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01-08-2015

Rajoy se muestró como garantía de la recuperación de EspaÑa

El líder conservador sostuvo que con los nuevos presupuestos se cierra una "etapa dificilísima" y se abre un nuevo período de "crecimiento sostenido y creación de empleo" que "si no se tuerce" puede ser el "más largo de la historia reciente".

El presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, aseguró ayer que España está entrando en un "círculo virtuoso" y que no permitirá que el desafío independentista de Cataluña ponga en riesgo la recuperación, en un mensaje de claro contenido electoral al presentar los presupuestos de 2016 que diseñó pensando en los comicios de fin de año.

"La recuperación está ahí. Se le puede buscar todas las sombras que se quiera, pero estamos ante un cambio de situación indiscutible", dijo Rajoy en una conferencia de prensa en La Moncloa -sede del Poder Ejecutivo español- en la que hizo balance de su gestión antes de irse de vacaciones y luego de presidir el consejo de ministros que aprobó las cuentas.

El líder conservador sostuvo que con los nuevos presupuestos se cierra una "etapa dificilísima" y se abre un nuevo período de "crecimiento sostenido y creación de empleo" que "si no se tuerce" puede ser el "más largo de la historia reciente".

"España está entrando en un círculo virtuoso: más competitividad, más empleo, más crecimiento y menos impuestos", subrayó Rajoy.

El jefe del Ejecutivo recurrió una vez más a las cifras macroeconómicas para apuntalar su discurso y destacó que "España está hoy mejor que hace un año y mucho mejor que cuando llegamos al gobierno a finales de diciembre de 2011".

España acumula ocho meses seguido de crecimiento mientras el déficit público se prevé del 2,8%, y esto es lo que permite al gobierno del derechista Partido Popular (PP) presentar unos presupuestos en los que el "gasto social asciende en un 53%", según afirmó Rajoy.

Además, el mandatario oficializó que los sueldos de los empleados públicos, especialmente castigados por el ajuste neoliberal, subirán un 1%, y también prometió rebajas fiscales para los ciudadanos en un claro guiño electoral.

"De cada 100 euros, 39 se dedican a pensiones, 7 a desempleo y políticas activas, 8 a otros gastos sociales, 14 en aportaciones a las Comunidades Autónomas y 10 euros a pagar intereses de la deuda", remarcó.

El desempleo cayó en España en el segundo trimestre del año a niveles de 2011, situándose en el 22% de acuerdo con la última Encuesta de Población Activa (EPA), aunque el modelo de creación de empleo está asentado en el trabajo temporal y en los sueldos bajos, según los expertos.

"La recuperación llega cada vez a más gente y nos congratula", por eso "queremos revertir poco a poco los esfuerzos que pedimos a los ciudadanos", dijo Rajoy, quien después del duro golpe sufrido por el PP en los comicios municipales y regionales de mayo, y ante los escándalos de corrupción en su partido busca recuperar el terreno perdido.

A pesar de dibujar un panorama económico alentador para España, el presidente del gobierno advirtió que la recuperación afronta varias amenazas de índole política, la principal el desafío soberanista del presidente catalán, Artur Mas, quien pretende convertir los comicios regionales del 27 de septiembre en un plebiscito sobre la secesión.

"El primer reto lo tenemos ante el desafío independentista y rupturista que el Gobierno ha venido planteando y que llegará al punto álgido con las elecciones de finales de septiembre", reconoció Rajoy.

No obstante, insistió en que "España es un país serio y en ningún país serio se puede permitir violentar la ley o sacar algún tipo de rendimiento político de ello".

"No habrá plebiscitarias en Cataluña, como tampoco hubo referéndum". "No va a haber independencia de Cataluña de ninguna de las maneras", sentenció.

Aunque de forma velada, Rajoy también tachó de amenaza al opositor Partido Socialista (PSOE) y la fuerza antineoliberal Podemos al afirmar que "cuando la única propuesta es liquidar todas las reformas se da un pésimo mensaje y se crea incertidumbre".

"Espero que la crisis que hemos vivido estos días, que ha sido muy seria, sirva de lección para todos. Los gobernantes estamos para resolver problemas y no para crearlos", afirmó en referencia al gobierno griego de Alexis Tsipras y sus socios españoles de Podemos, que según dijo, prometen "cosas imposibles".

Asimismo, Rajoy criticó los pactos post electorales de los socialistas y Podemos y presentó al PP como única garantía de estabilidad: "gobiernos que de tres o cuatro partidos y que no respetan la voluntad mayoritaria creo que no son buenos para España", sostuvo.

Ante el mensaje de Rajoy, el PSOE respondió por medio de su responsable de Acción Política, Patxi López, quien acusó al gobierno del PP de "querer sacar a España de la crisis para llevarla a la pobreza".

También en clave electoral, López señaló que el PSOE es "única alternativa" a un PP que solo "ayuda a los privilegiados" mientras exige "sacrificios" a la mayoría, a través del recorte en las becas, la reforma laboral o las reformas fiscales, que a su juicio benefician a los más ricos.

"Solo va a haber dos posibilidades: o sigue Rajoy o gobierna Pedro Sánchez para llevar a cabo un cambio seguro, sin locuras", sostuvo, en un mensaje dirigido a Podemos, que compite por su electorado de centro izquierda.

En tanto, desde la formación liderada por Pablo Iglesias se afirmó que el discurso y los datos de Rajoy "marcan una gran distancia" con lo que "realmente está viviendo la sociedad española que está en paro (desempleada)".

Los presupuestos son "una huida hacia adelante de un presidente y un partido que se saben perdedores", enfatizó la secretaria de Coordinación ejecutiva de Podemos, Ángela Ballester, en declaraciones televisivas.