El papa Francisco hará en julio su segundo viaje a América Latina, con una visita de seis días a Ecuador, Bolivia y Paraguay, que en todos los casos incluirá reuniones con los respectivos presidentes y presencia en más de una ciudad de cada país, plan que ayer fue destacado por las autoridades de la Iglesia católica de la región y hasta por los mismos mandatarios.

El viaje será el primero de sus desplazamientos por América este año, antes de viajar a Estados Unidos en septiembre, y exactamente a dos años de su anterior venida a la región, cuando pasó por Brasil para participar en la Jornada Mundial de Juventud (JMJ) en julio de 2013.

Las fechas del próximo viaje al continente, que el mismo Francisco había anticipado aunque sin precisiones, fueron confirmadas ayer por el vocero del Vaticano, Federico Lombardi.

"Acogiendo la invitación de los respectivos jefes de Estado y de los obispos de esos países", explicó Lombardi, el Papa estará en Ecuador del 6 al 8 de julio, en Bolivia del 8 al 10 y en Paraguay del 10 al 12.

En enero, durante el vuelo de regreso de su viaje a Sri Lanka y Filipinas, el pontífice le adelantó a los periodistas que suelen cubrir su actividad que planeaba visitar esos tres países este año, y Chile, Argentina y Uruguay en 2016, aunque a este futuro viaje podría sumarse Colombia, cuyas autoridades ya formalizaron el pedido.

El viaje a Ecuador, Bolivia y Paraguay precederá al que va a realizar Jorge Bergoglio en septiembre a EE.UU., para participar en la Jornada Mundial de la Familia en Filadelfia y visitar Nueva York, donde hablará en la sede de las Naciones Unidas, y Washington, por ahora sin fecha.

En Quito, el presidente Rafael Correa, y el cardenal y arzobispo emérito ecuatoriano Raúl Vela dieron hoy la noticia de la visita. Correa destacó que "en su generosidad", Francisco había aceptado visitar también la costera Guayaquil -la ciudad más grande del país- y no solamente Quito, como se preveía en principio por motivos de salud de pontífice, de 78 años.

"Felizmente, cambiando el itinerario, el Santo Padre también visitará Guayaquil. Llegará a Guayaquil, de ahí subirá a la ciudad de Quito, continuará a La Paz, luego Cochabamba y luego Paraguay", explicó Correa en una conferencia de prensa que compartió con autoridades de la Iglesia católica.

Esta visita a Ecuador se producirá 30 años después de la que realizó Juan Pablo II, según recordó el cardenal Vela.

Acompañado también por el canciller Ricardo Patiño, Correa resaltó que la llega del Papa será un mensaje "de paz, de unión, de alegría, un motivo de llamado, de compromiso, de felicidad", y se comprometió a trabajar para que visita "sea inolvidable, mejore nuestra Patria, nos haga más humanos, más hermanos, más unidos".

Algunos prelados dejaron entrever que el Pontífice argentino oficiará un misa campal en un parque de Quito, tendrá reuniones en el convento capitalino de San Francisco y visitará el santuario El Quinche y que en Guayaquil tendrá otra reunión con congregaciones y católicos de la zona costera.

Aunque Correa habló del paso de Francisco por Cochabamba, en Bolivia, el presidente Evo Morales y la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) explicaron que el Papa estará en El Alto, La Paz y Santa Cruz de la Sierra.

Sí está resuelto que la agenda del Papa incluirá encuentros con Morales, "con las autoridades políticas y civiles, con los obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas y feligreses" y, según el titular de la CEB, Óscar Aparicio, y algún acto que contenga su deseo de "expresar una particular atención a las periferias del dolor y de la marginación". Es altamente probable que lidere una misa en el penal de Palmasola.

En Paraguay, en tanto, la Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP) expresó su "alegría" por el anuncio de la próxima visita de Francisco al país y resaltó el "vínculo histórico y cultural entre la nación paraguaya y la Iglesia Católica".

En marzo, una delegación del Vaticano recorrió algunos lugares para preparar la agenda del Papa, entre ellos la Basílica de Caacupé, emblema de los católicos paraguayos y destino de peregrinación de miles de fieles todos los años.

Se especula también con que Francisco encabece una misa en el parque Ñu Guasú, el más grande de Asunción, donde en 1988 Juan Pablo II congregó a cientos de miles de personas, y se descuenta que se reunirá con el presidente Horacio Cartes.

"Paraguay, país bendecido. Vaticano confirma visita del Papa Francisco, 10 de julio. Gracias Su Santidad @Pontifex_es por tenernos en cuenta", escribió Cartes en su cuenta de la red Twitter.

En dos años de pontificado, cumplidos en marzo, Francisco solo visitó Brasil en Latinoamérica. En otros viajes estuvo en Israel, Jordania y Palestina, en Albania, y en Sri Lanka y Filipinas.