"Es una fecha de amigos, la idea es pasarla bien", señala Alejandro Kurz, cantante de la banda "El Bordo". El grupo se presentará esta noche, a partir de las 19, con sus socios de "Salta la banca", liderada por el músico Santiago Aysine. En diálogo con LA CAPITAL, los músicos y amigos comentaron que el espectáculo en esta ciudad será, además, solidario: se recaudarán alimentos, artículos de limpieza y pañales que se destinarán para las personas damnificadas por las últimas lluvias.

Lejos de competir, los dos grupos que nacieron en Capital Federal reconocieron integrar una suerte de cofradía musical, en la que comparten la misma visión del rock.

"La competencia forma parte de unas pocas cabezas todavía viciadas por los egos de la vieja escuela", dispara Aysine, quien es sobreviviente de la tragedia de Cromañón. Y agregó que para las dos bandas de rock, lo central es "el respeto, la empatía, el trabajo y el compañerismo". Kurz coincidió: "Compartimos intereses".

Además de propiciar la asociación entre grupos de rock, los artistas también dijeron estar de acuerdo en dejar de lado el contenido "de reviente" que emanaba de las canciones de otras agrupaciones. "Nos supeditamos a tocar y a manifestar buenas ideas para los jóvenes, hoy proponemos que es necesario trabajar", indica Aysine.

-Si bien no son emergentes, tanto "El Bordo" como "Salta la banca" están en una suerte de piso intermedio, tienen muchos años de trayectoria. ¿Qué opinan del circuito del rock en el país, más allá de Buenos Aires?

Aysine: -Con El Bordo venimos de hacer una gira juntos por el sur, subimos desde Ushuaia y llegamos a Comodoro Rivadavia. Hicimos siete conciertos y vas viendo de todo, pero en general a los productores les cuesta mucho llevar adelante los shows. Yo quiero ir a tocar al norte y no nos reciben, porque los productores dicen que no están para sufrir gastos, no quieren correr el riesgo. Además faltan lugares para tocar y en la mitad de los escenarios no hay baños en los camarines o los camarines son nefastos. Probablemente entrás a un lugar, es superpaquetón pero los camarines se caen a pedazos, el catering es malo.

Kurz: -No creo que haya cambiado mucho la cosa después de Cromañón. La habilitación de los lugares es un tema esencial en este asunto. Y el músico sigue sin saber si los lugares se habilitaron por derecha. Corrés ciertos riesgos que hacen que uno tenga miedo a la hora de tocar, cuando en realidad tocar debería ser una celebración. Sabemos que las condiciones no son las mejores. Y no sentimos que haya cambiado mucho a partir de este incidente desastroso y trágico de Cromañón.

-¿Cómo ven a las nuevas bandas que surgen?

Kurz: -Ahora las bandas ya desde los primeros momentos están preocupadas por cosas que cuando nosotros arrancamos no se tenían en cuenta, como ensayar mucho, sonar bien, tratar de tener buenos instrumentos, preocuparse por la técnica. Agarrás un disco de una banda que está arrancando y ya ves que tiene una búsqueda del sonido desde lo estético. Cuando nosotros arrancamos lo hicimos con el mero afán de tocar y tratar de sacar los temas de las bandas que nos gustaban y no mucho más. Ahora las bandas están teniendo algunas otras preocupaciones por hacer las cosas con más profesionalidad, con un poco más de trabajo.

Aysine: -Notamos que está cambiando la forma de llevar gente. Gracias a las redes sociales agotamos los campos para el show del Luna Park en diez días y sin pegar un afiche. Faltan vender algunas populares. Estamos aprendiendo, esa es la realidad, somos una banda joven y si nos equivocamos es prueba y error.