El proyecto para la nueva ordenanza que regulará el uso de espacio público de los comercios de venta minorista de frutas y verduras ingresará al Concejo Deliberante de General Pueyrredon el próximo lunes. Las modificaciones físicas fueron acordadas entre todas las partes interesadas. Las refacciones de los locales deberán realizarse entre los 30 y 60 días de promulgada la ordenanza.

Las nuevas estanterías de las más de 2 mil fruterías y verdulerías que hay en la ciudad deberán una longitud máxima equivalente de "4 metros total del frente del local, para aquellos que presenten longitud frentista mayor o igual a 8 metros, y 2 metros para aquellos negocios que dispongan de una longitud de frente hasta 8 metros", esgrimió el proyecto de ordenanza.

Los escaparates de exposición de frutas y verduras, ubicados transitoriamente en la acera pública, pondrán disponer de un "saliente máximo de su estructura desde la línea municipal de 40 centímetros y una altura máxima de 1,80 metros, con una altura del piso del primer estante de 25 centímetros", especificó el borrador.

Los comercios deberán realizar éstas modificaciones entre los 30 y 60 días de promulgada la ley municipal. Los ubicados en el sector central (de Boulevard Marítimo a San Juan y de Libertad a Alberti) lo tendrán que concretar en un mes, y los restantes tendrán 2 meses.

El anuncio lo concretó ayer, en el salón de usos múltiples del Ente Municipal de Turismo (Emtur), el subsecretario de Control municipal, Adrián Alveolite, acompañado por la presidente de Umasdeca, Clara Marsulo; el presidente de Abasto Central, Héctor Pellegrino; el director de Inspección General, Eduardo Bruzetta; la presidente del Concejo de la Discapacidad, María Taliro; el subcoordinador de la Comisión de Barreras Arquitectónicas y Urbanísticas, Héctor Bonavena; el presidente de la Asociación Comerciantes Minoristas de Frutas y Verdura del partido de General Pueyrredon, Mario Baldini; y la directora de Discapacitados y Adultos Mayores de la Municipalidad local, Patricia González.

Alveolite agradeció a todos los que participaron en la redacción del proyecto de ordenanza, un trabajo de "muchos meses, en el que todas las partes han comprendido la importancia de construir una ciudad para todos, que es posible en la medida en que todos comprendamos las necesidades del otro y encontremos un justo equilibro entre el desarrollo comercial y los derechos de los demás", señaló el funcionario.

Asimismo, aseguró que se llegó a buen puerto por "la buena predisposición de todas las partes. Pudimos llegar a un acuerdo a través del diálogo y el consenso" para arribar a "un uso más restringido y racional del espacio público".