TANDIL (Especial).- Unión consiguió su triunfo más importante desde que juega en la Primera B Nacional de fútbol. Por la necesidad propia ?salió después de mucho tiempo de la zona de descenso- y porque lo consiguió ante Ramón Santamarina de Tandil, que llegaba líder a esta fecha y estaba invicto en condición de local. Con gol de Nicolás Ramírez, el equipo marplatense se impuso por 1-0 en el estadio General San Martín, sumó su quinto partido sin perder y confirmó su despegue en la tabla.

No fue un gran partido del ?celeste?. Pero hizo lo que debía ante un rival diezmado. Golpeó en el momento justo y le cerró todos los caminos a un adversario que suele imponer su poderío ofensivo. Al correcto funcionamiento colectivo en defensa se le sumó otra buena actuación de Nahuel Losada, quien no tuvo tanto trabajo pero apareció con un par de intervenciones claves.

Desde el principio Santamarina se sintió incómodo en el partido. Sin la presencia de Mariano González y Arnaldo González (el primero lesionado y el segundo volvió a Quilmes tras la finalización del préstamo), careció de creatividad en la generación. El mal estado del campo de juego también conspiró ante las buenas intenciones de ambos.

Unión, con sus líneas bien juntas, le complicó la tarea al local. Y también llegó cuando encontró espacios en los ataques rápidos. De hecho, la primera chance clara fue del equipo marplatense. Pero Wilson Albarracín extrañamente definió mal ante Requena. Después, Santamarina arrimó con un remate ?mordido? del balcarceño Federico Azcárate y un cabezazo del siempre peligroso Martín Michel que encontró una buena reacción de Losada.

El único que rompió el molde fue Nicolás Ramírez, muy desequilibrante cada vez que atacó con pelota dominada. El ex Lanús vino desde atrás a toda marcha y, ante la pasiva defensa local, sacó un remate desde afuera del área que se metió abajo, contra el palo derecho del arco de Requena.

El gol provocó una leve reacción del conjunto tandilense, que enseguida pudo haber empatado, pero el juez de línea invalidó el cabezazo de Tucker que terminó en la red.

Gustavo Coleoni movió rápido el banco de suplentes en la segunda mitad, buscando soluciones ofensivas. Sin embargo, Santamarina monopolizó el balón, pero le costó muchísimo profundizar sus avances. Mérito de Unión, que coordinó bien sus movimientos defensivos y perdió poco en el uno contra uno.

Así, la primera posibilidad de riesgo llegó recién a los 28?, después de una jugada de pelota quieta comandada por Maximiliano Timpanaro. Tras un par de rebotes, Juan Arraya sacó un buen remate que iba hacia el ángulo, pero Losada metió un manotazo bárbaro para evitar la caída de su valla.

Unión defendió cada vez más cerca de su área. Más después de los 33?, cuando Sergio Pezzotta ?en una decisión apresurada- expulsó mediante una roja directa a Ariel Seltzer por una falta sobre el debutante Marcos Alzueta. Nahuel Santos -ya había ingresado por Nicolás Castro- pasó a jugar como marcador de punta izquierdo y entró Juan Pablo Manzoco para poblar el mediocampo.

Santamarina arremetió, pero Unión aguantó bien. Hizo todo lento y casi no pasó sofocones hasta el final.

Unión sumó un triunfo vital en Tandil. Por lo que suma a esta altura del campeonato y porque puede servir de envión para continuar con la remontada.