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Policiales 28 de octubre de 2017

Juzgan al hombre que asesinó a su exnovia y a la pareja mientras dormían

Miguel Ángel Frías (45) llega a debate oral y público acusado de femicidio y homicidio por alevosía por las muertes de Blanca Esteche y Osvaldo Cuelli el 24 de enero de 2016 en el barrio Las Heras. Celos, violencia y amenazas.

El Tribunal Oral en lo Criminal N°1 comenzará a juzgar desde este martes a Miguel Ángel Frías (45), por el doble crimen de Blanca Esteche (48) y Jorge Osvaldo Cuelli (35) ocurrido durante la mañana del domingo 24 de enero del año pasado en el interior de una casa del barrio Las Heras mientras las víctimas dormían.

Frías, detenido en la Unidad Penal 44 de Batán, llega a debate oral y público como único sospechoso, imputado por femicidio, en el caso de Esteche, y por homicidio agravado por alevosía, el en caso de Cuelli. Si bien el fiscal que inició la investigación fue Eduardo Amavet, en el juicio el Ministerio Público Fiscal estará representado por Leandro Arévalo.

Miguel Frías y Blanca Esteche estuvieron en pareja por casi 2 años, hasta que finalmente se separaron promediando 2015. Blanca siempre ocultó la relación que tenía con quien luego la asesinaría: en parte por respeto a su familia y sus hijos y, también en parte por el miedo que sentía por Miguel, quien según allegados a la víctima “se notaba” que era violento y que tenía un vínculo “obsesivo”.

La ruptura entre Blanca y Frías desató aún más esa “obsesión” que sus allegados mencionaron, devenida en constantes acosos y hostigamientos.

“Vas a llorar lágrimas de sangre, te saco de mi vida para siempre”, le escribió Frías a Blanca el 8 de septiembre de 2015, cuando ya estaban separados, al enterarse que su exnovia estaba comenzando una relación con otro hombre. Este tipo de mensajes, serían frecuentes durante los próximos meses.

Últimas horas

El 22 de enero Frías se mostró particularmente “intenso” por Whatsapp. Entre la medianoche y las 3 de la madrugada, hostigó a Blanca con una serie de mensajes: “Dios quiera te perdona lo que me hiciste”, “Te vas a arrepentir de haberme hecho lo que me hiciste”, “Por algo será que no me atendés, seguí disfrutando. Todo vuelve”. Esos y otros mensajes mandó Frías, pero ninguno le contestó Blanca.

El día previo al doble crimen, Fríos volvió a insistir. Entre las 20 y las 24 a Blanca le llegaron una serie de mensajes de Frías, que no respondió, hasta que finalmente leyó: “Te pido que no me engañes, no hagas el amor con nadie, valorame. Perdoname por lo que te hice sufrir, me arrepiento, pero porque te amo”.

Una familiar de la víctima recordó que esa misma noche, horas antes de que Frías apareciera en la casa del barrio Las Heras y asesinara a Blanca y su novio, el hombre amenazó de muerte a Blanca y le aseguró que la asesinaría a ella y a sus hijos.

“Yo le dije que lo denunciara, pero me contestó que no me metiera en su vida. Eso fue a las 12 de la noche”, dijo.
Ese sábado 23 de enero, en la casa de Fortunato de la Plaza al 9600, Blanca se acostó en su cama junto a su novio, Jorge Cuelli. Hacía calor, y ambos estaban desnudos bajo las sábanas y se quedaron dormidos.

La mañana sangrienta

Por la mañana del 24 de enero, pasadas las 7, Blanca se despertó al escuchar que los vidrios de la ventana de su cuarto se rompieron. Vio entrar a un hombre al que identificaría como Frías, quien con un cuchillo en la mano arremetió contra Cuelli, que despertó al recibir la primera apuñalada en la cabeza.

Luego de asesinar a Cuelli, Frías fue contra Blanca, que al encontrarla desnuda comenzó a acuchillarla en el cuerpo, el cuello y la cabeza. “Herna, Herna, levantante que Miguel (Frías) apuñaló a mí y a Jorge (Cuelli)”, gritó Blanca para despertar a su hermana, que al darse cuenta de la situación salió desesperadamente a buscar ayuda de los vecinos.

Cuando la ambulancia llegó, Cuelli yacía muerto en el suelo, desnudo y cubierto de sangre, mientras Blanca estaba al costado gravemente herida.

La mujer fue inmediatamente trasladada al Hospital Interzonal. En el trayecto al nosocomio, Blanca, sin que sea una declaración formal, habría señalado más de una vez a Frías como el responsable del hecho. Una vez en el hospital, la víctima ingresó al quirófano, pero los médicos no pudieron salvarle la vida y luego de 10 o 12 horas falleció producto de las numerosas puñaladas.

Frías fue detenido esa misma tarde al salir de su casa, también del barrio Las Heras. Si bien el fiscal Eduardo Amavet no pude tomarle declaración a blanca para que repitiera la acusación contra su expareja, testigos pudieron asegurar que la mujer lo mencionó y lo señaló.

La autopsia sobre Cuelli luego confirmaría que murió a causa de heridas múltiples de arma blanca y que el mecanismo de la muerte fue hemorragia masiva por sección vascular grave. Además, el médico que realizó el informó aseguró que la víctima “no tuvo posibilidad de defenderse”.

Por su parte, el informe de la autopsia realizada a Blanca Esteche de cuenta de múltiples heridas en cuello, tórax y miembros superiores. Los médicos certifican que la mujer ingresó lúcida -y que de esta manera pudo haber señalado a Frías como el responsable- y que falleció a las 10 o 12 horas. La herida mortal fue en el cuello, que penetró la médula cervical.

Frías estuvo en prisión desde que fue detenido. Durante el período que duró la investigación le realizaron pericias psicológicas que destacan que en sus relatos “tiende a justificar sus acciones con argumentos pueriles y contradictorios” y que “se ubica en una postura de víctima de las circunstancias, en especial en relación a las mujeres con que ha mantenido relaciones sentimentales”. A la pericia le acompaña una recomendación para que Frías se someta a un tratamiento psicológico.

El próximo martes, el fiscal Leandro Arévalo será el encargado de acusar frente al Tribunal Oral en lo Criminal N°1 a Miguel Frías, imputado por femicidio y homicidio agravado por alevosía, por los asesinatos de Blanca Esteche y Jorge Cuelli.