CERRAR

La Capital - Logo

× El País El Mundo La Zona Cultura Tecnología Gastronomía Salud Interés General La Ciudad Deportes Arte y Espectáculos Policiales Cartelera Fotos de Familia Clasificados Fúnebres
17-12-2014

Vildozo, con sabor a revancha

El autor del gol del ascenso confió a LA CAPITAL horas después de su conquista que debe replantearse su continuidad en Aldosivi, pese a tener dos años y medio más de contrato.

por Víctor Molinero

Enviado especial

CORDOBA.- Cuando Angel Vildozo llegó a Aldosivi en el invierno de 2013 se habló de un refuerzo de lujo. El delantero venía de hacerle goles importantes a Boca con All Boys y era pretendido por varios clubes, inclusive algunos de Primera División.

Sin embargo al sanjuanino lo sedujo la propuesta de la institución marplatense. Dijo que venía para ascender y terminó peleando la permanencia. Fue el goleador del equipo pero igual se confesó en falta. Y redobló la apuesta para este torneo de transición. Arrancó jugando con Alfredo Berti pero rápidamente perdió su lugar. Una lesión en la rodilla derecha lo sacó del equipo y quedó totalmente relegado en la consideración del entrenador.

Llegó Fernando Quiroz cuando ya no había margen para el error. El plantel recuperó la confianza y todos aportaron su granito de arena, incluidos jugadores como Vildozo o Federico León que parecían estar al margen.

Vildozo, que estaba más cerca del quirófano que de jugar, decidió aportar cuando más se lo necesitó, quizás relegando un interés personal. Fue sumando minutos desde el banco de suplentes. Convirtió un gol clave ante Boca Unidos, que marcó el inicio de un vuelco épico.

Y el lunes en la cancha de Instituto anotó nada menos que el gol del ascenso. Sin embargo, en su mejor momento desde que llegó al club, Angel no se apartó de la honestidad que lo caracteriza a la hora de enfrentar una entrevista. Y hasta puso en duda su continuidad en el club con el que tiene contrato hasta el 30 de junio de 2017.

Eran las 2 de la mañana del martes cuando Vildozo se alejó unos instantes del festejo que todo el plantel compartía en el Holiday Inn de Córdoba para atender a LA CAPITAL y dejar algunos conceptos que llaman la atención.

- ¿Qué significa para vos este ascenso con un gol tuyo después de todo lo que te tocó vivir?

- Son muchas sensaciones. Uno está muy contento y lo primero que se me viene a la mente es lo que dije aquel día que llegué. Te dije en su momento que venía a Aldosivi a subir a Primera y en su momento algunos lo tomaron como una gracia, como que soñaba demasiado. La verdad que en el primer año no hicimos las cosas bien y nos tocó pelear el descenso hasta último momento. Estuvimos cerca del Argentino A y no salvamos. Después se dio este torneo especial en el que no arrancamos bien. Por eso por ahí, después de lograr el ascenso, uno no termina de caer todavía.

- Vos llegaste con esas ganas pero rápidamente te diste en cuenta que en Aldosivi no todo es tan fácil...

- Sí, yo tenía la visión que tienen todos desde Buenos Aires: que Aldosivi y Mar del Plata son una buena plaza. Pero el año pasado cometimos errores en cuanto al armado del plantel. Lo digo con todo respeto pero hubo jugadores muy jóvenes. Buenos pero con poca experiencia. Faltaban referentes y por eso al momento de entrar en zona de descenso se nos puso duro. Con la llegada de (Darío) Franco se hizo un buen trabajo y pudimos sacarlo adelante. Este año volvimos a errarle en cuanto a la dirección técnica en un principio. Yo creo que para buscar algo histórico tenés que darle prioridad a tus jugadores y la meta. No al esquema o salir jugando. A vos te puede gustar un estilo y todo es respetable pero para buscar algo histórico hay que ir por ese objetivo como sea. A mi enseñaron de chiquito que hay que tratar de jugar bien a la pelota porque a la gente le gusta mirarlo así pero también me enseñaron a ganar. Yo juego para ganar desde que lo hacía con mis amigos en mi pueblo. Y si juego al ping pong quiero ganar. Si se puede salir jugando y sino tirando pelotazos. Para entrar en la historia del club hay que hacerlo como se pueda.

- Quizás en otro campeonato los equipos se acomodaban en el primer semestre y en el segundo estaban mejor armados, jugaban mejor. Pero en este torneo de cuatro meses no hubo margen para eso?

- Acá no había tiempo. Era buscar la gloria, meterse en las páginas doradas del club y que todos se acuerden de vos. Y no era tan difícil en un principio. Después se nos complicó, terminamos jugando más tarde que el resto y se nos hizo largo. Nosotros tenemos un plantel con una jerarquía bárbara, con Campodónico, Lequi, León, Quilez, Canever, ni hablar de Carranza o Lugüercio, Seccafién, Gastón Díaz? Más jugadores que venían haciendo muy bien las cosas como Lamberti y Galván y no era tan difícil. Lamentablemente hubo errores desde la conducción, aunque siempre los máximos responsables somos los jugadores porque no supimos manejar las cosas desde adentro. A veces hay que ser rebeldes. Uno por intentar hacer las cosas bien y manejarse con códigos del fútbol se equivoca y peca de bueno. Tuvimos que bancarnos aprietes, tuvimos que bancarnos amenazas. Hubo jugadores nuestros que quisieron dejar el club por situaciones difíciles?

- Eso no salió a la luz más allá de rumores?

- Hubo muchas cosas que no salieron a la luz porque siempre se priorizó el objetivo que era subir a Primera. Pero hay que destacar a este grupo. Hay chicos que hicieron un esfuerzo muy grande, que recibieron amenazas. Tuvimos que escuchar a gente que vaya al predio y nos diga que fuimos para atrás con Chicago. O que le digan a jugadores que son crack que no dieron todo. Es una locura. Pero son cosas que dejamos atrás, llegó "Teté" y fue frontal, mejoró la comunicación con el plantel, nos dijo lo que necesitábamos escuchar. Se ajustaron detalles, se trabajaron más los partidos y eso nos potenció. Creo que tenemos lo merecido porque hay jugadores para jugar en Primera División.

- ¿La pelota parada es alguno de esos detalles que comenzaron a trabajarse más desde la llegada de Quiroz?

- Son estilos. Para mí el defensor tiene que defender. Si el defensor lo que más hace es jugar o salir jugando y no prioriza el defender estamos equivocados. Insisto, hay matices, porque con Franco nos fue muy buen, salvamos la categoría y siempre le vamos a estar agradecidos.

- ¿Tiene que ver con la convicción o la personalidad del entrenador? Porque Franco y Berti, en líneas generales, apuntan a lo mismo?

- Un poco de todo. La experiencia? quizás nosotros no llegamos a entenderlo y es responsabilidad nuestra. Tampoco toda la culpa es del antiguo cuerpo técnico. Se trabajaba bien en un principio, después no tanto y repito, en un campeonato tan corto los detalles son importantísimos. Por suerte llegó "Teté". Achicamos las líneas, estuvimos bien paraditos de visitante, no nos regalamos, no nos hacían goles fáciles -que en la otra etapa a Campodónico le llegaban mano a mano- y con pequeñas luces de los jugadores distintos como Lugüercio, Carranza o Seccafién empezamos a demostrar que se podía soñar.

- ¿Creíste que era tarde, después de aquella derrota con Colón?

- Sí. Además yo me sentía afuera del equipo. Me sentía inútil, que otra vez íbamos a tener que pasar malas acá cuando el próximo debería ser un año para disfrutar. Uno se imagina lo peor porque si las cosas no se daban me tenía que ir del club. Hay replanteos para los que tenemos un contrato extenso cuando no se logran objetivos.

- Pero vos tenés dos años más?

- Dos años y medio más pero así y todo hubo gente que planteó la posibilidad que yo deje el fútbol por mi lesión. Hubo gente que me pidió que me retire, que dijo que yo no podía jugar a la pelota.

- ¿Gente del club?

- Sí, gente del club. Por eso también estos momentos son lindos. Porque cuando en su momento me dijeron si quería retirarme me generaron un fuego interior que tenía que sacarlo. Y creo que lo saqué en este partido contra Gimnasia porque traté de jugar mi mejor partido en el club. Es lindo demostrar que uno está vigente más allá de haber cumplido recientemente 33 años. A partir de mañana o pasado tendré que replantear mi situación acá, en el club. Yo dije que vine a Aldosivi porque me querían aun cuando tenía otras ofertas. En su momento te dije que me gusta ser querido en un club por eso los cuatro años de contrato, el proyecto. Me pidieron que viniera para terminar mi carrera en Mar del Plata, para llegar a Primera. Yo sentía que me querían a mí, no a un delantero cualquiera. Yo si no siento eso no estoy cómodo.

- ¿Y hoy no lo sentís?

- Hoy sí pero porque hoy, en este momento, todos sentimos la palmada en la espalda. Pero hasta hace un tiempo no me sentí ni importante ni querido. Sí por la gente eh. Para la gente sólo tengo palabras de agradecimiento porque siempre me apoyó. Pero insisto, a mí me gusta estar en un club donde me quieren todos. Hoy debo agradecerle a Aldosivi esta posibilidad que me dio de ascender pero tanto yo como mi familia queremos estar en un lugar donde nos sintamos 100% cómodos.

- En una entrevista anterior me decías que tu familia se había aquerenciado a Mar del Plata y que estaban cómodos acá. ?

- Eso pesa y mucho. Si no fuese por eso quizás ya hubiese tomado la decisión y me hubiese ido.

- ¿Pero te gustaría quedarte?

- Si se arreglan algunas cosas sí. La intención era quedarme a vivir en Mar del Plata. Pero además para jugar en Primera División el club tiene que seguir creciendo y modificar algunas cosas.

******

Y ahí se fue Angel Vildozo a sumarse al festejo con sus compañeros. El autor del gol más importante en la historia de Aldosivi que un puñado de horas después de convertirlo no confirmó su continuidad en el club aun cuando tiene dos años y medio más de contrato.

El siente que cumplió con la palabra que dio cuando llegó un año y medio atrás. Que pudo aportar su granito de arena para llevar al elenco portuense a Primera. Pero para seguir haciendo historia en Mar del Plata entiende que debe arreglar algunos detalles antes. En eso anda por estas horas?