El grupo islamista radical Al Shabab atacó ayer la sede principal de los servicios de inteligencia de Somalía y tras una pequeña batalla al menos doce personas, entre ellas algunos de los atacantes, murieron en el acto, según informó el Ejército.

Los milicianos islamistas llegaron al edificio poco antes del mediodía y, sin darle tiempo a los guardias para reaccionar, hicieron explotar su coche bomba en la puerta. Una vez adentro se enfrentaron con las fuerzas de seguridad durante más de una horas y lograron que algunos de los detenidos en la sede pudieran escaparse.

La sede del Servicio de Inteligencia somalí se encuentra muy cerca del Palacio Presidencial, el mismo que en julio pasado sufrió su segundo ataque armado en lo que va de año, recordó la agencia de noticias EFE.

El asalto de ayer fue rápidamente reivindicado por Al Shabab, una milicia islamista que alcanzó gran notoriedad internacional en septiembre pasado cuando se atribuyó el asalto al centro comercial Westgate de Nairobi, en Kenia, que dejó al menos 67 muertos.

A pesar de los avances logrados en los últimos años en el terreno político, Somalia se encuentra todavía inmersa en un prolongado y complejo conflicto armado.

El grupo, que anunció en febrero de 2012 su unión formal a la red Al Qaeda, lucha supuestamente para instaurar en Somalia, ubicada en el Cuerno de Africa, un estado islámico ultraconservador. Somalia vive en un estado de guerra y caos desde 1991, cuando el derrocamiento del dictador Mohamed Siad Barré dejó al país sin un gobierno efectivo y en manos de milicias radicales islámicas, señores de la guerra y bandas de piratas y delincuentes armados.