El Sindicato de Trabajadores Municipales (STM) exigió que el intendente Carlos Arroyo deje inmediatamente sin efecto el decreto por el cual designó a su hijastra, Evangelina Tedros, como jefa del Departamento de Publicidad, quien llegó al cargo en medio de una fuerte controversia por la forma en la que la Municipalidad autorizó la realización de un evento para promocionar el lanzamiento de la nueva camioneta Ecosport.

A través de una nota dirigida a Arroyo, el secretario general del gremio, Antonio Gilardi, consideró que el nombramiento de Tedros, quien ya había sido promocionada durante la actual administración, es de “nulidad absoluta” por haber sido resuelto de “manera unilateral” violando las disposiciones de la Ley 14656 que definen el marco laboral de los empleados municipales.

Para Gilardi, esta designación genera “una desigualdad de hecho y de derecho con la planta de personal permanente” y es “una violación flagrante a las normas” que definen el marco jurídico de “la carrera administrativa, el proceso de selección e igualdad ante la ley”.

Además, según argumentó, tampoco cumple con la exigencia de que los actos administrativos sean adoptados en base a criterios de “transparencia, idoneidad y motivación suficiente“.

Para el intendente hubo irregularidades en el trámite para instalar dos publicidades en el Museo Mar. Ya echó a dos funcionarios y designó a su hijastra como jefa en Inspección General.

El nombramiento de Tedros se produjo el pasado 12 de septiembre mediante el decreto 2268/2017.

A través de esa norma el intendente dispuso que la mujer  -quien es hija de su actual pareja, la subsecretaria de Educación, Susana Rivero– quedara formalmente a cargo del Departamento de Publicidad.

Para el sindicato esta decisión viola la normativa vigente debido a que entre otras cosas “le quita al personal de planta permanente y con estabilidad” la posibilidad de acceder a los puestos jerárquicos a través del régimen de concursos. 

El nombramiento de Tedros se produjo en medio de una fuerte controversia que envuelve al área de Inspección General, de la cual depende el Departamento de Publicidad.

Arroyo mantiene a esa dependencia en la mira desde hace varias semanas, intentando determinar quién y cómo autorizó la realización de un evento para promocionar el lanzamiento de la nueva camioneta Ecosport en Mar del Plata.

Esa actividad se llevó a cabo a fines de agosto e incluyó la realización de una caravana de vehículos escoltada por personal de Tránsito, la cual concluyó en las puertas del Museo de Arte Contemporáneo (MAR).

Ese día la fachada del edificio quedó recubierta con dos enormes carteles publicitarios que llamaron la atención del jefe comunal.

Tras reclamar explicaciones, el intendente llegó a la conclusión de que el trámite para conceder los permisos no había seguido el circuito administrativo habitual, por lo que dispuso echar al director de Inspección General, Luis Melo.

“Exijo para Inspección General un sistema de administración absolutamente claro, transparente y riguroso. No me gustó cómo se tramitó un expediente de publicidad, fuera el funcionario. Es simple”, explicó el intendente en ese momento.

Este sábado Arroyo dispuso además pedir la renuncia del director de Gobierno, Emiliano Mensor, a quien varias fuentes también vinculaban con el caso.

En este contexto, además de requerir la realización de sumarios, el intendente resolvió tomar una controvertida decisión: colocar a su hijastra, de manera formal, al frente del Departamento de Publicidad.

Hasta ahora Tedros se encontraba a cargo de la firma de despacho de esa dependencia, pero el decreto emitido la semana pasada la convirtió de hecho en su nueva jefa, asignándole un puesto que según el gremio, sólo podría ser cubierto mediante un concurso.

En la nota dirigida a Arroyo, Gilardi advirtió que al designar a Tedros de manera “provisional”, el intendente ni siquiera definió en qué momento realizará el correspondiente concurso para cubrir el puesto tal y como lo marca la ley.

Así “nos encontramos ante una situación en la que agentes municipales se perpetúan ilimitadamente en cargos irregularmente otorgados”, dijo.

Por eso definió a la designación de la funcionaria como un “acto administrativo ilegítimo, inmotivado e irrazonable“.

Incluso indicó que el decreto no expone para la designación “razones de idoneidad y capacitación” ni menciona que haya habido un “examen de aptitud especial” para justificar que la “designada” acceda al cargo jerárquico que se le otorgó.

En la nota dirigida al intendente Gilardi reclamó que por esos motivos el Ejecutivo revoque la designación, “reservando las acciones judiciales correspondientes“.