Con diez días de anticipación, como mínimo, en relación a la mayoría de los foráneos que viene a jugar la Liga Nacional, el puertorriqueño Ricardo Sánchez Rosa, “Ricky” Sánchez para todo el mundo, llegó el domingo a Mar del Plata para integrarse a Quilmes, cuyo plantel está prácticamente completo para continuar con la preparación para lo que será una temporada exigente, con doble competencia.

El boricua participó este lunes de los dos entrenamientos “tricolores” en Once Unidos. Por la mañana el plantel sólo realizó una sesión de gimnasio -la cancha estaba ocupada por el torneo de Open Sport- y por la tarde Javier Bianchelli comandó una práctica de básquetbol propiamente dicha.

Antes de comenzar la segunda, Sánchez le confesó a LA CAPITAL sus deseos de volver a jugar en Argentina. “La de Quilmes fue la mejor opción para mí”, afirmó.

-¿Cuáles fueron las primeras impresiones que te llevaste del equipo, de tus nuevos compañeros, del club?
-Estuvo todo más que bien.Vine charlando mucho con Enzo Ruiz, que fue compañero mío en Bahía Basket. Con él me mantuve en contacto todos estos años y me habló bien de Quilmes. Estoy muy impresionado por cómo me han recibido y muy agradecido a toda la gente del club.

-¿Qué te atrajo del ofrecimiento de Quilmes?
-Me gustaba la idea de volver a esta Liga Nacional. Me sentí bien jugando acá, me gustó la vida cotidiana argentina. Para mí era muy importante venir acá para poder estar a punto día a día. Tuve la oportunidad de jugar para Javier Bianchelli en Libertad de Sunchales, de hacerlo con Enzo en Bahía Blanca, enfrenté a varios de mis compañeros actuales. Quería el desafío de volver a jugar una Liga larga. En verdad, la de Quilmes fue la mejor opción para mí.

-No es común que a los jugadores de tu país le gusten las competencias largas. Están habituados a ligas cortas…
-Lo sé, pero las tres experiencias que tuve en Argentina me gustaron mucho. Hice muchas amistades por acá y me sentí siempre cómodo.

-¿Cuál es tu opinión sobre la competencia en sí?
-Tengo una alta opinión de la competitividad de la Liga Argentina. Acá hay que jugar todos los días, no hay jornada libre. no hay noche libre. Hay que jugar, siempre hay presión y te hacen pagar los errores.

-¿Qué fue de tu carrera en estos últimos tres años desde que te fuiste de Regatas Corrientes?
-Volví a Puerto Rico, fui a España a jugar la ACB a Manresa, me rompí un dedo. Tuve un paso por la Liga de México, pero me “regresé” rápido a Puerto Rico. Me encantó jugar en España. Fue todo bueno, salvo la rotura del dedo. Pero es parte del negocio y del profesionalismo.

-¿Te comentó algo Javier Bianchelli sobre tu rol en el equipo?
-No hemos hablado con Javier todavía de mi rol en el equipo. Llegué ayer y sólo hemos charlado un rato por la mañana…Pero vine a ganar partidos. A aportar lo que sé y a ganar. Cuando uno gana, todo lo demás se acomoda.

-¿Qué significa para vos la posibilidad de jugar, además, la Liga Sudamericana?
-Que Quilmes juegue Liga Sudamericana tuvo mucho que ver en mi decisión. Jugar dos competencias es un desafío muy diferente. La exigencia de jugar noche tras noche me generó este sentimiento de venir a Quilmes a dar todo.