La Iglesia apostólica armenia canonizó ayer a los 1,5 millones de armenios que perecieron en el genocidio, en una ceremonia sin precedentes realizada en el marco del centenario del exterminio a manos del Imperio Otomano.

Al acto, realizado en la Santa Sede de Echmiadzin, a pocos kilómetros de la capital, Ereván, asistieron los descendientes de las víctimas del hecho calificado recientemente por el papa Francisco como "el primer genocidio del siglo XX", lo que desató las iras de Turquía, que se niega a reconocerlo oficialmente.

La ceremonia, que fue oficiada por el Katolikos Gareguin II, el patriarca de la iglesia armenia, incluyó la unificación de todos los restos que se conservan de las víctimas del genocidio en un solo osario.

También ayer en la Plaza de la República, el conocido grupo de rock System of a Down, integrado por estadounidenses de origen armenio, brindará un recital en un mega-escenario montado para este efecto.

Hoy se realizará la tradicional Marcha de las Antorchas -movilización que es uno de los símbolos de la lucha por el reconocimiento del genocidio-, que partirá como todos los años desde la Plaza de la República en dirección al Monumento de Dzidzernagapert.

Esta marcha culminará en un acto central de homenaje en esa céntrica plaza que estará encabezado por el presidente de Armenia, Serge Sargsian, y contará con la presencia ya confirmada de su par de Rusia, Vladimir Putin, y su homólogo francés, Francois Hollande, entre otros prominentes líderes mundiales.