Walter Erviti: "Boca, como futbolista, es una experiencia increíble"
El marplatense campeón con Boca descansa en la ciudad y charló a fondo con LA CAPITAL sobre varios temas: las claves para obtener el título, Falcioni, Riquelme, su agradecimiento a Dios, su autocrítica como futbolista, el deseo de retirarse en Alvarado y varios puntos más.
por Francisco Giovanoni
Twitter: @frangiovanoni
Muchos buenos futbolistas ha dado el fútbol de Mar del Plata en su historia, pero pocos han tenido tanta resonancia a nivel nacional o mundial. José María Minella, Alejandro Giuntini, Gabriel Amato y Germán Burgos, Fabián Cubero y Walter Erviti. En San Lorenzo, en Monterrey de México, en Banfield y en Boca Juniors, el cuarto club de su carrera donde acaba de obtener el título de campeón.
A los 31 años, el mediocampista marplatense surgido de Talleres descansa en su ciudad, rodeado de afectos y disfrutando un 2011 que se cerró de la mejor manera. En una cafetería de Punta Mogotes, ayer a la mañana, Walter Erviti charló de todo con LA CAPITAL. Un diálogo que fue desde los porqué de Boca campeón, pasando por sus compañeros, el futuro y los momentos más duros.
Lo notarán en cada palabra: Erviti habla pero piensa lo que dice. No acude a formalismos. Tiene una visión de la vida personal y la vida profesional que más de un jugador envidiará en cierto punto. Su tranquilidad, dice, se la debe a Dios. Nunca pierde el equilibrio. Ni el éxito (que bien lo conoce) ni el fracaso (también le ha tocado) lo cambian. Toda la locura que vive el fútbol argentino le pasa por un costado. Él solo quiere dedicarse a jugar, trabajar y mejorar. ?Siempre aprovecho venir a Mar del Plata cuando tengo un tiempo libre. A mí me hace muy bien estar cerca de la gente que quiero, disfruto mucho poder estar acá porque me fui de muy chico y extraño, extraño??, dice Walter al inicio de su charla con LA CAPITAL.
- Cerrás un 2011 que al comienzo parecía difícil que tenga este final?
- Sí, en lo personal, más allá del campeonato con Boca lo que a mí me pone contento es poder estar en un club tan importante como es Boca, compartir la cancha con jugadores tan importantes, conocer gente buena, que me ha enseñado. Eso es lo que más rescato, más allá del resultado, que dentro de la cancha puede variar. Yo priorizo más lo personal que lo deportivo.
- No hacía falta que revalidaras nada en tu carrera, pero ¿sentías que tenías que volver a demostrar, por todo lo que significa Boca?
- Sí, es que en el fútbol siempre hay que demostrar. Uno no puede quedarse con los logros y menos en un club como Boca, con la trascendencia y exigencia que tiene no sólo del hincha, sino del resto de los jugadores que quieren jugar. Entonces hay que demostrar día a día, y está bueno porque eso te exige a vos mismo para superarte, crecer, y es lo que te ayuda a mantenerte en un fútbol tan competitivo como el argentino.
- ¿Fue duro el primer semestre de adaptación? Dijiste luego que no estabas bien físicamente?
- Claro, para arrancar. Quizás tendría que haber tenido un período cuando terminó la negociación entre Banfield y Boca, y el arranque del campeonato, sólo pasaron seis días. Y a mí no me dio tiempo para prepararme como me gusta hacerlo. Aparte, de arranque no conseguimos los resultados deseados y eso complicó más aún las cosas. Fue un error personal porque me dejé llevar por el deseo de jugar con la camiseta de Boca, entrar a la cancha. Pero son cosas que uno aprende. Después, lo demás, todo lleva su tiempo. Boca no venía de un proceso bueno y estaba haciendo muchos cambios para poder mejorar, y a eso había que sumarle trabajo. Al fin y al cabo los frutos se vieron.
- Fue "complicado" tu pase de Banfield a Boca...
- Sí, en lo personal no estoy contento de la manera que me fui de Banfield. No es mi forma de ser, no me gusta. Aparte en un punto me dio vergüenza porque no es lo que deseo para mi carrera. Pero también entendí que si no actuaba de esa manera, si no me hacía cargo de la situación y exigía lo que deseaba, no iba a ser posible el pase porque en Banfield tanto el técnico como el presidente tenían la idea fija de que me quede. Aparte yo veía que en Banfield mi ciclo se había terminado, que las cosas no eran como antes, y era el momento de cambiar. Lamento mucho que la gente de Banfield haya tenido que pasar por un momento así, pero me parecía la decisión correcta en ese momento.
- ¿Es cierto que te peleaste con tu papá Ramón, ya que él se oponía a tu llegada a Boca?
- Sí, pelea entre comillas?él ha tenido un punto de vista diferente al mío, y en un punto me llena de alegría haberle demostrado que yo podía jugar en Boca. Creo que mi papá no me veía. O sea, yo soy una persona muy diferente de lo que puede llegar a ser Boca, ¿no? Boca es un club que llama la atención todo el tiempo, y a mi me gusta pasar más desapercibido, vivir otras cosas. Entonces quizás él tenía algunas dudas desde ese punto de vista. Yo, más allá de todo, intenté demostrarle que lo más importante es lo que sucede dentro de la cancha. Después, lo que pase afuera uno elige vivirlo o no. El estar expuesto, convivir con la prensa, con el hincha? Yo trato de demostrar día a día que puedo jugar en Boca, hacer las cosas bien como las hice en otros clubes.
- ¿Te llevó cuatro o cinco meses convencerlo?
- Sí, sí. No sólo a él, sino a todo el mundo. Pero como dije recién, las cosas no se cambian de un día para el otro. Yo se que la gente tuvo dudas. Venían de tiempo sin ganar, con frustraciones con varios jugadores que pasaron, entonces era obvio que me podían meter en la misma bolsa.
- Cuando llegaste, te hicieron pelear con todos?
- Sí, con todos?pero Boca es eso. Uno que está adentro, convive y entiende cómo es la situación, y hasta en un punto te causa gracia. Porque el familiar, el hincha, que ven las cosas desde afuera se fastidia, no comprende, hasta en un punto se pone mal. Es parte de mi trabajo. Yo soy muy consciente de eso, respeto cada una de las opiniones, se que el 80 % de lo que dicen es mentira, inventos. Se que la prensa tiene que vender, que la polémica en el fútbol y en un país como el nuestro vende. Muchas de las discusiones son armadas. Yo me río y me dedico a trabajar para poder mejorar.
- Hace 2 años, cuando te entrevisté después de ser campeón con Banfield, decías que querías agregarle más gol a tu juego. Haber marcado tres con Boca y ser campeón, no estuvo nada mal?encima cumpliendo una tarea defensiva.
- Sí, quizás hoy lo veo mucho por ese lado, que en el campeonato tuve mucho porcentaje dentro de los partidos en mi campo, el defensivo. Cumpliendo otras funciones, y por eso me pone contento haber marcado tres goles. Y dos de ellos sirvieron para poder ganar partidos importantes. Se que sigue siendo una tarea pendiente de mi estilo de juego, que tengo que mejorar y es por lo que trabajo. Es difícil porque los jugadores que hacen goles son los que realmente valen. Son los diferentes, y no se consiguen fácilmente.
- ¿Qué significó ese arranque de torneo con Juan Román Riquelme en plenitud?
- Román es un jugador diferente, importante para Boca, por todo lo que significa para el hincha, para el club y para los rivales. Ha hecho un gran torneo, lamentablemente se lesionó y eso podría haber complicado todo. Hemos tenido la suerte, va, ¿qué suerte? Me parece que Julio (Falcioni) ha trabajado siempre pensando en lo que podría llegar a pasar, y en el caso de que Román no esté, ya tenía preparado a ?Pochi? (Chávez). Y realmente él hizo las cosas de una gran manera, nos ayudó muchísimo, jugó en una parte del torneo muy difícil y estamos contentos porque hemos logrado las cosas en función de equipo.
- ¿Es Riquelme un jugador tan líder dentro como fuera de la cancha?
- Sí, sí. Román, por experiencia, trayectoria, calidad, es un crack. En el fútbol argentino hay dos o tres que son como él. Nosotros tenemos la suerte de tenerlo y que juegue para nuestro equipo, él está muy mentalizado en poder disfrutar los últimos años de su carrera dentro de la cancha y eso nos hace bien a todos.
- En el Clausura, sin Riquelme Falcioni ponía a Colazo y te cerraba a vos con Somoza; en el Apertura, en cambio, lo puso a Chávez, ¿se debió a la confianza que ya el entrenador tenía en el equipo?
- Eso es por haber conocido más al plantel. Él llegó a Boca, tuvo los primeros partidos de pretemporada sin todo el plantel a disposición, fue conociendo al plantel a medida que corrió el torneo y eso es obvio que perjudica en un punto. Cuando él tuvo la posibilidad de estar más tiempo con el equipo, puso toda su capacidad para lograr lo mejor para Boca. Yo creo que el crecimiento que ha tenido Julio como técnico en los últimos años lo han puesto en la elite de los mejores entrenadores del fútbol argentino. Y a mí me llena de alegría porque lo conozco mucho, lo quiero, le tengo un gran respeto y cariño, pero por sobre todas las cosas porque se la manera que trabaja, cómo se dedica a su carrera y realmente me pone muy feliz por él.
- Una relación con Falcioni que tuvo su momento inicial cuando te bancó en Banfield, mientras eras criticado?
- Sí, yo puedo hablar del aprecio que le tengo a él. Siempre he sentido su apoyo, me ha acompañado y guiado muchísimo. Mi manera de agradecérselo es dentro de la cancha, haciendo lo que el me pide y bien, para lograr cosas importantes.
- ¿Qué destacás de Boca como equipo?
- Creo que nos movimos como grupo en todo momento. En Boca no se ha notado individualismo, más allá que muchos tenemos afinidad o mejor relación que con otros. Nos llevamos muy bien, cada uno sabe el rol que cumple dentro y fuera de la cancha. Eso se ha notado, con tantos cambios y lesiones que ha sufrido Boca. Siempre que entró un compañero fue apoyado y ha rendido para que Boca ande bien. Hemos sido un gran equipo.
- ¿Qué partidos fueron claves para la campaña?
- El partido con Lanús fue difícil, porque fue en su cancha, ante un equipo que venía muy bien. Pudimos superarlos y de gran manera. No nos creó una situación de gol. Ese fue un gran partido, y el otro creo que fue con Colón en Santa Fe. Porque no estaba Román (Riquelme), ni Lucas (Viatri), ni Darío (Cvitanich).
- Se viene una Copa Libertadores con mucha expectativa por parte del hincha, ¿vos cómo la esperás?
- Con trabajo. Vamos a tener que trabajar mucho, sobre todo en este período de pretemporada. Porque Boca, más allá que sea la Copa Libertadores, que tiene un sabor especial para el hincha, es Boca y siempre te exige más. Nos exigirá ese torneo, el campeonato local, también la Copa Argentina. Siempre tenemos que apuntar a ganar. Hemos aprendido lo que es Boca, lo que desea el hincha. Bueno, trabajaremos para poder lograrlo.
- ¿Cómo vivieron el cambio de conducción política, justo el día de la consagración? Dio la sensación que ustedes esperaban otra cosa?
- Mirá, yo no estoy muy metido en la política de Boca. Me dedico a mi trabajo como futbolista y nada más. Sí te puedo decir que se fue un presidente que a nosotros nos hizo sentir cómodos, que ha hecho un gran trabajo, nos ha cumplido con todo lo que prometió. Siempre ha estado al lado nuestro, y más allá de los malos resultados del principio de año y de las alegrías al final, siempre ha mostrado el mismo equilibrio. Nunca una palabra de más, en todo sentido. A mi Ameal me sorprendió para bien, me agradó compartir un año con él en el club y ojalá que la gente nueva que llegó al club tenga la misma posibilidad de triunfar como lo ha hecho él.
?Dios es lo más importante que tengo?
- Antes de cada partido, como siempre, las cámaras te mostraban orando al cielo, con las manos abiertas, ¿cuán importante es Dios para la tranquilidad con que afrontas tu carrera, tu vida?
- Es lo más importante que tengo. Yo encuentro en Dios una relación que a mí me da mucha paz, mucha confianza. Por sobre todas las cosas me da mucho equilibrio para saber cuáles son verdaderamente las cosas que valen en la vida. Cuánto tengo que tomar de importante un resultado de un partido, sea para bien o para mal. A mi hoy salir campeón con Boca no me pone en un altar, ni el semestre pasado me ponía en el infierno. Son sólo resultados deportivos. Siempre es bueno conseguirlos, yo sabía que de la mano de Dios las cosas me iban a llegar. A mi todo lo que me ha pasado en la vida no fue por casualidad. Yo siento que Dios me ha acompañado en todo momento, me ha dado la posibilidad de ser lo que quise ser, de tener una familia que siempre desee, tener la esposa y los hijos que tengo. Yo en ese sentido estoy muy agradecido. Yo cuando oro en los partidos no le pido nada a Dios porque no le puedo pedir más. Solamente le agradezco el momento que me da, la posibilidad de estar dentro de la cancha, y de vivir una tarde de fútbol como las que vivo. Nada más. No le pido que me haga ganar, o ser figura. Solamente le agradezco porque ya me ha dado demasiado y me sigue dando. Realmente me hace muy feliz en el día a día.
- ¿Desde cuándo viene esta relación? ¿Desde chico o ya más adolescente?
- Desde que estaba en las inferiores de San Lorenzo. Siempre me llamó la atención, siempre me gustó leer, investigar, pensar. Empecé a relacionarme más de cerca. Yo no soy una persona que vaya a la iglesia, o que esté orando todo el tiempo. No estoy hablando de Dios. Para mi es más una relación personal, y a mí me gusta más que nada predicar con el ejemplo, si se puede decir así. Ser una persona correcta, de la manera que él lo pide, dentro de sus reglas. A mi me ayuda a tener un equilibrio importante que me da felicidad. Entonces me siento muy cómodo, lo disfruto mucho. Y vuelvo a repetir, todo lo que me ha pasado es por él. Así lo siento. Porque jugadores como yo hay un millón?y si me tocó a mí, es por él. Yo no soy un crack, un jugador diferente, yo tengo muchas limitaciones como futbolista y como me tocó a mí, le podría haber tocado a otro. Tengo la bendición de conocer a Dios y que él me ha acompañado y me ha dado cada una de las cosas que yo deseaba.
- Perdón, pero ¿qué limitaciones tenés como futbolista?
- ¿Como futbolista? Y, un montón. La primera, no hago goles. Para un futbolista no hacer goles?es un desafío importante.
- Pero últimamente cumplís labores más defensivas que ofensivas?
- Sí, pero yo nunca hice goles. Siempre, de chico, tenía el error de pensar que jugar lindo era jugar bien. Hacer un caño, tirar un sombrero, gambetear? y eso no es jugar bien, a mi entender hoy. Después, yo disfrutaba más dar un pase de gol que hacer un gol. Otro error.
- Riquelme dice que disfruta más dar un pase que convertir?
- Sí, ojo, una cosa es lo que uno prefiere y otra lo que realmente es más importante. Después, mi altura. Yo no soy un jugador alto. Lo primero que me dice la gente en la calle es ?pensé que eras más alto?. Mido 1,68 metro. No es muy normal. Tampoco soy un jugador corpulento. Podría ser petiso pero fuerte, como Rivero (Diego), por ejemplo. Pero tampoco. O sea, tengo muchas deficiencias como futbolista. Por eso sé que tengo que trabajar todos los días para aprovechar mis cualidades al máximo, que son las cosas que me han ayudado siempre.
- ¿Y te gustaría tener más libertad y que vuelva el Erviti tira caños??
- Es que mi función dentro del equipo no me permite hacer eso. Si yo juego el 70 % del partido en mi campo, no tiene sentido que arriesgue la pelota. Es más lo que puedo perder que lo que puedo ganar. No es positivo ni bueno para el equipo. Yo he entendido en los últimos años que al fútbol se juega lo más simple posible. Que lo positivo es pasarle la pelota a un compañero, y moverte para poder recibirla de vuelta. Hay cosas que son mucho más importantes que hacer un caño. Lamentablemente yo lo aprendí de grande, pero bueno, gracias a Dios lo pude manejar. Por ahí muchos esperan que haga algo raro con la pelota, pero en la posición que juego es innecesario. Me limito a lo mío.
- Cuando sucedió aquel episodio del supuesto doping positivo, en Banfield, ¿llegaste a pensar en dejar de jugar al fútbol?
- Sí, porque como te decía, tanto trato de convivir con Dios que para mí no es bueno aparecer en una situación como esa. Después no me parece un buen ejemplo para mis hijos. Yo tengo tres varones que el día de mañana me pueden llegar a preguntar de la situación y no me gusta. A mí me pueden decir que jugué mal un partido, que soy malo para el fútbol, pero que digan que traté de sacar ventajas o que me drogué para ganar un partido de fútbol?no me entra en la cabeza. Por eso me fui de Banfield también, porque en ningún momento me aclararon la situación, nunca me dijeron qué sucedió. La gente de Banfield puede pensar que me fui a Boca porque me pagaban más, o porque es un club más importante. Yo me fui porque no estaba cómodo, pasaron diferentes cosas.
?Me retiraré en Alvarado sólo si es un club serio?
Es un deseo. Retirarse del fútbol en Mar del Plata, ante su gente, y en Alvarado, club del que es hincha desde chico. Walter Erviti así lo contó a LA CAPITAL, además de pedir seriedad en el club de Jara y Peña, y dejar entrever que con Facundo Moyano en la institución trabajaría en las divisiones menores.
- Te vimos en varios partidos de la campaña de Alvarado, incluso el fin de semana pasado en Tandil, ¿juega bien Cornejo, no?
- (Risas) Yo no hablo de Cornejo cuando Cornejo está presente. Pero sí, juega bien. Lo tiene que demostrar dentro de la cancha, no soy yo quién para decirlo. Vengo a ver a Alvarado porque soy hincha desde siempre, no de ahora. Disfruto mucho del equipo, más allá que juegue ?Toto? o no. Siento en Alvarado un sentimiento que no lo encuentro en otro club. Es un deseo por verlo ganar que es difícil de explicarlo. Entonces trato de estar cerca, participar. Vengo a verlo sin ningún deseo más que el triunfo, como cualquier otro hincha. Por eso a veces cuando los periodistas me quieren hacer una nota mientras estoy viendo el partido, no la hago, porque yo no veo que le hagan nota a todos los hinchas que van a la cancha. No tiene mucho sentido dar una nota. No me gusta, me hace sentir incómodo, no es ni el momento ni la situación. Trato de participar como un hincha más.
- ¿Qué te pareció el equipo de Murúa?
- El equipo jugó el mejor partido que he visto (el domingo, 2 a 0 sobre Independiente de Tandil), tuvo la suerte Gastón (NdR: su hermano) de hacer un gol, que siempre es importante. Me parece que ahora viene la parte más difícil del torneo. Se ha hecho un buen semestre pero lo importante viene ahora para el club. En ese sentido, como futbolista entiendo que para que se logren cosas importantes tienen que estar todos en la misma línea. Alvarado ha tenido hechos difíciles de entender en el último tiempo, cosas innecesarias que van más allá de lo deportivo, que no llevan a nada. Ojalá esas cosas no vuelvan a suceder porque perjudican sobre todo al hincha que va a la cancha y quiere ver un equipo de fútbol. Y el hincha está más allá de quién sea el presidente del club, el técnico o quien juegue. El hincha quiere ver resultados positivos y eso se lo tiene que dar la gente que está en el club.
- ¿Qué condiciones se tendrían que dar para que te retires jugando en Alvarado?
- Que Alvarado sea un club serio. Es lo primordial. Si no seguiré participando como hincha y nada más. A mi me encantaría retirarme jugando en Alvarado, jugando al lado de ?Toto?, de mi hermano. Me encantaría verlo en otra categoría. Pero si Alvarado no es un club serio, no. Lo tengo bien en claro. Porque no permitiría que a los tres partidos me insulten, como escucho que pasa a veces, con todo el sacrificio que hacen los jugadores para vestir la camiseta. Alvarado hoy como institución tiene muchas deficiencias, que lo ponen en el lugar que está hoy. También entiendo que hay gente nueva, que quiere hacer las cosas bien, como hincha me ponen feliz. Veo un emprendimiento, una seriedad, que antes no había. Pero hay que darles tiempo de trabajo y ver cómo siguen el camino. Ojalá esta gente le de a los jugadores lo que necesitan para poder estar cómodos, y vestir la camiseta de un club tan importante de la ciudad. Que Alvarado hoy esté en el Argentino B es una tristeza para todos. Ojalá podamos crecer y llegar a torneos más importantes.
- Aldosivi llega a primera, y te hace una oferta, ¿qué decís?
- No, yo no puedo jugar en Aldosivi. No sería sincero de mi parte. Lo tengo claro. Tengo mucho respeto por todos los clubes del fútbol argentino, porque es mi trabajo y me encanta jugar al fútbol. Pero uno cuando se pone la camiseta de un club tiene que estar cómodo, feliz para poder hacer las cosas bien. Yo quizás no me sentiría tan identificado, y por respeto al hincha de Aldosivi no podría aceptar.
- ¿Empezás a mirar aunque sea de reojo el retiro, lo que venga después?
- Si, uno siempre piensa. Pero soy consciente también que tengo que mirar el presente y es por lo que más me preocupo. Me encantaría seguir ligado al fútbol, viviendo de él, seguir cerca de Alvarado. Yo estoy tratando de instalar o tener una relación con Facundo (Moyano), que está muy cerca del club. Tratar de acompañarlo en todo lo bueno que está tratando de hacer para el club. Ojalá podamos crecer a la par, tanto yo en una función dentro de la institución como él como dirigente, acompañando a un club que queremos tanto. Ojalá los hinchas de Alvarado lo podamos aprovechar con todo el aporte que está haciendo, darle el lugar y la confianza que necesita para trabajar.
- ¿Te interesaría formar parte de divisiones formativas?
- Sí, es algo que me gusta más que el primer equipo. Me gustan más los chicos, me parece que es una posición donde uno trabaja tranquilo, uno puede tener más tiempo y disfrutar. Ser técnico en el fútbol argentino en primera es muy difícil, hay poco tiempo de trabajo, mucha exigencia. Por eso no es algo con lo que me identifico.
Un mensaje para ?Tato? Rodríguez
- Peñarol también te ha dado alegrías últimamente?
- (Risas) Sí, como a Esteban (Villar, agente de básquet presente en la charla con LA CAPITAL), Leo (Flotta). Nah?Son hinchas de Quilmes ellos? Sí, Peñarol es otra cosa. Me gusta mucho el básquet, lo disfruto y Peñarol ha tenido un gran crecimiento en los últimos años, se ha convertido en el club más importante del básquetbol argentino. Ser hincha de Peñarol es más fácil?se sufre menos, se disfruta más.
- Tato Rodríguez tuvo que retirarse por una afección cardíaca, ¿qué podrías decirle a quien le tenés un aprecio especial?
- Sí, más que aprecio, admiración. A un tipo que ha ganado tanto, que ha sido ejemplo para sus compañeros, sus hinchas, para los jóvenes. Las cosas en la vida a veces te tocan vivirlas, yo en lo personal no me pregunto por qué, sino trato de asumirlas y convivir con ellas, y superarlas. Es lo que le deseo a él. Creo que como deportista ha tenido la posibilidad de vivir cosas que otros no han vivido, entonces qué bueno lo que le ha pasado. A nosotros nos llena de felicidad que lo haya podido vivir, porque otros no pudieron. También lo que le toca vivir hoy, otros no lo han vivido. Pero con la fuerza que tiene y ha demostrado, seguramente lo va a superar. Yo no espero menos de él por la admiración que le tengo, por lo que ha demostrado dentro de la cancha. Imagino que en la vida personal debe ser igual o mejor aún.
