Un delincuente de 31 años fue baleado ayer por un vecino al que asaltó en el interior de su casa del barrio Belisario Roldán, y debió ser conducido de urgencia al Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA).

El hecho ocurrió en horas de la madrugada de ayer, cuando pasadas las 2 el ladrón -que tiene antecedentes delictivos- sorprendió a los habitantes de una vivienda ubicada en Roca y Rauch (ex 192) y les sustrajo dinero y un teléfono celular. Luego, escapó aunque sin percatarse de que uno de los moradores lo perseguiría.

Según informaron fuentes extraoficiales a LA CAPITAL, mientras escapaba el asaltante recibió tres disparos -dos en la espalda y uno en una pierna-, aunque las heridas no lo detuvieron. Al parecer, tras sufrir los balazos corrió hacia su casa, ubicada a la vuelta de la manzana.

Fue entonces cuando el delincuente herido quiso subirse a su automóvil, y personal del CPC que circulaba en un patrullero lo avistó. De inmediato, los uniformados pidieron una ambulancia, que nunca llegó.

Por esa razón, fueron los propios efectivos policiales quienes llevaron al herido hasta el HIGA, sin saber hasta ese momento en qué circunstancias había sufrido el ataque. Al llegar al nosocomio, el ladrón fue atendido por los médicos, quienes dispusieron su internación en terapia intensiva.

Casi en simultáneo, a la sala de primeros auxilios del barrio Belisario Roldán ingresó un joven de 26 años con una fuerte dolencia en el pecho. Era el vecino que minutos antes se había defendido del robo, quien ahora se descompensaba en dicho establecimiento.

Los médicos de la sala sanitaria atendieron al hombre y luego le dieron el alta, tras constatar que estaba fuera de peligro. Para ese momento, la policía ya había averiguado los pormenores de los hechos y notificado a la fiscal María Isabel Sánchez, quien ordenó tomar declaración a la víctima del robo (que también tendría antecedentes delictivos). Sin embargo, eso no fue posible porque hasta el cierre de esta edición los uniformados no habían logrado encontrar al joven, que no estaba en su casa.

Por otra parte, el personal de la comisaría decimosegunda -que está a cargo de la investigación del caso-, recuperó el dinero y el teléfono celular de la víctima. Tanto el efectivo como el artefacto tecnológico estaban entre la ropa del delincuente, quien hasta anoche permanecía con pronóstico reservado.