Peñarol afrontará esta noche una dura prueba en el estadio de Once Unidos. Argentino de Junín, verdugo de Quilmes y de su invicto en Parque Luro, lo examinará a partir de las 21.30 en un momento delicado.

El equipo marplatense no contará con el base Fabián Sahdi y con el ala-pivote Alejandro Diez, ambos recuperándose de sendos desgarros. Difícilmente, además, podrá contar con su capitán y símbolo, Leonardo Gutiérrez.

Leo salió en el primer cuarto del cotejo ante Ciclista Juninense con una molestia. Los estudios revelaron una tendinopatía en el tendón de Aquiles. "Hay inflamación y siente dolor", dijo ayer el doctor Martín Paredes, médico del equipo. "En esos casos, la recomendación es que no arriesgue", completó.

En el cuerpo técnico peñarolense existe una gran preocupación sobre la evolución de esta lesión. Si el dolor de Gutiérrez no remite inmediatamente, lo más probable es que también se pierda en principio buena parte de la próxima semana de prácticas. Sin embargo, nunca hay que bajar antes de tiempo al cordobés de un partido. Porque siempre quiere estar.

De confirmarse esta baja, Peñarol quedará seriamente disminuído de personal. Unicamente con Gabriel Fernández como recambio de interno y con Luciano Massarelli como relevo en el perímetro. Y posiblemente con Franco Giorgetti desempeñándose como improvisado ala-pivote, tal como lo hizo en algunos amistosos de pretemporada cuando el lesionado era Martín Leiva.

El rival es peligrosísimo para enfrentarlo con tantos problemas. Argentino lo demostró el miércoles con un partido cercano a la perfección ante Quilmes para despojarlo de su invicto en Once Unidos. El manejo del equipo y de todas las situaciones que realizó su base Franco Balbi fue brillante. El conjunto defendió bien y atacó con mucha prolijidad para alcanzar un triunfo notable. Más allá de los riesgos que entraña el compromiso, si Argentino repite una actuación como la que tuvo frente a Quilmes será, sin dudas, un lindo partido para ver. Y una gran prueba para el conjunto de Fernando Rivero, que arrastra ocho partidos sin perder.