BUENOS AIRES.- Sólo un año después de conseguir la categoría de árbitro internacional, al platense Mauro Vigliano le llegó la gran oportunidad de su carrera, la de dirigir el Superclásico entre River y Boca que concentrará todas las miradas del fútbol argentino, que se disputará el domingo desde las 17.15 en el estadio Monumental.

Vigliano tiene 39 años y heredó la profesión de su padre, Jorge Vigliano, ex árbitro de primera división y director desde su fundación de la Escuela Superior Platense Arbitros, donde se graduó quien será el juez principal del choque del domingo a las 17.15 en el estadio Monumental.

También sus hermanos, Paulo y Enzo Vigliano, siguieron la tradición familiar, aunque solamente el primero continuó y actualmente controla partidos del ascenso argentino.

En esta oportunidad, el mayor de los hermanos Vigliano, quien cuenta con experiencias en los clásicos de Avellaneda y Rosario, cumplirá con unos de los objetivos máximos que se traza todo "hombre de negro" al momento de comenzar esa carrera.

El árbitro del Superclásico, quien estará secundado por Javier Uziga y Sergio Zoratti, probó con el fútbol, el rugby y la natación, hasta definirse por su actual profesión.

De todas maneras, aclaró que el referato "no vino a reemplazar otra vocación frustrada".

Tanto River como Boca tiene con él saldo favorable: los de Nuñez ganaron cinco partidos, empataron tres y perdieron dos, mientras que los de La Ribera vencieron en dos encuentros, igualaron en cuatro y cayeron en una oportunidad.

En el presente torneo de primera división 2014, el árbitro platense dirigió a River en uno de los tres partidos que afrontó en la divisional, además de Independiente 4 - Vélez 0 (3° fecha), Belgrano 3 - Rafaela 0 (5° fecha). Fue en la sexta fecha cuando River le ganó como local 2-0 a Tigre.

Como preparación, para ir calentando motores, Vigliano dirigirá hoy All Boys-Sarmiento, por la Primera B Nacional.

El domingo, en tanto, le llegará el momento de dar el mayor examen de su carrera.

"Me llega en un buen momento"

Mauro Vigliano consideró que se siente "preparado" para afrontar ese partido y sostuvo que la oportunidad le llega en "un buen momento".

"Uno trabaja para esto, no sé cuándo es el momento justo. Hoy me siento preparado, me llega (la oportunidad) en un buen momento", resaltó el árbitro platense de 39 años, quien por primera vez dirigirá un encuentro entre los dos gigantes del fútbol argentino.

Además, comentó que si bien estaba "atento" a lo que pasara en AFA con el sorteo, estaba "muy tranquilo", y que se enteró de la designación "por los medios".

"Es un lindo desafío. Los clásicos argentinos sabemos cómo son, su magnitud, cómo se juegan. El Superclásico, además, es más masivo y tiene otra trascendencia. Así que espero disfrutarlo y que salga lo mejor", remarcó el juez deportivo en diálogo con La Red.

Vigliano admitió además que no será un partido más y que es muy difícil abstraerse de lo que rodea a un Superclásico: "Hay que saber que son dos equipos importantes, un clásico, con todo lo que conlleva".

De todas maneras, aclaró que de momento está "enfocado" en el partido de hoy a las 19 entre All Boys y Sarmiento, de la Primera B Nacional, y afirmó que no le traerá ninguna consecuencia desde lo físico, con vistas al choque del domingo.

"Creo estar preparado desde lo físico. Hay tres días antes del domingo. No lo veo extraño ni raro", aseguró.

Por último, subrayó que dirigir el Superclásico significa subir "un escalón importante", aunque aclaró que espera "que no sea lo máximo", y hasta se animó a opinar sobre cómo llegan ambos equipos. "Los dos equipos están intentando jugar y eso puede hacer que sea un partido lindo desde lo futbolístico", finalizó.