por Sebastián Arana

Twitter: @sebarana71

Kimberley saldó con un triunfo inobjetable y una buena actuación su debut en casa en el torneo de transición del Federal B de fútbol. Se impuso 2 a 0 a Everton de La Plata con dos goles conquistados, de cabeza, por Víctor Gorrassi y Ricardo Sendra en los primeros minutos del segundo tiempo. El propio Gorrassi luego fue expulsado y esa fue la única mala noticia de la mañana para el equipo marplatense.

El día empezó con una complicación. Alberto Flores, que iba a jugar de movida, tuvo que salir para la clínica para asistir al nacimiento de su hijo. Y Damián García se decidió por el ingreso de Diego Hidalgo y por un esquema más clásico, un 4-3-1-2 con Giuntini como enlace y Azurmendi recostado sobre la izquierda de la línea de mediocampistas.

Kimberley asumió el cambio con las mismas intenciones de atacar de siempre. En definitiva, lo más importante, más allá de la funcionalidad de los esquemas.

El equipo marplatense empezó a crecer a partir de la entrada en juego cada vez más frecuente de Azurmendi. Pero, de movida, pasó un susto importante. A los 2? Acha ejecutó un tiro libre al área y el balón rebotó en la mano de De Hoyos. Novelli, o no la percibió, o no la juzgó intencional. Lo cierto es que todo Everton reclamó penal.

El elenco platense, a medida que corrían los minutos, se fue sometiendo a los dictados de Kimberley, que complicaba con la movilidad de De Hoyos y Sendra, con Azurmendi tirándose hacia el centro y con las trepadas de Corti por su lateral.

Pasado el cuarto de hora, el conjunto local llegó tres veces a fondo. Con un remate muy peligroso de Azurmendi desde la puerta del área, con un rechazo contra su propio arco de Herrlein que casi se le mete al arquero Benítez y con una incursión por su banda de Corti, que por muy poco no remató Giuntini por el centro.

Tras esa ráfaga, a las intenciones locales le faltó precisión. Y, cerca del descanso, otro susto y otra polémica. Erramuspe levantó la pierna peligrosamente en plancha dentro el área contra Juan Cruz García, a quien le cortó una profunda incursión. Parecía penal, pero Novelli dio un tiro libre indirecto para los platenses, luego desaprovechado.

El complemento fue otra historia. Kimberley en los primeros veinte minutos del segundo tiempo encontró la precisión y le entró a Everton por todas partes. Y con múltiples alternativas. El equipo marplatense no tiene delanteros que ocupen posiciones fijas, pero las llegadas sorpresivas de mediocampistas y hasta defensores desarticularon a un rival que no pudo seguirle su frenético ritmo.

A los 5' ya se puso en ventaja y con dos defensores como protagonistas centrales del ataque. Solaberrieta trepó por su lateral y envió un centro a media altura que fue a buscar Sendra. El ?9? no llegó, pero la pelota derivó hacia el segundo palo para el ingreso vacío de Gorrassi, quien convirtió con un cabezazo corto.

Enseguida, Benítez le sacó un gran remate de cabeza a Sendra tras centro de Servera. Del córner, Azurmendi liberó a Giuntini con un notable cambio de frente y el enlace definió mal frente al arquero.

Finalmente, a los 14', se asociaron Azurmendi y Giuntini contra la banda izquierda y el ?10? envió un centro a media altura que Sendra anticipó en el primer palo con un cabezazo bajo y cruzado para poner el 2-0.

Fue el corolario del dominio kimberleño. El partido, superado los veinte minutos, cambió. Por dos motivos. En primer lugar, los cambios instrumentados por Gustavo Bianco, que agregaron mucha pimienta al ataque de Everton, sobre todo el ingreso de Moleiro. Luego, a causa de la expulsión de Gorrassi, quien vio la segunda amarilla por aplicarle un codazo a Ferretti. Damián García optó por sentar a De Hoyos para rearmar la línea de cuatro con Emiliano Fortete y Kimberley perdió presencia ofensiva.

El protagonismo cambió de manos. Everton presionó y tuvo sus chances. Pero Morata resolvió bien un par de veces para desviarle un tiro libre a Alvarez y para tapar un mano a mano ante Ferretti y Moleiro perdió una oportunidad nítida definiendo un mano a mano por arriba del golero.

Kimberley también tuvo sus oportunidades, pero Benítez volvió a lucirse para desviar un tiro libre de Giuntini y un cabezazo franco de Emiliano Fortete.

Ya nada torció el 2-0, resultado final del encuentro. Lógico hasta la expulsión de Gorrassi. Con las armas de siempre, el equipo marplatense ya se perfila como un protagonista de peso dentro de la zona 4.