De elegante blanco él, y con short y top al tono ella, los artistas recorrieron los pocos metros desde el interior del hotel hasta el sector externo tomándose fotos con los múltiples admiradores que se habían dado cita allí a pesar del calor reinante.

El primero en cumplir con el ritual veraniego fue Juan Darthés, que siguiendo las indicaciones de Gustavo Alfonso se untó las manos con aceite para, antes de plasmar sus huellas en el cemento fresco, bromear al mostrarlas: "¿quién era que decía 'tengo las manos limpias'?". Las risas cómplices no se hicieron esperar y uno de los veedores le sugirió que "primero las damas", a lo que Milone, rápida de reflejos verbales, contestó que "nosotros somos así, él es caballero y prueba el cemento para decirme si está frío o caliente".

Darthés, ante la atenta mirada de sus seguidores y de su mujer Maria, dejó la huella de sus manos y su firma, en lo que catalogó como "un momento histórico".

Acto seguido, fue Milone quien se arrodilló sobre el almohadón y se preparó para cumplir con la ceremonia, confesando que "desde los 12 años estoy esperando este momento". Luego de seguir al pie de la letra las indicaciones, hundió sus manos en el cemento fresco y posó con total ductilidad para los fotógrafos presentes.

Y, con el punzón en la mano derecha, procedió con paciencia y ansias de perfección a firmar. Ante el intento de apuro de alguno de los presentes, Milone comenzó a entonar a capella "arráncame la vida de un tirón..." para regocijo de todos los presentes. Mientras ella continuaba con su tarea de plasmar su nombre, por el tiempo que se tomaba alguno de los fotógrafos bromeó con que "mirá cuando lo vean tus hijos", a lo que respondió "y los hijos de nuestros hijos".

Ya a esta altura del show, el improvisado público disfrutaba del encuentro con sus artistas.

"Desde que tengo 12 años -explicó a LA CAPITAL- que quería hacer esto. Yo venía de vacaciones y pasaba horas mirando las diferentes baldosas. Con el tiempo iba cambiando de artista preferido".

Asimismo, ambos protagonistas de "Arráncame la vida" se mostraron más que contentos por la temporada que están realizando los lunes y martes en el teatro Auditorium y Milone recordó que "tengo muy buenos recuerdos de la temporada del `91, ya que en ese mismo teatro hicimos Drácula". Darthes, por su parte, calificó al hecho de haber dejado plasmadas sus manos como "la mejor manera de coronar la buena temporada que estamos teniendo".

Luego, ambos brindaron con el anfitrión Florencio Aldrey "por muchos años más" y felices partieron rumbo a los estudios de LU9, dónde Cecilia Milone conduce su programa radial y ayer tenía de invitado especial a su coequiper sobre el escenario.