Esta noche a las 21:30 el músico Pedro Aznar se presentará en el teatro Radio City, ocasión en la que recorrerá el material del álbum ?Mil noches y un instante? publicado a fines de 2015.

El artista puso en marcha una gran gira mundial que comenzó en Chile durante febrero, una distinguida tournée que hoy pasará por Mar del Plata donde sus recitales suelen convocar notable cifra de público en cada oportunidad. A horas de trasladarse a la costa, el consagrado cantautor respondió a LA CAPITAL varias consultas sobre su carrera profesional:

-A finales de los?80 se produjo un crecimiento indudable en la cantidad de asistentes a tus shows. ¿A qué lo atribuís?

-Creo que tiene que ver con la música, principalmente, pero en oro aspecto también con la calidad del show que ofrecemos. La gente sabe que se va a emocionar, que disfrutará de un sonido excelente, una hermosa puesta en escena, un show cuidado en todos y cada uno de sus aspectos. Musicalmente, siento que me he ido acercando cada vez más al oyente que fui yo mismo de chico: un pibe que amaba mucho las canciones y se la pasaba canturreando y golpeando tachos en el fondo de su casa. Me fui aproximando cada vez más a todo eso y dejando atrás ciertas en ese sentido búsquedas "sesudas" que, en el fondo, realmente no me satisfacían ni a mí ni a casi nadie. Hace años que compongo con las vísceras y no con la cabeza.

-Estuviste en el mítico Festival de Viña del Mar como jurado y también haciendo tu show. ¿Cómo te trató el ?monstruo? trasandino y el hecho de homenajear a un gran colega?

-El monstruo nos trató maravillosamente! La gente coreó todas las canciones, aplaudió a rabiar y pidió varios bises, ganamos en esa velada las dos gaviotas, plata y oro. Homenajear a Gustavo Cerati en Chile, país que era su segundo hogar, y también es el mío, fue una emoción muy grande. Los promotores del festival me lo propusieron, y yo sugerí usar la voz de Gustavo que fue grabada en estudio para el disco "Cantora" de Mercedes Sosa, ya que ese arreglo vocal era para ser cantado de a dos, y sería ideal. Conseguí la grabación multipista, después le hice algunas modificaciones estructurales y sincronizamos todo al video de Gustavo grabando en estudio y cantando en vivo. Todo eso fue un momento muy conmovedor.

-Hiciste en el Centro Cultural Recoleta una gran exposición de otra de tus pasiones artísticas. ¿Qué parte de tu pasión asomó en esa muestra que tuvo tan excelente comentarios?

-La fotografía es una vieja pasión, que sólo recientemente decidí profesionalizar. Creo que todas mis fotos están habitadas por lo mismo que mi música: una necesidad de comunicar, un deseo de conmover, de señalar hacia eso innombrable que sólo se puede sentir.

-Deteniéndote en ?Mil noches y un instante?, que testimonia tu presente en vivo. ¿Cuál sentís que es o cómo describirías este momento de tu vida artística? ¿Es la plenitud de un realizador que ha sembrado profundamente en las últimas décadas convencido de lo que llevaba a cabo?

-Creo que sería justo describirlo así. Hoy me siento mucho más liviano y fluido. Hago realmente lo que quiero y disfruto de cada minuto sobre el escenario o en el estudio. Es un momento en que la música fluye de mí con mucha soltura, y eso en parte se da porque tengo un público hermoso, que demuestra cariño a manos llenas.

-Si mañana un gran sello gestase un ?Album tributo a Pedro Aznar?. ¿qué canciones te gustaría escuchar versionadas de tu carrera y cuáles artistas soñarías que tomen parte de eso? -Uy! Qué difícil! Los artistas, no los voy a decir porque no me parece educado dejar gente afuera. Por supuesto que si hubiera alguno de mis héroes musicales, se me caerían las medias! Y en cuanto a las canciones, con el repertorio realizado en la gira del año pasado ("A la carta"), tienen para hacer dulce! (risas)

-No hay nuevos Aznares, Spinettas o Pappos en el semillero musical argentino. Capusotto dijo a los medios que el ?rock se volvió una salida laboral?. ¿Vos que pensás?

-Admiro muchísimo a Capusotto y lo sigo de cerca. Es un humor inteligente, sutil, lleno de referencias, disparatado, irreverente y ácido. Creo que el comentario de la "salida laboral", si es que no lo hizo en broma, puede ser válido en algunos casos, pero sigo viendo a los chicos ponerle el pecho a la música con todo lo que tienen. No creo que sea justo comparar épocas o trayectorias, ya que cada momento tiene su impronta. Lo que vivimos hoy es una catarata de información que nos agobia a todos, y decir algo como artista en medio de eso se hace difícil. Imaginate si recién estás empezando! Siempre hubo y habrá, tocadores, músicos y artistas. Un tocador es alguien que toca su instrumento o canta con idoneidad, pero que no te mueve un pelo de lugar. Músico es alguien que sabe que las notas no son la música, que hay algo entre medio que es lo que importa y te lo hace sentir. Un artista es alguien que le toma el pulso al momento, lo pone en juego en su corazón y te lo devuelve hecho una obra que te cambia la vida. Lo que no hay que olvidar es que todos empezamos como tocadores. Con mucho esfuerzo y dedicación, progresamos a músicos. Y si Dios, nuestra honestidad intelectual y emocional y el trabajo sobre nosotros mismos lo permiten, nos convertimos en artistas.