Israel recordó a los caídos
Las sirenas paralizaron el tráfico y toda la actividad en las calles de todo el país. "Seguiremos actuando para conseguir la paz y a la vez defender nuestro Estado", afirmó Netanyahu.
JERUSALEN.- Israel conmemoró ayer el Día de los Caídos, en el que se recuerda a las víctimas militares y civiles desde 1860, con dos minutos de silencio y el ulular de las sirenas antiaéreas en todo el país.
Las sirenas paralizaron el tráfico y toda la actividad en las calles, ya que en esos dos minutos cada persona se para mirando hacia Jerusalén. La única excepción se vive en las localidades árabes, donde no se conmemoran por razones de identidad e históricas.
De acuerdo a las cifras oficiales, se recordó a 23.085 víctimas militares, policiales y agentes muertos en servicio, así como a los 2.493 civiles que murieron a causa de distintos atentados.
Estas cifras, que se contabilizan desde 1860 cuando comenzaron las "aliot" (olas migratorias de judíos) a la entonces Palestina bajo dominio otomano, incluyen a los miembros de organizaciones armadas que existían antes de la independencia de Israel, a militares del Ejército israelí, y a agentes de los servicios secretos, de la Policía y del Servicio de Prisiones.
Como otras fiestas y conmemoraciones en Israel, la jornada comenzó el domingo a las 20 horas (14 de Argentina) también con el ulular de sirenaS, mientras la bandera israelí era arriada a media asta en una ceremonia en la explanada del Muro de los Lamentos, el lugar más sagrado para el judaísmo.
Ayer, los principales dirigentes políticos y militares se concentraron en el cementerio Herzl de Jerusalén, el principal de los más de cuarenta que tiene el país, para la ceremonia oficial.
"Frente a la acumulación de amenazas a nuestro alrededor, el Ejército es hoy más fuerte que nunca, seguiremos actuando para conseguir la paz y a la vez defender nuestro Estado", dijo el primer ministro, Benjamín Netanyahu, durante el acto, según informó la agencia de noticias EFE.
El sonido de las sirenas produjo un paro inmediato en el quehacer diario. Los comercios cesaron su actividad y los conductores detuvieron sus coches para ponerse de pie, siempre mirando hacia Jerusalén.
El Día de los Caídos es uno de los más emblemáticos de la sociedad israelí y según una encuesta difundida ayer, el que logra achicar más las diferencias entre religiosos y laicos.
En Israel existen marcadas diferencias, por ideología política, entre los que abogan por la paz con los palestinos y los que creen en la visión del "Gran Eretz Israel".
La sensibilidad con la que la sociedad israelí trata a las familias afectadas, se traduce en este día en una masiva afluencia a los cementerios y actos, un millón y medio de visitantes según las previsiones de Defensa.
Hasta hace sólo unos años, los ultraortodoxos se mantenían al margen de esta jornada por creer que el estado judío sólo podía llegar de la mano del mesías, pero cada vez son más los que respetan los dos minutos de silencio.
Donde la jornada pasa desapercibida es entre los 1,2 millones de palestinos que viven en el territorio reconocido de Israel y que no se sienten identificados ni con el Día de los Caídos ni con el de la Independencia.
Para resaltar el precio pagado por la autodeterminación, la jornada de recuerdo precede al Día de Independencia, que se celebra en Israel el día 5 del mes hebreo de Iyar, fecha que en 1948 coincidió con el 14 de mayo.
Ese día los palestinos conmemoran cada año su "Nakba" (Desastre o Catástrofe), con el que recuerdan cómo la creación de Israel supuso para ellos el destierro y la pérdida de unas tierras en las que aspiraban a crear un Estado.
