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Arte y Espectáculos 27 de julio de 2016

“Trabajo con estos textos porque no quiero subestimar al público”

"Alicia, de regreso al reino de corazones" se presenta todos los días en el Auditorium. Una comedia musical que recuerda que nunca se deja de ser niño, dirigida por Ana María Zaninetti.

En el ciclo A Desaburrir el Invierno se presenta diariamente a las 14.30, en la sala Astor Piazzolla del Teatro Auditorium, el musical “Alicia, de regreso al reino de corazones”, nominado al Premio Estrella de Mar 2016.
La obra es una comedia musical para toda la familia, basada en el texto de Lewis Carroll, que según explica la directora artística de la obra, Ana María Zaninetti, “están adaptados y extraídos del libro. Es un texto filosófico, difícil, reflexivo. Así todo, se crea un ambiente muy particular. Yo trabajo con estos textos porque no quiero subestimar al público”.
También, agregó “me parece que los chicos se encuentran con una propuesta reflexiva pero que no es aburrida, me interesa que puedan encontrarse en ese texto. Y además, la obra es dinámica y eso hace que la historia sea atrapante”.
Con un despliegue de bailarines, actores y cantantes, se vive la maravillosa historia de Alicia, con personajes increíblemente bellos y muy raros, un conejo blanco que lleva un reloj y que siempre está apurado, una oruga que nunca recuerda su nombre, un gato que se evapora dejando sólo su sonrisa, un sombrerero con quien Alicia tomará el té más alocado de su vida, y todo para conocer a la archifamosa Reina de Corazones, fashionista como pocas, y amante fervorosa de los cupcake.
“Alicia recurre a este mundo porque ella tiene miedo a crecer. Por eso es que se agranda y se achica. Es una etapa de la adolescencia en donde no te sentís cómodo con tu cuerpo. En base a eso suponemos que ella encuentra este mundo en donde tiene un montón de desafíos”, declaró Zannineti.
Según Ana María, la obra tiene el objetivo de recordar que uno siempre es un niño en su corazón, con capacidad de asombro, inocencia, visión de chico para ver el mundo y maravillarse.