Por Juan Miguel Alvarez

Kimberley estuvo fuerte atrás y blando adelante. Villa Mitre, lo mismo. Los equipos casi no pisaron las áreas en jugadas con pelota en movimiento y el empate sin goles fue un resultado acorde. El conjunto marplatense sigue tercero en la tabla de la Zona 2 del Federal B de fútbol, aunque acumuló el cuarto partido sin ganar.

Una vez más, Kimberley fue un equipo confiable en defensa. Estuvo ordenado, firme en el uno contra uno y no cometió errores individuales. Pero como ya le pasó otras veces, no tuvo precisión y sorpresa cuando se hizo dueño de la pelota y ayer -sin Lucas Vico- careció de peso ofensivo pese al esfuerzo de Damián De Hoyos.

El equipo bahiense jugó los noventa minutos con tres puntas definidos. Pero no le presentó una dificultad mayor a los marplatenses. Al contrario. Los zagueros anularon al lungo Rodrigo Sánchez y los marcadores de punta no sufrieron a los extremos rivales, que casi nunca llegaron al fondo.

Kimberley no aprovechó el mediocampista de más. Algunas veces por las imprecisiones, otras por la falta de movilidad. Francisco Grande entró muy poco en juego y Juan Cebada fue de mayor a menor. Ante la ausencia de Vico (con una molestia física, estuvo en el banco), Diego Ramírez arrancó como delantero y De Hoyos fue la referencia más alta. El otamendino recibió mucho de espalda al arco, lo que fue un impedimento para aprovechar su mejor virtud: encarar con pelota dominada. Y el ex River peleó mucho, pero muy solo, contra defensores que no dieron demasiados espacios. Fue justamente De Hoyos el que generó la opción más clara a los 4': recibió un pase profundo de Servera, le ganó con el cuerpo a Mauricio Kent, metió un taco para perfilarse y sacó un remate al primer palo que tapó Diego Luque.

Después, poco y nada. Kimberley no generó superioridad por el centro y tampoco tuvo profundidad por los costados. Y Villa Mitre solo pateó al arco de larga distancia.

Los primeros minutos del complemento fueron los mejores del conjunto de Mignini. A los 6', tras un gran control de Juan Manuel Rodríguez Rendón, Servera abrió para Ramírez, quien sacó un latigazo bien rechazado por el arquero.

En Villa Mitre, el único que generó desequilibrio fue Nicolás Machado. El visitante apenas arrimó con un tiro libre en el que se pasó de largo Morata y un centro de Machado que fue cabeceado por sobre el horizontal por Sánchez. En el final, Kimberley lo tuvo en una jugada que nació en el córner, pero Solaberrieta no le pegó bien cuando estaba de frente al arco.

Por cuarta vez en cinco partidos en el José Alberto Valle, Kimberley terminó con su arco en cero. Y ayer debutó en la categoría otro juvenil: Matías Barreiro. Las cosas positivas de una mañana con poco para resaltar.