El titular del Ente Municipal de Servicios Urbanos (Emsur), Eduardo Leitao, aseguró a LA CAPITAL que el servicio de recolección de residuos quedará normalizado en la mañana de hoy, luego de que Mar del Plata amaneciera colmada de basura debido a las dificultades que provocó una protesta de recuperadores, quienes este miércoles interrumpieron el ingreso de camiones al predio de disposición final.

“Entre idas y vueltas, se levantó el corte a última hora de ayer, por lo que no pudieron salir los camiones a hacer el recorrido de las 19 y 20.30”, informó Leitao al tiempo que aseguró que a pesar de estar “con unas horas de retraso”, el servicio se normalizará durante la mañana de hoy.

Ayer, los recuperadores que trabajan en el predio de disposición final de residuos decidieron cortar la avenida Antártida Argentina, en su intersección con la calle 459, para reclamar que sean sofocados los incendios que existen dentro del basural y que les impiden desarrollar su trabajo. La medida de fuerza generó que los camiones de la recolección diurna no pudieron ingresar al predio.

“Una vez que entraron, tuvieron que descargar todo y no pudieron salir a la noche”, explicó el titular del Emsur.

Sobre los reclamos de los trabajadores, el flamante funcionario municipal consideró que algunos de ellos eran “justos” y se comprometió a resolverlo.

Subrayó su voluntad de que los recuperadores “trabajen lo mejor posible”, por lo que, entre otras cosas, garantizó solucionar las condiciones del predio, en especial los sectores A y B, proveer más tanques de agua para la hidratación de los trabajadores y asegurar el control policial en el predio.

En relación a los focos de incendio que imposibilitan el desarrollo de las tareas de los recuperadores, Leitao explicó que el pedido de los trabajadores de “desparramar la basura” para evitar las columnas de humo sólo “sería darle más oxígeno”, hecho que “provocaría más incendios”.

“Los focos de incendio se provocan por el tema de los gases, es algo lógico. Llamamos continuamente a los bomberos, quienes han tenido la mejor de las voluntades para sofocarlos. Después quedan las columnas de humo que intentamos ahogarlas con tierra”, explicó.