CERRAR

La Capital - Logo

× El País El Mundo La Zona Cultura Tecnología Gastronomía Salud Interés General La Ciudad Deportes Arte y Espectáculos Policiales Cartelera Fotos de Familia Clasificados Fúnebres
05-07-2015

Continúa la presión europea por el "sí" en Grecia

El presidente del Parlamento Europeo, subrayó en unas declaraciones que reproduce el dominical Welt am Sonntag, que fue el gobierno de Alexis Tsipras, el que condujo a su país a un callejón sin salida, "pero de eso la gente no tiene la culpa".

La presión de parte de la clase política europea para que los griegos voten "sí" en el referéndum sobre las condiciones económicas de los acreedores, continuó ayer a un día de que se celebre la consulta.

El presidente del Parlamento Europeo, el socialdemócrata alemán Martin Schulz, subrayó en unas declaraciones que reproduce el dominical Welt am Sonntag, que fue el gobierno izquierdista del primer ministro griego, Alexis Tsipras, el que condujo a su país a un callejón sin salida, "pero de eso la gente no tiene la culpa".

Según Schulz, "la situación seguro que no mejorará" si el pueblo rechaza en el referéndum de mañana los planes de reforma de las instituciones acreedoras -el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Central Europeo (BCE) y la Comisión Europea (CE)-, porque el Gobierno griego se queda sin dinero.

"Sin dinero nuevo, no es posible pagar salarios, el sistema de salud ya no funciona, el abastecimiento eléctrico y el transporte público colapsan y ya no se pueden importar bienes necesarios, porque nadie los puede pagar", advirtió Schulz.

En tanto que el presidente del Partido Socialista Europeo (PES, en inglés), Sergei Stanishev, pidió a los griegos que "no le den la espalda a Europa".

"El domingo los griegos ejercerán su derecho democrático. Espero sinceramente que al hacerlo no den la espalda a Europa", señaló en un comunicado el presidente del PES.

"Conforme se acerca el momento del referéndum en Grecia, quiero repetir mi mensaje alto y claro. Las imágenes que vimos de Grecia en los últimos días fueron muy dolorosas para todos los europeos. La gente haciendo colas durante horas son jubilados, madres y padres europeos", aseguró Stanishev.

El presidente del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF), Klaus Regling, afirmó que espera un "resultado positivo" del referéndum.

"Hay mucha incertidumbre ahora sobre el futuro de Grecia. Quiero que Grecia sea parte de la eurozona y, por tanto, espero un resultado positivo en este difícil proceso", dijo Regling en una entrevista al diario heleno Kathimerini.

Regling destacó que si gana el 'no' "hay dudas sobre la aplicación de las reformas necesarias" para el país y agregó que "para la aplicación de un programa es necesario un Gobierno que crea en la aplicación de medidas difíciles".

No obstante, el ministro francés de Economía, Emmanuel Macron, reiteró ayer la idea de su Gobierno de que el referéndum es "legítimo", pero consideró que hay una falta de "sinceridad democrática" en el momento y en la cuestión planteada.

El ministro austríaco de Finanzas, Hans Jorg Schelling, dijo que confiaba en una "solución negociada" a la crisis griega aunque asegura que una salida del euro de ese país sería "fácilmente asumible" por Europa.

En una entrevista que publica ayer el diario austriaco Die Presse, Schelling cree que en caso de que se imponga el "no" en la consulta de mañana, habrá más dificultades para llegar a un acuerdo.

"Nuestro mayor problema ya no es el contenido (de las propuestas griegas) sino la destrucción de cualquier confianza entre Grecia y los otros países de la zona euro", destaca.

Por su parte, el ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schauble, subrayó que la decisión de seguir o no perteneciendo a la eurozona depende del pueblo griego, al tiempo que se mostró convencido de que la Unión Europea (UE) saldrá fortalecida de la crisis.

"Grecia es miembro de la eurozona, de eso no cabe duda. Si con euro o temporalmente sin: esa pregunta sólo la pueden responder los propios griegos", dijo el ministro en declaraciones al diario alemán Bild.

Al mismo tiempo, Schauble, caricaturizado por su ortodoxia en los carteles que en Grecia llaman a votar "no", recordó que "una comunidad sólo puede funcionar si sus miembros cumplen las reglas".

Las negociaciones que tengan lugar después del referéndum y una vez expirado el anterior programa se llevarán a cabo "sobre una base totalmente nueva y en condiciones económicas más difíciles" y "esto llevará un tiempo", anticipó.

Estas declaraciones se unen a las realizadas ayer por el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, quien dijo que si los griegos votan a favor del "no" Grecia se verá "radicalmente debilitada".

"Incluso si hay un 'sí', tendríamos que afrontar una negociación difícil". En el caso de 'no', la posición de Grecia estará radicalmente debilitada", indicó Juncker en una rueda de prensa sobre el inicio de la presidencia rotatoria luxemburguesa de la UE.