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La Ciudad 3 de diciembre de 2016

El gasto municipal estará fuertemente condicionado por el pago de deudas

Casi el 14,5% del gasto que el municipio prevé realizar en 2017 estará dedicado a pagar deudas. El secretario de Economía admitió que será una gran restricción. Y dijo que en este contexto el intendente definió como prioridades a educación, salud y desarrollo social.

El ejercicio presupuestario de la comuna para 2017 estará fuertemente condicionado por la obligación de hacer frente al pago de un significativo monto de deuda.

De los 6667 millones de pesos contenidos en el cálculo de gastos y de recursos que elaboró la gestión del intendente Carlos Arroyo, 996 millones -es decir casi el 14,5%- estarán dedicados a saldar compromisos impagos del actual y de anteriores ejercicios.

El secretario de Economía y Hacienda, Gustavo Schroeder, reconoció que esto seguirá limitando las posibilidades de la Municipalidad de ampliar la prestación de servicios y de encarar por sí misma obras de envergadura.

“La obligación es la de atender la deuda que se heredó. Guste o no es un mandato de quien tiene a cargo la gestión. La Ley Orgánica exige que la deuda flotante sea reducida a razón de un 25% por año en 4 años y esa es una obligación legal”, le dijo el funcionario a LA CAPITAL.

El proyecto del presupuesto municipal para 2017 fue remitido esta semana al Concejo Deliberante. En materia de recursos el Ejecutivo planteó una suba de tasas que afectará a sólo parte de los contribuyentes.

El 37% de quienes tributan la Tasa de Servicios Urbanos no recibirá aumentos o tendrá reducciones.

El resto, en su gran mayoría, sufrirá incrementos que irán desde el 10 hasta el 60%.

Con esta medida el Ejecutivo no solo pretende actualizar el monto de la tasa en función de la inflación. También tratará de recuperar los ingresos perdidos en 2016 a causa de la inadecuada manera en la que a comienzos de este año se actualizó el monto de los tributos, generando un desfinanciamiento que profundizó la crisis en el municipio.

En materia de ingresos, Schroeder y su equipo incluyeron otra novedad. Una partida de unos 20 millones de pesos que tiene como origen lo que la comuna recaude por el sistema de fotomultas, cuya aprobación aún depende del Concejo Deliberante.

En tanto que las posibilidades de inversión, según destacó el funcionario, estarán fuertemente condicionados por la obligación del municipio de ponerse al día con sus proveedores.

El subsecretario del área, Germán Blanco, le explicó a LA CAPITAL que dentro de los 966 millones de deuda que habrá que pagar el año próximo existen decenas de prestadores de servicios con los cuales se realizaron convenios “con quitas y sin intereses”.

El objetivo, dijo, es el de finalizar 2017 habiendo reducido “el monto y los plazos de esa deuda, la cual aún así seguirá existiendo”.

Entre los acreedores más importantes figuran propietarios de inmuebles alquilados, la empresa que realizó la instalación del sistema de videocámaras, la compañía que opera el predio de residuos, las ART y obras sociales, entre otros.

Según Schroeder comenzar a resolver esta situación no sólo obedece a la necesidad de cumplir con la ley.

Es también una manera de “comenzar a recuperar la confianza” y de lograr que los proveedores “vuelvan a ofrecer precios y se presenten a licitaciones”.

“Hay que arreglar esta deuda porque hasta ahora muchos han respondido porque los hemos logrado contener personalmente. Pero para que el municipio funcione nuevamente hay que recomponer una relación normal con los proveedores”, indicó.

La deuda no será el único ítem que el año próximo consumirá una buena parte de los recursos.

Como es habitual, buena parte de lo que se recaude terminará financiando el pago de sueldos.

Según el proyecto los salarios demandarán durante todo el ejercicio casi 3300 millones de pesos, es decir casi el 50% del total.

Las prioridades de Arroyo

De lo que resta “las prioridades fijadas por el intendente fueron educación, salud y desarrollo social”, comentó Schroeder.

Los números indican que para el año próximo Educación tendrá asignados unos 710 millones de pesos, Salud, 548 millones y Desarrollo Social 393 millones, haciendo un total de 1651 millones.

En materia de servicios, en tanto, Schroeder señaló que su prestación normal dependerá “de que se cumpla o no con el presupuesto que hemos presentado”.

Y agregó: “va a ser fundamental trabajar para lograr la mayor eficiencia posible”.

En relación a la obra pública el funcionario dijo que en su mayoría los marplatenses verán realizar aquellas que cuentan con financiamiento nacional y provincial.

Muchas de ellas ya figuraban en presupuestos anteriores y en los de este año, como la mejora de los centros de salud o la terminación de polideportivos barriales.

Lo más novedoso se acaba de anunciar esta semana y consiste en trabajos de mejora urbanística en la costa, en el microcentro y la puesta en valor de plazas y espacios públicos en algunos barrios.

En total la obra pública a ejecutar con fondos nacionales y provinciales tiene asignado un presupuesto de unos 508 millones. Aunque también existe la promesa de que habrá algunas obras “menores” y trabajos de mantenimiento financiados por el propio municipio.

“En materia de servicios y de obras es claro que la demanda supera las posibilidades. El Emvial y el Enosur arrancaron ya hacer algunas cosas, pero para hacerlo primero hubo que arreglar la maquinaria que estaba rota. Por eso no es sencillo recuperar a este municipio. Confío en que si hacemos las cosas bien la gente va a comenzar a notar una mejora”, afirmó.