penal decisivo después de repetidas series, y convirtió el último el marplatense Santiago Rosales, después de dos desvíos, de Vittor y de Nery Domínguez. En el verano, los de Cocca fueron dueños de Avellaneda.