BUENOS AIRES.- Referentes del peronismo opositor acelerarán esta semana las negociaciones para conformar un bloque único en Diputados, a fin de retener poder interno en la Cámara de baja y evitar el avance del Frente Amplio Progresista (FAP) del socialista Hermes Binner.

"Estamos en medio de las conversaciones para resolver cuál es la tercera fuerza política en el Congreso: el radicalismo está consolidado en el segundo lugar pero nosotros tenemos que unirnos para no quedar relegados", confió a DyN uno de los diputados que participa de las gestiones.

"La semana que viene es clave porque en la siguiente tienen que iniciarse los trámites para la definición de autoridades y la distribución de comisiones. Si no hay acuerdo, el FAP va a ser la segunda fuerza opositora detrás de la UCR y nosotros vamos a quedar terceros", confió un legislador electo, que participa de la delicada urdimbre de los retazos que quedaron del Peronismo Federal.

El martes, según confirmaron tres fuentes independientes, varios diputados se reunirán para terminar de contabilizar los legisladores que integrarán la bancada y ya dejaron circular que llegarían a 25 escaños.

"Seríamos los mismos que en 2009 estuvimos en el Peronismo Federal, menos los tres que responden a Felipe Solá, pero todavía no se puede decir nada, porque están todos muy sensibles y una palabra malinterpretada puede provocar que se rompan los acuerdos", consignó otro de los gestores del acuerdo.

La semana pasada DyN anticipó que el mendocino Enrique Thomas es el que corre con más chances de conducir el bloque, con el que intentarán enfrenta al kirchnerista Frente para la Victoria, que tendrá un bloque numeroso y mayoría propia si se imputan los sectores aliados.

Los nueve legisladores que responden a Alberto Rodríguez Saá, los cuatro ex duhaldistas, Francisco De Narváez y los tres que le responden, otros tres de Carlos Reutemann, Thomas, Ramón Puerta y otros cuatro dirigentes provinciales que se mantienen en reserva integrarían así la bancada con la que buscarán competir por una de las vicepresidencias de la Cámara y eventualmente por las posiciones dentro de las comisiones.

"Para la definición grande de los espacios de poder dentro del Congreso se tiene que generar un espacio más amplio, como lo que fue el Grupo A y el Grupo B en 2009. Eso me parece que es difícil porque el radicalismo ya está negociando en forma directa con el kirchnerismo y con ellos seguro van a dirimir todo", se lamentó uno de los voceros de las gestiones.

Más allá de las negociaciones, los diputados peronistas tienen hasta el 1º de diciembre para generar consenso, porque el 6 de diciembre se resuelve los procesos de jura y asignaciones de autoridades.

"No queda mucho tiempo, pero estamos tranquilos que muchos que parecían que se iban, se están arrimando. Es una oportunidad para que el kirchnerismo tenga enfrente una fuerza homogénea, porque sabemos que para ellos sería más cómodo y elegirían como oposición al Frente Amplio de Binner y no a nosotros", concluyó la fuente.