Máquinas simples de metal líquido, capaces de cambiar de forma y moverse en un determinado espacio, que podrían servir en un futuro para crear robots como el T-1000 de la película Terminator 2, fueron desarrolladas por científicos de la Academia China de Ciencias y la Universidad de Tsinghua de Beijing.

Los expertos, citados por la agencia oficial Xinhua, explicaron que estas máquinas pueden adaptar su forma al espacio geométrico en el que se encuentran, movidas por un campo eléctrico endógeno basado en aleaciones líquidas, metales próximos que la máquina puede absorber y el hidrógeno generado por reacciones electroquímicas.

La escuela médica de la Universidad de Tsinghua y el Instituto Técnico de Física y Química de la Academia China de Ciencias trabajan en el desarrollo de estas máquinas, cuyos resultados preliminares se publicaron en la revista especializada "Materiales Avanzados" y reproduce la agencia EFE.

Los científicos chinos definieron estas máquinas con "moluscos biomiméticos" que podrían servir para un desarrollo futuro de robots fabricados en metal líquido y transformable, algo que hasta ahora se consideraba solamente en la ciencia ficción con el T-1000 de la película "Terminator 2".