Irán construye una nueva torre de lanzamiento de misiles
Las instalaciones, ubicadas en Semnan, fueron descubiertas por dos satélites comerciales.
LONDRES, Inglaterra.- Irán está construyendo una nueva torre a de lanzamiento de misiles en el centro espacial de Semnan que podría utilizarse para el misil iraní de la próxima generación Simorgh, según la revista Jane.
El semanario británico de Defensa dice que descubrió esas instalaciones, de las que no informaron las autoridades de Teherán, gracias a las imágenes de los satélites comerciales DigitalGlobe y GeoEYE.
Según Jane, esa nueva instalación está ubicada a cuatro kilómetros al noreste de otra ya existente en Semnan, como se aprecia en una imagen captada el pasado 6 de febrero.
El complejo contiene una torre de trece metros de anchura y entre dieciocho y veinte metros de altura, junto a la cual se ve otra estructura casi tan alta como aquélla, y las obras parecen estar a medio terminar.
Aunque la torre no tiene la altura suficiente para el montaje vertical del misil Simorgh, que mide 27 metros de longitud, la lanzadora podría acoger el nuevo misil iraní si aquella estructura se ampliase en diez metros.
Jane dice que observó asimismo una segunda instalación a dos kilómetros y medio al suroeste, situada entre las dos antes citadas, que está en fase inicial de construcción y que por las medidas de seguridad que la rodean parece formar parte del mismo complejo.
Utilizando las imágenes captadas el 11 de febrero por los satélites Ikonos y WordldView-2, la revista británica identificó los misiles Simorgh y Safir-2, mostrados por el régimen de los ayatolas en los desfiles de la plaza Azadi, de Teherán.
Tanto las instalaciones de Semnan como la lanzadera espacial Simorgh demuestran ambas el alto índice de probabilidades de una colaboración de Corea del Norte con el programa de misiles iraní.
Las plataformas vistas en la nueva torre se parecen a las de la nueva lanzadera norcoreana de Tongchang.
El foso de drenaje abierto a 170 metros de distancia frente a la rampa de lanzamiento es similar al visto en la torre de la nueva lanzadera de Tongchang.
Por otro lado, la primera fase del misil Simorgh se parece muchísimo al Unha-2 norcoreano, con cuatro motores arracimados y aproximadamente las mismas dimensiones.
La conclusión de la revista militar británica es que, dadas sus ingentes inversiones en infraestructura para misiles y a pesar de los esfuerzos de Estados Unidos de lograr apoyo para las sanciones contra ese país por su programa nuclear, Teherán parece determinado a seguir desarrollando sus capacidades de misiles en el próximo futuro.
