DOLORES, - El fiscal general de Dolores, Diego Escoda, negó vinculación entre el asesinato del ayudante de la fiscalía de Pinamar, Atilio Canales, y alguna causa que pudiera estar investigando.

La fiscalía de Pinamar es una de las dependencias de este departamento judicial, por lo que depende de la dirección de Escoda. Por esa razón, en la mañana de ayer se dispuso, además, el duelo por tres días del Ministerio Público Fiscal de Dolores.

Escoda dijo que las investigaciones que tuviera a su cargo la fiscalía Pinamar las llevaba adelante el titular Juan Pablo Calderón y que Canales no tenía en sus manos ninguna causa ?caliente? por lo que consideró que ese no habría sido el móvil de su asesinato.

Luego de conocida la noticia de la muerte de Canales comenzaron a circular en este medio rumores que vinculaban su actividad laboral con la causa de su deceso, especialmente con la investigación de la muerte de Damián Sepúlveda, un detenido que apareció sospechosamente ahorcado en la comisaría de esa ciudad el 12 de enero de 2013, un hecho por el que están sospechados varios policías.

Escoda confirmó que Canales había estado en la fiscalía de General Madariaga cuando ocurrió el hecho y que a finales de 2013 fue trasladado a Pinamar. Sin embargo, negó que estuviera a cargo de la investigación puesto que la llevaba, dijo, el fiscal Calderón.

El traslado, sostuvo el fiscal general, lo había ordenado por cuestiones operativas de la fiscalía, para ?descomprimir?, a raíz de algunos roces con el poder político de esa localidad.

Duelo en el Ministerio Público

El fiscal general Diego Escoda dio a conocer una disposición por la declara ?en duelo al Ministerio Público Fiscal de Dolores por el término de tres días?, durante los cuales se suspenden ? las juras y actos programados?, aunque se garantiza ? la cobertura de los servicios esenciales y cuyas actividades y/o prestación que no pueden ser interrumpidos".