No fue un debate, pero quedaron claras sus diferentes visiones de la economía y, por extensión, del país. Referentes económicos de los tres principales candidatos presidenciales expusieron sobre la actualidad y el futuro de la economía en el Seminario Nacional de Presupuesto Público, organizado por la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera (ASAP), que concluyó ayer en el NH Gran Hotel Provincial.

La ministra de Economía bonaerense, Silvina Batakis; el gerente general del Banco Ciudad de Buenos Aires, Hernán Lacunza, y el ex presidente del Banco Central Aldo Pignanelli trazaron diagnósticos disímiles de la economía argentina.

El contrapunto más claro surgió cuando les tocó responder preguntas del público. Les consultaron sobre el presupuesto nacional y los decretos para modificar partidas. "Argentina necesita salir del decreto o la ley de emergencia. Esa ley de emergencia fue creada en 2002, en la crisis. No me explico cómo 13 años después sigue habiendo emergencia. Si estamos tan bien como dice el Gobierno, ¿por qué estamos en emergencia?", se preguntó Pignanelli, que forma parte del equipo económico del candidato a presidente del Frente Renovador, Sergio Massa.

"Hoy no tenemos presupuesto nacional. El presupuesto nacional no sirve para nada. Nadie lo toma en cuenta. Se hace formalmente en setiembre para cumplir con una ley y ni siquiera el oficialismo lo toma en consideración. La verdad que es más importante lo que hacen los funcionarios para saltar ese presupuesto que lo que aprueba el Congreso", lanzó Lacunza, uno de los economistas de referencia de Mauricio Macri, el candidato del PRO. "Así que el Ejecutivo está invadiendo las funciones del Legislativo", agregó.

La oficialista Batakis, que fue la única que durante su exposición mencionó a su candidato presidencial y jefe político, Daniel Scioli, salió en defensa del Gobierno nacional. "Nosotros somos todos respetuosos del presupuesto y del debate legislativo. Tanto en el Congreso nacional como en la Legislatura provincial están representados todos los partidos políticos, y ese es el lugar en el que uno tiene que debatir cuáles son las metas que se establecen y por qué no se está de acuerdo. En el Congreso nacional esto se debate", aseguró.

Las diferencias en cada exposición se evidenciaron desde los títulos. "De la abundancia a la escasez", llamó Lacunza a la suya. Y no perdió tiempo para dejar en claro cómo piensa la economía que viene: "No hay espacio para hacer más de lo mismo."

Pignanelli, que a grandes rasgos coincidió con Lacunza, prefirió llamarla "Diagnóstico de la economía Argentina" porque, a su juicio, el principal problema del país es que hay "un mal diagnóstico". Y también fue crítico: "Nos siguen mintiendo con los datos macroeconómicos".

Batakis partió de otra mirada. "Del crecimiento al desarrollo", se leyó en la primera imagen que mostró en pantalla gigante. Pero se limitó a exhibir la gestión en la provincia. "Logramos revertir el déficit fiscal sin pérdida salarial, profundizando el federalismo y desendeudándonos", celebró. También aseguró que el Estado "no está para tener ganancias, sino para invertir en la gente".

Lacunza reconoció "los criterios prudenciales que ha tenido la provincia de Buenos Aires en los últimos dos o tres años en materia presupuestaria", pero advirtió que "no se correspondieron con los de la Nación".

"Tiene un gasto que no se cumple, tiene ingresos exagerados, tiene un dólar que no se corresponde con la realidad, tiene un crecimiento estimado en 3 o 4% cuando tiene una caída de 2%, como el año pasado", comparó. "Si el Estado no se maneja con un criterio presupuestario, si hay un desajuste demasiado marcado, lo termina pagando la gente", hizo notar.

A su modo, Batakis le respondió: "No es que nosotros aisladamente produjimos un presupuesto que hace dos o tres años tiene equilibrio, sino que combinadamente con el Gobierno nacional pudimos a lo largo de todos los años llevar esa gradualidad para conseguir ese equilibrio. Pero las políticas fueron implementadas desde antes."

Las proyecciones presupuestarias que se hicieron en la provincia, acotó, no sólo fueron posibles por las "buenas estimaciones de los recursos provinciales" y el conocimiento de la inversión. "También porque recibimos los datos del Gobierno nacional de cuánto vamos a recibir", destacó.

"Es fundamental respetar las leyes, hacer transparente toda la información. Hacer transparente el presupuesto", reclamó Pignanelli. "A los que no estamos ligados al Gobierno nos cuesta muchísimo trabajo conocer la información real. En general, la información sobre el gasto público nacional llega retrasada y no es muy confiable", criticó.

Según dijo, en los últimos tres años el Gobierno "mintió" con las ventas al exterior. "Yo tengo industria en la provincia de Buenos Aires. Y si a mí el gerente de ventas me miente con la venta mensual, lo echo a patadas", ejemplificó. "Sin embargo, en la Argentina también nos han mentido con las exportaciones, con las importaciones. Hay que transparentar todo eso, si no es imposible administrar correctamente un país."