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04-07-2009

Masivo rechazo al nombramiento del comisario Jorge Palacios

Los familiares de las víctimas del atentado a la AMIA repudiaron la asunción del jefe de la Policía Metropolitana.

BUENOS AIRES.- El nombramiento al frente de la nueva Policía de la Ciudad del comisario retirado Jorge "Fino" Palacios, denunciado en la causa AMIA y otras causas de alto impacto político, recibió ayer un generalizado repudio de familiares de víctimas del ataque a la mutual judía y de políticos de todos los sectores de la oposición.

La polémica medida fue defendida por el ministro de Seguridad, el ex juez federal Guillermo Montenegro, quien justificó la designación en que el alto jefe policial fue "el más condecorado" durante sus años de actividad y no tuvo condenas por las graves acusaciones que pesan en su contra.

Palacios llega a la conducción de la Policía Metropolitana, que ya tiene cerca de medio millar de uniformados en la calle, llega precedida por una estrecha relación que el ex comisario forjó con el jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, desde la época en que intervino en la resolución de su secuestro y llegó a estar vinculado a la seguridad de Boca Juniors.

Las versiones del nombramiento -que se concretó a pocas horas de terminada la elección legislativa- ya habían circulado desde el año pasado, cuando se trató la ley en la Legislatura porteña, pero desde la Comuna los funcionarios evitaron en todo momento confirmar su veracidad.

Finalmente, el jueves se produjo la decisión y provocó una andanada de críticas de los familiares de la víctima del ataque terrorista, por el cual aún no hay ningún responsable detenido, tras errores y posibles encubrimientos de los investigadores.

El propio Palacios quedó sospechado de encubrir a uno de los investigados y ese fue el motivo por el cual un importante sector de la comunidad judía reclamó que se dé marcha atrás con la decisión.

Memoria Activa y Familiares y Amigos de las Víctima de AMIA fueron los más virulentos críticos de la medida y exigieron a Macri que retroceda con la decisión, mientras que las más altas autoridades de la AMIA y de la DAIA -el brazo político de la comunidad- se reunieron para analizar con "seriedad" el caso, aunque evitaron hacer un pronunciamiento público.

Palacios también está acusado en una causa por las muertes en la represión policial del 19 y 20 de diciembre, debido a que se lo vio en la Plaza de Mayo, pese a no estar en servicio; también por haber hablado por teléfono con un integrante de la banda que secuestró al fallecido joven Axel Blumberg, entre otras.

Desde la Legislatura, todos los bloques de la oposición repudiaron y condenaron la decisión del jefe de gobierno, tomada a instancia del ministro Montenegro.

El jefe del Proyecto Sur, Fernando "Pino" Solanas fue uno de los críticos de Macri, a quien acusó de mostrar "su veta poco demócratica y despreciativa" con la designación de Palacios, mientras que el titular del Frente para la Victoria, Diego Kravetz, confirmó que pedirá la interpelación del ex juez federal Montenegro por la polémica designación.

También hubo duros rechazos del presidente del bloque de diputados porteños de la Coalición Cívica, Sergio Abrevaya, definió ayer como "una barbaridad" el nombramiento; y del diputado de Diálogo por Buenos Aires, Raúl Puy, quien aseguró que el jefe de gobierno porteño dejó "la seguridad de la Ciudad en manos de un imputado por encubrimiento".

Ante el creciente malestar social y político por la asunción de Palacios en la nueva policía, el ex juez federal afirmó: "Yo al comisario Palacios lo conozco hace 20 años. A partir de ahí nació una relación fluida. Lo conozco en lo personal y en lo profesional, estuvo 35 años en la Federal. Yo estoy convencido en la buena elección de la propuesta que le hice al Jefe de Gobierno".

"Fue el policía más condecorado en los ultimos 20 años, con premios de Estados Unidos e Israel", señaló Montenegro, para defender la decisión.