Atlético Tucumán inició este martes con el pie izquierdo la Copa Libertadores 2018, al quedar preso de sus nervios y sufrir la experiencia de Libertad de Paraguay, que le ganó por 2 a 0 en el estadio “Monumental José Fierro”, en el estreno del Grupo C.

Un cabezazo del interminable Santiago Salcedo y la aparición del ingresado Rodrigo Alborno, en el inicio y el final del segundo tiempo, marcaron la diferencia para el equipo dirigido por Aldo Bobadilla.

Atlético Tucumán, que fue acompañado como de costumbre por una multitud en el estadio “Monumental José Fierro”, deberá recuperarse rápidamente para mejorar su campaña de la pasada temporada en el certamen continental, donde fue tercero en la etapa de grupos e ingresó a la Sudamericana.

La próxima presentación del “Decano” será el miércoles 4 de abril en Montevideo frente a Peñarol de Uruguay, a partir de las 19:15.

El equipo paraguayo se plantó bien defensivamente desde el comienzo, más allá de que Tucumán estuvo envalentonado por el empuje de la gente.

Con el oficio de sus jugadores de experiencia, Libertad fue resolviendo la complicación que le presentó el “Decano”, que no tuvo al “Pulga” Rodríguez por lesión y basó sus ataques en la movilidad de Leandro Díaz.

Con el correr de los minutos, Libertad fue saliendo de su letargo y contó con algunas opciones de contragolpe y vía aérea, que generaron peligro sobre el arco de Augusto Batalla.

La firmeza de Libertad fue demasiado para el equipo de Ricardo Zielinski, que centralizó los ataques por el medio y favoreció la defensa visitante.

El anticipo ofensivo de Santiago Salcedo, con la cabeza, le dio a Libertad la primera diferencia, quizás un premio excesivo para lo que había sido el desarrollo del partido.

Con la desesperación del “Decano”, el conjunto paraguayo liquidó la historia gracias al ingresado Rodrigo Alborno, que le dio el segundo cachetazo consecutivo a Atlético Tucumán como local.