El intendente de Vicente López, Jorge Macri, aseguró que si UNEN decide no acordar con el Pro "varios de sus principales referentes se van a sumar a Mauricio"

"Muchos de sus integrantes quieren construir con nosotros", resaltó Macri durante una entrevista con LA CAPITAL realizada ayer a la tarde en el Hermitage Hotel.

El intendente de Vicente López también destacó el crecimiento en las encuestas de Mauricio Macri y aseguró que ya está en un empate técnico con el gobernador Daniel Scioli y el diputado nacional, Sergio Massa, en la carrera por la presidencia. "Hemos hecho muy bien todos en concentrarnos en fortalecer su posicionamiento más que pelear por espacios. Ahora Mauricio está ganando en varias ciudades del interior y eso nos obligó a analizar el siguiente paso", afirmó.

- ¿Ese siguiente paso es apuntalar su candidatura a gobernador?

- Yo quiero ser gobernador algún día. No sé si me tocará el año que viene, pero me preparo por si esa oportunidad está porque Mauricio siente que puedo ser su mejor gobernador. Uno no sólo tiene que discutir quién es el mejor candidato si no quién, además, puede gobernar una Provincia que es un gran desafío y que tiene problemas muy difíciles pero plantea inmensas oportunidades.

-¿Cuáles son esos problemas y desafíos?

- La provincia tiene mucho que mejorar. Hay muchos temas para desarrollar. A mí me cuesta encontrar ejes de gestión exitosos en la provincia de Buenos Aires. Es una provincia que tiene una deuda desde lo social muy grave que probablemente se manifieste de manera más dramática en la cantidad de chicos que abandonan la escuela secundaria. Casi la mitad de los chicos que van a escuelas públicas no terminan el secundario. Esto quiere decir que más del 30% de los pibes no terminan el secundario. Se ha instalado una lógica donde los ni-ni, no estudian ni trabajan, que es una realidad cotidiana. Creo que eso se puede revertir. Y lo estamos haciendo en Vicente López copiando el modelo de Medellín.

-Hoy son pocos los políticos que dicen querer gobernar la provincia de Buenos Aires. ¿Por qué ocurre esto?

-Es lindo ser candidato pero hay que tener actitud para agarrar la papa caliente que es gobernar la provincia de Buenos Aires. Hay muchos que podrían, pero se dicen `yo en ese lugar mejor no´. Así que hay mucha dirigencia que por ahí está capacitada pero no se anima y no tiene actitud para enfrentar el desafío de dar una lucha contra el narcotráfico, discutir con los gremios provinciales y preparar a la policía para que vuelva a ser una institución que trabajar en serio.

-Usted ha conseguido un triunfo para el Pro en Vicente López pero aún la propuesta del macrismo no está arraigada en la provincia. ¿Qué deben hacer para avanzar en el territorio bonaerense?

- Seguir creciendo y encontrar en cada lugar un representante apropiado. Es muy difícil suplir en ocho o nueve años de historia, años y años que tienen el PJ, el radicalismo y el socialismo. Por ahí nos ha faltado tiempo. No es fácil encontrar en todos lados gente valiosa. Pero sin embargo hoy, en más de cincuenta distritos de la provincia de Buenos Aires, tenemos candidatos para ganar. Eso para una fuerza nueva no tiene antecedentes. Y sobre todo para una fuerza que además plantea algo que es muy interesante: terminar con esta dicotomía que se ha planteado en los últimos años en la Argentina en la que hemos votado entre los que son desprolijos pero gobiernan y los que son honestos pero no pueden gobernar.

- ¿Cree que el Pro necesita un acuerdo con un sector del radicalismo para poder llegar a la presidencia?

- No sé si lo necesitamos pero siempre es bueno tener la apertura de poder encontrar acuerdos con otros que no necesariamente piensan igual a vos. Creo que eso te enriquece y te mejora. No creo en el pensamiento uniformado, donde hay un dogma absoluto. Entonces el ejercicio de estar en diálogo con otras fuerzas políticas puede terminar en acuerdos o no, pero seguro que el diálogo mejora. Si además hay un acuerdo, mucho mejor.

- ¿Pero es necesario UNEN para el Pro?

- No quiero hablar mucho de UNEN porque me parece que tienen que determinar internamente qué quiere hacer. Cuando UNEN sepa qué quiere hacer, buscar un acuerdo o no, ahí tomaré postura. Ahora, sí percibo algo: si UNEN como espacio político decide no acordar, me parece que varios referentes importantes de ese sector van a estar sumándose a lo que Mauricio plantea. Hay muchos que quieren gobernar en sus provincias y sienten que también hay que dialogar con otros y construir con otros. Lo que pasó en Marcos Juárez es una muestra que desde el diálogo se pueden plantearle a la sociedad alternativas superadoras. Es una pequeña muestra porque no es lo mismo ganar ahí que en la Nación, pero demuestra que uniendo distintos sectores se puede ganar.