El candidato a intendente por Cambiemos, Carlos Arroyo, volvió a generar discordia con sus declaraciones. Esta vez provocó el enojo de las autoridades de la Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios (Apyme) a raíz de su anuncio de eliminar la dependencia municipal dedicada a promocionar las exportaciones marplatenses. ?Un director de Comercio Exterior, ¿me puede explicar bien para qué sirve? ¿Qué es lo que vamos a vender?; ¿Cornalitos en latita? Hay cosas que no me cierran?.

Esa frase atribuida por Apyme al concejal llevó a que el presidente de esa entidad, Carlos Filippini, saliera ayer a fustigarlo con dureza y a acusarlo de ser el exponente de un modelo "neoconservador" que propone un "Estado mínimo" y una "desregulación que nos conduciría nuevamente hacia un país y hacia una ciudad excluyente y desindustrializada".

El dirigente empresarial subrayó que la presencia de una dependencia de este tipo dentro de un gobierno local no debería ser descalificada del modo en el que lo hizo el candidato, en especial si se tiene en cuenta que Mar del Plata exporta anualmente bienes y servicios por unos 750 millones de dólares.

"Nuestras exportaciones comprenden una variada gama de productos, desde alimentos y textiles hasta software; máquinas, materiales eléctricos e insumos médicos, lo que garantiza la generación de valor en origen y la ocupación de una gran cantidad de mano de obra local", remarcó. "Apyme, que viene trabajando por el desarrollo autónomo, inclusivo y sostenido del país, con activa participación de las micro, pequeñas y medianas empresas, considera central la presencia y el acompañamiento del Estado municipal en el impulso y en la promoción del sector exportador local, mediante la asistencia personalizada, capacitaciones y el fomento de la presencia marplatense en ferias y rondas de negocios o la organización de actividades como la Expo Industria", sostuvo Filippini al explicar cuáles son, entre otros, los servicios que presta el área de Comercio Exterior de la comuna.

Además destacó que a pesar de que Arroyo desconozca cuál es la función de esa área, lo cierto es que gracias a su actuación dentro de la Secretaría de Desarrollo Productivo el municipio estableció políticas públicas para impulsar el perfil industrial del Partido de General Pueyrredon e incluyó este tema como un asunto central dentro del plan de desarrollo local.

Filippini remarcó que lejos de compartir el criterio de Arroyo acerca de la "intrascendencia" del área de Comercio Exterior, Apyme considera que se trata de una herramienta vital para darle continuidad a las premisas del Plan Estratégico elaborado de manera "consensuada y democrática" y el cual tiene como una de sus metas fomentar el desarrollo productivo e industrial de Mar del Plata y de Batán.

La fuerte reacción de los pequeños y medianos empresarios en contra de Arroyo se agregó a otras críticas recibidas en los últimos meses por el candidato de Cambiemos a raíz de sus controvertidas y drásticas definiciones sobre diferentes temas.

La semana pasada, por ejemplo, sus apreciaciones acerca de papel de la industria tecnológica generaron rechazo en ese sector, desde el cual se advirtió que el candidato mostró tener un gran desconocimiento sobre la situación y las necesidades de la actividad.

Esta observación fue realizada por la Asociación de las Tecnologías de la Información de Mar del Plata (Aticma) y ONG Democracia Digital, tras un debate en el cual Arroyo no se mostró proclive a promocionar al sector y justificó su decisión de no apoyar la creación del Parque Informático. En ese contexto, el candidato también había puesto en duda la continuidad de la Secretaría de Desarrollo Informático de la comuna, debido a que cree necesario eliminar varias dependencias políticas para reducir el gasto. La propuesta de aplicar recortes aparece por estos días como una de las ideas más relevantes en el discurso político de Cambiemos a nivel local.

Es que además de poner en duda la continuidad de áreas como la de Comercio Exterior, el asesor económico de Arroyo, su compañero de bancada José Cano, salió al ruedo con otras propuestas tales como la de dar de baja contratos y convenios, eliminar el pago de horas extras, revisar designaciones de personal y fusionar entes descentralizados.