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02-09-2015

Arquitectura de una biografía que demoró cinco años

Autor de "Cerati, la biografía", Juan Morris habló con este medio sobre detalles claves para armar una narración sobre el músico fallecido en septiembre del año pasado.

Mañana se conmemora el primer aniversario de la partida física del músico Gustavo Cerati ocurrida en una clínica privada del barrio de Belgrano, personaje analizado por el escritor Juan Morris en su libro?Cerati, la biografía?. Justo exactamente hace un año, el joven redactor de la revista Rolling Stone recibía una llamada de su padre para avisarle de la trágica novedad, noticia que lo halló almorzando con sus compañeros de redacción. Esta publicación editada por Sudamericana hace pocas semanas tuvo como fecha de partida un informe que el escritor desarrolló de la última gira del líder de Soda Stéreo, meses después del accidente cerebrovascular que dejó en coma al músico. Tras aquel trabajo investigativo, Morris percibió que había material para armar un texto superior al de una nota en la revista. Juan en una nota con LA CAPITAL cita como testigos centrales de su tarea a Lilian Clark, Adrián Taverna, Richard Coleman y las ex novias de esta estrella musical como las principales fuentes. ?Cuando ocurrió el accidente en Caracas, no estaba en Venezuela, justo estaba en la previa de entrar a Rolling Stone y algunos meses después para conocer lo ocurrido hablé telefónicamente con enfermeras de la clínica donde lo atendieron, pero cuando llamé directamente al hospital no me quisieron atender, Gustavo ya estaba en coma y acontecía el secreto médico, por ese entonces ya tenía armada la idea del libro y era una gran oportunidad, pero no me apuré para entregarlo?, explica Juan y aclara veloz que?nunca entrevisté a Gustavo, sí fuí a varios shows que realizó, pero en aquella época yo escribía en la revista Gente, pero solo tenía una relación con su obra, nada más?. Según el escritor para reconstruir la historia de este artista,hizo?un trabajo obsesivo y enloquecedor,sobre las historias contadas yo preguntaba centenares de cosas, incluidas las expresiones de Cerati ante cada situación,era ejecutar cientos de preguntas en cada caso?. Los primeros 20 años del guitarrista asoman muy detallados y acerca de esta fase, Morris detalla que ?Lilian Clarke con sus testimonios fue clave para poder armar la columna vertebral de esos primeros capítulos, siento que este es el gran testimonio del libro, hablé varias veces con ella y en dos ocasiones fui a su casa, después de aquellos dos encuentros, casi inevitablemente debí ampliar todo lo obtenido con otras veinte llamadas largas, esto sucedía mientras Gustavo se encontraba en el Alcla internado, Lilian sabía que estaba preparando el libro y tras una semana de dudas, aceptó hablar conmigo, pero le sonaba feo el término?biografía? porque ella decía que ese rótulo era lo usual en gente muerta y ?Gustavito? estaba vivo?. Según este escritor, ?ella era muy importante porque no había nadie que me pudiese contar mejor esa parte, una vez acompañé a Lilian a la clínica, con las hermanas no hablé porque ellas no querían hablar en esa situación, me hubiese encantado contar con ese material y al mismo tiempo sentía que en esa dirección el relato de Lilian me cubría toda esa etapa?. Consultado si intentó hablar con los hijos del músico, Morris aclara que ?cuando Gustavo inició esa fase de coma, ellos eran muy chicos, tenían a su padre así, con todo el país y el continente pendiente de lo que sucedía con él allí en la clínica. Más tarde supieron que estaba haciendo este libro, pero no los presioné porque me parecía violenta aquella situación que estaban atravesando?. La reacción de Benito tras la aparición del libro, fue analizada por Juan, señalando sobre el enojo del primogénito diciendo que ?esto supongo que los debe haber incomodado, era una situación perturbadora, con su padre muerto recientemente tras un coma de cuatro años, que aparezca un libro sobre tu padre de alguien que no conocés entiendo cada reacción que pudo provocar, comprendo que en ese lugar podría sentirme de esa manera?. Según el autor, Zeta Bosio se excusó de hablar con él al estar escribiendo su propio libro, en tanto que Charly Alberti sí aceptó dos veces conversar telefónicamente de su colega, pero Morris lo notó muy afectado por la situación. Al final de esta charla, Juan comenta que tras la reacción negativa de Benito, desistió de entregarle el libro a la madre del músico, considerando que eso sería malinterpretado. ?Me encantaría la posibilidad de verla otra vez y agradecerlo otra vez su ayuda, en verdad siento que es un libro que podría gustarle?.