Todo listo en Chicago para la fiesta de Obama
El presidente de EE.UU. dará su discurso postelectoral en el centro de convenciones McCormick.
CHICAGO, Estados Unidos (Télam, por Francisco Alcácer, enviado especial).- El centro de convenciones de Chicago donde Barack Obama dará hoy su discurso poselectoral hirvió ayer de actividad, con cientos de periodistas apostados en sus lugares de trabajo y obreros dando los últimos retoques al escenario desde donde el presidente espera celebrar su triunfo ante su gente.
Se estima que unos 4.000 periodistas, camarógrafos y operadores de cientos de medios locales e internacionales -entre ellos Télam- llenarán hoy hasta el límite de su capacidad los lugares de trabajo asignados en el centro de convenciones McCormick Place, ubicado unos 4 kilómetros al sur del centro de la ciudad cuna política de Obama.
En una jornada nublada, fría y ventosa, una recorrida por el centro de convenciones, el más grande de Estados Unidos, pudo constatar el febril trajín de trabajadores de prensa de todo el mundo, algunos buscando sus lugares, otros ya ubicados y otros tomando las primeras imágenes para distintos canales de TV.
"Estamos aquí, en McCormick, desde ayer. Ya instalamos todos nuestros equipos, hicimos las primeras pruebas y comenzaremos nuestras transmisiones mañana a las 17", dijo a Télam Imed Bensaid, un reportero del canal de TV semipúblico francés France 24.
"Estamos ansiosos. Queremos que esto empiece ya. Llegamos a Estados Unidos hace 10 días. Estuvimos en Florida, Ohio y Massachusetts antes de llegar acá a Chicago", agregó el joven Imed, un francés de origen tunecino.
El imponente McCormick Place está formado por cuatro gigantescos edificios interconectados y ubicados sobre o cerca de la costa del Lago Michigan, la fuente de las incesantes y gélidas rachas de las cuales Chicago, en el estado de Illinois, toma su sobrenombre de "La Ciudad el Viento".
El discurso de Obama de hoy será en el nivel 3 del Edificio Sur, en un sitio con capacidad para unas 10.000 personas.
Personal de la organización del evento impedía ayer a la prensa ingresar en el lugar, pero desde la entrada podían divisarse decenas de trabajadores que armaban la elevada estructura de columnas tubulares de metal cubierta por maderos horizontales que servirán de piso al podio desde donde hablará el presidente.
La fiesta y el discurso poselectoral de Obama en las pasadas elecciones de 2008 fueron al aire libre, en un parque llamado Grant Park, donde unas 240.000 personas se congregaron para celebrar el histórico triunfo del primer presidente afroamericano de Estados Unidos.
En aquella ocasión, el tiempo acompañó los festejos, pero los pronósticos de lluvia para hoy en Chicago y cuestiones de seguridad llevaron a su equipo de campaña -que ya no es sólo un candidato sino el presidente de Estados Unidos- a optar este año por McCormick Place.
En caso de triunfo del presidente, y dada la limitada capacidad del lugar, se espera que gran cantidad de gente festeje en el centro de Chicago y cerca de la residencia de Obama en el South Side (el sector Sur) de esta ciudad, que vibra por el mandatario demócrata, su dilecto hijo adoptivo.
En McCormick Place, la prensa fue ubicada en dos grandes halls contiguos, el "E" y el "D", en el nivel 2 del Edificio Sur.
El lugar -una especie de playón de estacionamiento gigante con columnas de granito alineadas- consta de lugares para periodistas de prensa gráfica y otros asignados para los medios televisivos y radiales.
La prensa escrita dispone de largas mesas alumbradas con veladores y provistas de toma corrientes con capacidad para múltiples enchufes. La organización también provee de servicio de Internet inalámbrico.
Las principales cadenas de TV o las grandes agencias de noticias, como CNN, Fox News, ABC, Associated Press o Reuters, poseen lugares más amplios, cerrados con cortinas corredizas de tela color azul y ubicados al lado de las mesas para la prensa gráfica.
Fuera del centro de convenciones, la enorme y cosmopolita Chicago siguió ayer su ritmo cotidiano, y el clima electoral sólo se palpaba en la frenética publicidad televisiva -se estima que la campaña costó en total 2.000 millones de dólares- o en esporádicas charlas de café u en otros lugares de reunión.
A diferencia de 2008, el gobierno local de Chicago -a cargo de Rahm Emanuel, ex jefe de gabinete del mandatario- se desligó del evento de mañana, que es organizado exclusivamente por la campaña de Obama, así que en las calles no hay carteles con el rostro del mandatario como hace cuatro años.
Igual, la gente confía en el triunfo del ídolo local.
"Por Obama, amigo, por Obama. Esto es Chicago, amigo, Chicago", dijo Charles, un joven taxista afroamericano consultado por Télam sobre sus intenciones de voto camino al McCormick Place.
"¿Argentina? Diego Maradona, Diego Maradona. Tengo un póster en mi habitación. Sí, amigo, me gusta el 'soccer' y tengo su póster, en serio. Y dígame, ustedes, ¿qué piensan de Obama allá en Argentina, eh?, preguntó Charles con suma curiosidad.
