Un policía que se encontraba de civil mató ayer a la tarde de un tiro en el pecho a un delincuente que intentó asaltar una ferretería ubicada en el barrio Peralta Ramos Oeste.

La víctima fue identificada como Marcos Casado (17), quien falleció en el Hospital Interzonal de Agudos por la gravedad de la herida sufrida.

En tanto, el capitán de narcocriminalidad, de 50 años, en principio fue detenido pero a las pocas horas recuperó la libertad ya que la fiscal del caso, María Isabel Sánchez, consideró que actuó en legítima defensa.

LA CAPITAL pudo confirmar de distintas fuentes oficiales que el adolescente tenía un frondoso prontuario y era el principal sospechoso de haber baleado el domingo a la noche a una menor de 14 años en una pierna. De hecho ya se había liberado una orden de allanamiento para detenerlo.

El caso ocurrió ayer a las 16 en una ferretería ubicada en Talcahuano al 900 cuando el adolescente ingresó con una pistola y a los gritos dijo que se trababa de un asalto. En ese momento en el comercio se encontraban dos empleados y dos clientes, uno de ellos un policía de narcocriminalidad que estaba de franco por lo que vestía como civil.

El delincuente amenazó a los empleados con el arma y pidió que les entregaran la recaudación. Según lo reconstruido por fuentes judiciales y policiales, el efectivo dio la voz de alto y en esas circunstancias el joven gatilló al menos dos veces pero no salió ningún disparo. Luego se produjo un forcejo, el policía sacó su arma reglamentaria y le dio un disparo en el pecho. El adolescente cayó al piso dentro de la ferretería y enseguida el hecho fue denunciado al 911. Poco después una ambulancia llegó hasta el lugar y el joven fue trasladado al Hospital Interzonal de Agudos, donde finalmente falleció por la gravedad de la herida sufrida.

La investigación

Una vez ocurrido el hecho, la fiscal María Isabel Sánchez quedó a cargo de la investigación. En principio dispuso la detención del efectivo y el secuestro de su arma para realizarle las pericias reglamentarias. Pero luego de tomarle declaración a los testigos que vieron el intento de asalto, la fiscal consideró que se trató de un caso de legítima defensa por lo que el policía fue liberado. "Los personas que estaban dentro de la ferretería coincidieron en que el delincuente fue muy agresivo, amenazó de muerte a los empleados y a los clientes y al menos gatilló dos veces su arma", le contó a LA CAPITAL una fuente consultada.

Por su parte, los peritos que trabajaron en la escena del crimen comprobaron que el arma con la que ingresó a robar el joven no estaba cargada.

Según trascendió, el menor era buscado por la policía desde el domingo a la noche cuando en un confuso episodio comenzó a discutir con una mujer y de repente empezó a disparar por lo que hirió a la hermana de la joven en una pierna. En base a la declaración de las víctimas, el adolescente quedó sospechado de ser el autor del ataque y por eso estaba previsto realizar ayer un allanamiento a la casa que no llegó a concretarse porque el joven murió durante el intento de asalto.