por Vito Amalfitano

SAN PABLO, Brasil.- Fue la llave para entrar por primera vez en la historia grande. Fue el punto de partida que marcó un antes y después. Desde un Argentina - Holanda es que la Selección es verdaderamente una potencia en el concierto de las naciones del fútbol. Desde un Argentina - Holanda es que se puede volver a ser, y se puede empezar a escribir una página única, la del sueño de una final de Copa del Mundo en el Maracaná.

Desde las 17 la Selección enfrentará a Holanda en la segunda semifinal de la Copa del Mundo Brasil 2014 en el Arena Corinthians de Itaquerao, donde empezó todo, allá por el 12 de junio, con el partido inaugural. El partido se podrá ver en toda la Argentina a través de la TV Pública en forma abierta y gratuíta a través del programa Fútbol para Todos, y también por la pantalla de TyC Sports. El objetivo es llegar nada menos que al Maracaná, donde estará la poderosa Alemania.

Argentina - Holanda fue la final del '78, nada menos. Cuando dejamos de ser "campeones morales", en aquella plomiza tarde del 25 de junio, cuando la Selección arrolló en el tiempo suplementario a la que venía de ser "la naranja mecánica", justamente en el primer antecedente de esta historia ya clásica, con el choque en el que Holanda nos pasó por encima en el '74 en Gelsenkirchen, con un 4-0 que nos llevó a girar de rumbo urgente y recurrir a César Luis Menotti para cambiar la historia.

Justamente con un protagonista de aquella primera epopeya, la de la cancha de River en el '78, Omar Larrosa, charlamos aquí en Brasil, en Brasilia, antes de partir para San Pablo. "Menotti cambió la mentalidad del fútbol argentino y nos hizo fuertes a nosotros. Esa tarde fue inolvidable y cuando me tocó entrar fue un sueño. Se dicen muchas cosas de aquella Selección y nos faltan el respeto, había que jugarle así como le jugamos a Holanda eh!...", nos dijo Larrosa, quien finalmente confesó: "Cuando entre a la cancha y desde las tribunas vea esas dos camisetas no se como voy a reaccionar. Ya me emociono solo de pensarlo y recordar todo aquello". "Ellos atacan mucho, hay que aprovechar los espacios", opinó Larrosa sobre este choque de hoy.

Después vino "la revancha" en Berna, que ganó Argentina por penales. Y mucho más adelante en la historia un recuerdo muy traumático, la derrota en el último instante por 2 a 1 en Marsella, en Francia '98, para quedarse en el umbral de las semifinales después de aquella otra epopeya en Saint Etienne ante Inglaterra que pareció aflojar a aquel equipo de Passarella.

Hoy Argentina tiene a Messi, un elegido. Pero Holanda contrapone otro crack y también figura del Mundial, Robben. Los dos equipos llegaron a esta Copa con antecedentes de delanteras temibles y funcionamientos confusos. La Selección no respondió tanto a esas características previas pero llegó hasta aquí por el peso de sus individualidades, Messi siempre, Di María ante Suiza, Higuaín con Bélgica, y el esfuerzo y la competitividad de todos. Holanda se anotó una goleada histórica ante el campeón del mundo, España, lo que ratificó su ?poder de fuego? en ataque, aunque también mostró grietas en defensa, sobretodo frente a Australia. Ante Costa Rica debió haber ganado en el tiempo reglamentario y suplementario pero después se quedó con el pase absurdo mediante de Van Gaal con el cambio del arquero.

El dilema mayor de la Selección Argentina será reemplazar de la mejor manera al lesionado Angel Di María, en el rol fundamental de ser alternativa de pase para Messi.

Sabella ensayó ayer con el mendocino Enzo Pérez en lugar de Di María y con el regreso de Marcos Rojo por José María Basanta, aunque no confirmó el equipo en conferencia de prensa.

Tal como se preveía luego del buen desempeño de Pérez al reemplazar a Di María frente a Bélgica, el ex Estudiantes de La Plata se ganó un lugar para jugar sobre el sector izquierdo, mientras que Rojo, quien se perdió el partido con los belgas por suspensión, volverá al lateral izquierdo en lugar de Basanta.

El entrenamiento comenzó con una entrada en calor a cargo del preparador físico Pablo Blanco, luego el habitual loco en el centro del campo y más tarde, cuando la prensa se retiró tras los 15 minutos que permite observar la FIFA, el ensayo en espacios reducidos.

Por su parte, Holanda probó en el ensayo que se llevó a cabo ayer en el estadio Pacaembú un 5-2-1-2 similar al que presentó en su partido debut frente a España y que terminó con una categórica goleada por 5-1. Robin Van Persie uien no entrenó ayer con sus compañeros por un problema estomacal pero será de la partida. Las variantes con respecto a ese primer cotejo son las entradas de Kuyt por Daryl Janmaat en el puesto de lateral-volante por derecha y de Wijnaldum por Nigel De Jong, lesionado y que se estima que no llegará a tiempo para enfrentar a Argentina, en el mediocampo.

En cambio, en relación a su última presentación, el partido del sábado pasado ante Costa Rica por cuartos de final (0-0 y 4-3 por penales), Van Gaal dispondrá una variante por cuestiones tácticas con la salida del delantero Memphis Depay y el ingreso de De Guzman para reforzar la mitad de la cancha.

En el Arena Corinthians de San Pablo está la llave para el gran escenario, el más deseado del fútbol, una final de Mundial en el Maracaná. Y otra vez esa llave para la gran historia es un Argentina - Holanda. Eso sí, acá, para abrir la puerta, hay que hacer Lío.

Twitter: @vitomundial

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Formaciones

Argentina: Sergio Romero; Pablo Zabaleta, Demichelis, Ezequiel Garay y Marcos Rojo; Enzo Pérez, Mascherano, Biglia y Lavezzi; Messi y Gonzalo Higuaín. DT: Alejandro Sabella.

Holanda: Cillessen; Dirk Kuyt, De Vrij, Ron Vlaar, Martins Indi y Daley Blind; Wijnaldum y De Guzman; Sneijder; Robben y Van Persie. DT: Louis Van Gaal.

Cancha: Arena Corinthians, San Pablo.

Arbitro: Cüneyt Cakir (Turquía).

Hora: 17.