"La imágen recobrada" recobra la memoria cinematográfica argentina
Otro libro que se presentó en el marco del Festival de Cine de Mar del Plata.
La presentación del libro "La imagen recobrada", una compilación de artículos sobre el papel que el Festival de Cine de Mar del Plata cumplió en el cuidado y la restauración del patrimonio fílmico argentino, es sólo una muestra del enorme interés que este certamen está demostrando en su 30ma. edición por la recuperación de la memoria cinematográfica argentina.
El libro, que justamente lleva el subtítulo "La memoria del cine argentino en el Festival de Mar del Plata", es una valiosa compilación de la periodista Daniela Kozak de artículos sobre la preservación audiovisual cuyos autores son la directora del Museo del Cine porteño, Paula Félix-Didier, el coleccionista, restaurador y programador, Fernando Martín Peña, y el crítico cinematográfico Roger Koza.
Los especialistas en preservación audiovisual calculan que al menos el 90 por ciento del cine mudo y el 50 por ciento del cine sonoro argentino están perdidos, y debido a eso el festival marplatense impulsó el rescate, la restauración y la preservación de numerosas películas argentinas.
Además de recuperar y restaurar algunos de los clásicos del cine nacional, también ha exhibido los rescates hechos por otras instituciones, lo cual lo llevó a convertirse con el correr de los años en un espacio privilegiado para redescubrir el cine argentino del pasado.
Este libro, que fue publicado por el Festival y fue presentado dias pasados en su edición número 30, explora a partir de miradas complementarias la relación entre el festival y la memoria del cine argentino.
En el primer capítulo, Paula Félix-Didier ofrece un panorama de la actividad llamada preservación audiovisual, analiza cómo la tecnología digital transformó la experiencia del mundo audiovisual y expone los desafíos actuales de los archivos.
En el segundo, Daniela Kozak recorre brevemente la historia de la preservación del cine argentino y describe las iniciativas privadas y estatales que contribuyeron a la toma de conciencia sobre la necesidad de preservar las películas nacionales.
Por su parte, Fernando Martín Peña repasa las distintas actividades (ciclos retrospectivos, homenajes, restauraciones de películas y otras) que llevó adelante el festival desde 1948 hasta 2015 para recuperar la memoria del cine argentino y cuenta el detrás de escena de varios de esos rescates. En el capítulo final, Roger Koza reflexiona sobre los diálogos que establecen los festivales entre el cine del presente y del pasado, analiza cómo la materialidad de las imágenes determina la experiencia del espectador y destaca a los festivales como uno de los últimos espacios, junto con museos y salas de cinematecas, en los que todavía se puede ver cine en soporte fílmico.
Durante la presentación del libro, los autores concidieron en que "al reconstruir la forma en que el Festival de Mar del Plata rescató la memoria del cine argentino y contribuyó a la toma de conciencia sobre la necesidad de preservarlo, esta edición recupera también parte de la historia del propio festival".
El libro es la punta del "iceberg" del genuino interés que el certamen marplatense tiene en relación a la recuperación de la memoria cinematográfica local, ya que además en estas jornadas se llevaron a cabo charlas sobre la recuperación del archivo de un festival de cine, una tarea para nada sencilla, pero imprescindible.
Contar con la historia "que sobrevive a través de imágenes, videos y publicaciones" es el eje fundacional de cualquier festival, ya que permite democratizar la información y lograr un archivo al alcance de todos fue, este año, una decisión firme, clara e irrevocable.
