La Justicia y la DDI dieron con un hombre que distribuía material pornográfico infantil entre los barrios Dorrego y Malvinas Argentinas. También intervino el cuerpo de investigadores judiciales de Capital Federal.

Una espectacular investigación en la que intervinieron una ONG estadounidense, la Justicia y la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI), además de un cuerpo de especialistas porteños, sirvió ayer para detener a un hombre acusado de pedofilia en la ciudad.

Por orden de la fiscal Graciela Trill y del juez de Garantías Gabriel Bombini, los uniformados marplatenses allanaron ayer el domicilio del sospechoso, ubicado entre los barrios Dorrego y Malvinas Argentinas. En dicho lugar, además de consumar la detención, encontraron gran cantidad de objetos incriminatorios.

El caso se inició por acción de una ONG estadounidense que, conforme a la ley de aquel país, es reportada de todo tráfico de material pornográfico detectado en internet a través de las diversas instituciones. Dicha entidad tiene como una de sus funciones llevar adelante la coordinación con las autoridades de diferentes países para que dicha información sea judicializada e investigada.

En el caso de Argentina, los datos se centralizan en el Cuerpo de Investigadores Judiciales de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Desde allí, la información es transferida a los diferentes departamentos judiciales, de acuerdo al lugar donde se ubique el origen del delito.

En el caso de esta investigación, se inició hace cuatro meses debido a la existencia de diez reportes con diversos números de I.P. (número de identificación de la PC), pero con la coincidencia que todos reportaban el mismo domicilio.

Recolectadas las pruebas del caso, la fiscal Trill solicitó al juez Bombini la correspondiente orden de allanamiento y secuestro de elementos, llevada a cabo ayer. Durante la misma, se recabaron 5 módems, 227 DVD, 101 CD (con imágenes pornográficas), una netbook, una PlayStation, tres tarjetas de memoria, un reproductor de MP4, tres teléfonos celulares; una revista con material pornográfico y estuches con imágenes incriminatorias.

En otro orden, además de este material, se secuestró cerca de un kilogramo de marihuana, tomando intervención por este hecho la Fiscalía de Estupefacientes, a cargo Daniela Ledesma y Leandro Favaro.

Una vez cumplimentados recaudos legales en vigencia, el acusado fue conducido a la Unidad Penitenciaria Nº 44 de Batán. Hoy, deberá declarar ante la Justicia.

Según dieron a conocer las fuentes del caso que consultó LA CAPITAL, "lo destacable de esta investigación es la función preventiva que se ejerce". "Cualquier persona que encuentre algún tipo de motivación sexual con este tipo de material pornográfico, podría considerarse, potencialmente, un abusador de menores. De ahí el mensaje a todos aquellos que navegan en internet en busca de este tipo de información, ya sea para su consumo o para distribución: todo queda registrado y, más tarde o más temprano, serán identificados", dijo uno de los informantes.