Los concejales protagonizarán hoy una sesión especial para debatir y votar la revocatoria del mandato de Vilma Baragiola como presidenta del Concejo Deliberante, en un contexto de incertidumbre generado por las renuncias de quienes naturalmente deberían sucederla en el cargo.

Es que ayer, casi en el mismo instante en el que fue acordada la realización de esta sesión, Héctor Rosso (Acción Marplatense) hizo saber su decisión de abandonar la vicepresidencia primera del cuerpo, argumentando que no correspondería que él se hiciera cargo del Concejo luego de haber formado parte de la comisión que investigó a la dirigente radical y propuso su remoción.

Pero horas más tarde, como un acto reflejo de la decisión de Rosso, Carlos Arroyo (Agrupación Atlántica) también presentó una nota de renuncia a la vicepresidencia segunda.

De este modo, la mesa de autoridades del Deliberativo quedó a una paso de quedar disuelta por completo, una vez que se cumpla con la destitución de Baragiola.

Frente a este panorama, ayer la preocupación no sólo estaba centrada en el debate sobre las causas que llevaron a los concejales de varias bancadas promover la remoción de la dirigente radical de la presidencia del HCD.

Por momentos la mayor inquietud se centró en lo que sucedería institucionalmente una vez que el cuerpo se quede sin autoridades.

A lo largo de toda la jornada hubo varias reuniones de concejales con personal administrativo del cuerpo y con funcionarios de la Procuración de la Municipalidad, para tratar de dilucidar cómo proceder de ahora en más.

Según la Ley Orgánica de las Municipalidades, ante la eventual ausencia del presidente del Concejo Deliberante su cargo debería ser ejercicio por los vicepresidentes.

Pero en este caso, ante la renuncia de ambos, corresponde que esa función la ocupe alguno de los titulares de las comisiones internas, según su orden de importancia.

La comisión más importante es la de Hacienda, que casualmente preside Rosso, quien hizo saber que en este contexto no está dispuesto a reemplazar a Baragiola bajo ninguna circunstancia.

La siguiente comisión en orden de relevancia es la de Legislación, que está a cargo de Ariel Ciano (Acción Marplatense) quien en estos momentos se encuentra de licencia. Por lo tanto, la sucesión llega a manos de la presidenta de la comisión de Obras, Cristina Coria (UCR), que anoche aseguró a LA CAPITAL que se hará cargo de la presidencia con el único fin de respetar la institucionalidad y evitar que el Concejo quede acéfalo.

El origen del caso

Lo que surge como un hecho evidente es que seguramente Baragiola terminará siendo desplazada de la presidencia luego de que una comisión especial dictaminara que "defraudó la confianza de sus pares" y que cometió "una falta grave".

Las posturas frente a este dictamen ubican a Acción Marplatense, el Frente Renovador y el Frente para la Victoria a favor de la remoción, a la Agrupación Atlántica en un lugar aún indefinido y a la UCR en una postura de lógica defensa de su dirigente. Al margen de la inédita situación que se desencadenó ayer tras las renuncias de los vicepresidentes del cuerpo, todo parece encaminado hacia cumplir con la revocatoria del mandato de Baragiola, quien de este modo volverá a convertirse en una concejal más tras quedar salpicada por una denuncia de la dirigente del Sindicato de Camioneros, Eva Moyano. El origen del caso tuvo lugar en el mes de mayo, cuando Moyano denunció públicamente que el radicalismo le había solicitado "colaboraciones" durante el tratamiento de un expediente. En ese momento el gremio pretendía que fuera aprobado un proyecto de ordenanza para desafectar del listado de bienes patrimoniales un chalet de su propiedad, ubicado en Santa Fe y Falucho, con la intención de utilizar ese terreno para ampliar las instalaciones del hotel que funciona en un lote lindero. En ese contexto el Comité de la UCR presentó una denuncia ante la Justicia exigiendo que Moyano se retractara. La sindicalista declaró entonces ante la Fiscalía de Delitos Económicos, donde dijo que "nadie pidió una cantidad de dinero". Pero dejó en manos de la Justicia la filmación de una charla mantenida en su oficina con Baragiola, Costantino y el asesor del bloque radical, Emiliano Mensor. A partir de esto, el Concejo resolvió expulsar a Costantino y puso en marcha una comisión para investigar la actuación de Baragiola, que finalmente recomendó revocar su mandato. En su defensa la concejal argumentó la existencia de una campaña en su contra para desprestigiarla como eventual candidata a la intendencia, tras haber encabezado la lista del Frente Amplio Progresista que triunfó en las legislativas pasadas.

A pesar de que la Fiscalía todavía no adoptó una decisión en torno a la causa, el Concejo decidió constituir una comisión para realizar su propia investigación. A modo de conclusión, determinó que a pesar de lo que disponga la Justicia la concejal ya no debería detentar el cargo que le otorga la representación de todo el Departamento Deliberativo local.