Discutir salarios al filo de clases y sus costos
14:47 | por Laura Hojman (*)
El gobierno nacional cobrará en las próximas horas el costo de decidir discutir el piso salarial con los docentes, que ya no dependen de su órbita, al filo del inicio de un nuevo ciclo lectivo y también por elevación por el enojo de los maestros con los siderales sueldos que se fijaron los legisladores.
También la "factura" de no iniciar las clases con normalidad le pasarán en forma transitiva al gobierno bonaerense, cuya directora General de Educación, Silvina Gvirtz, debuta en la gestión con tres días de paro al estar "atada" a la decisión del número que iba a acordar Nación y que no se concretó.
El distrito bonaerense, al igual que otras ocho provincias, tendrán que enfrentar conflictos docentes, por atarse voluntariamente o no a la decisión del acuerdo nacional, que finalmente no vio la luz.
A pesar de que Nación ya no tiene escuelas primarias y secundarias bajo su dependencia y en consecuencia tampoco a los docentes, lo cierto es que el rechazo a acordar y firmar un acta paritaria del mínimo estimado que tiene que cobrar un maestro para 2012, generó un efecto dominó en varias jurisdicciones, que aguardaban ese número para tener parámetros concretos.
La Ciudad de Buenos Aires, en tanto, mientras la paritaria nacional negociaba contrarreloj acordaba un sueldo mínimo de 24 por ciento para el maestro con un cargo, de 3.150 y de más de 6.000 pesos para los que cuentan con dos cargos, que estos últimos representan al 80 por ciento del plantel docente porteño.
El ministro porteño Esteban Bullrich salió indemne por tercera vez en su gestión, al volver a cerrar la paritaria con los 17 sindicatos que firmaron el acta.
Lo hizo dentro del esquema que plantea dejar atrás el gobierno nacional, es decir discutir con clases y no parar el servicio, y fue puesto como ejemplo de negociación hasta por el mismo Alberto Sileoni.
"Hay una situación muy inflexible de los gremios que nos están pidiendo un salario de referencia de 3.000, que es el 28%, la Ciudad de Buenos Aires arregló por el 23%", comparó el jefe de la sede en la cortada Pizzurno.
Aconsejó "salir del esquema amenazador" y calificó de "una salvajada", el paro de 72 horas que harán sindicatos docentes bonaerenses.
En tanto, emblemáticos sindicatos de representación en el país, analizaban medida nacionales, como los de UDA con un jornada de protesta nacional el martes y paro el miércoles y los de CTERA que anunciaron una huelga nacional para el 6 de marzo.
La medida de los ceteristas será, la primera a la gestión kirchnerista, a la que suelen ponderar asiduamente dado que el único paro que realizó la central que conduce Stella Maldonado en abril de 2007, pero por el asesinato del profesor neuquino Carlos Fuentealba.
La decisión de salir del "esquema amenazador", asomó en el primer discurso de la presidenta Cristina Fernández, en la asunción del nuevo mandato y tal vez pasó desapercibida para algunos pero no para otros relacionados con la comunidad educativa que tomaron nota y cuenta de lo que se avecinaba.
En los dichos presidenciales, luego tomados esporádicamente por el ministro de Educación Alberto Sileoni, se instaba a los docentes -citando el caso de las prolongadas huelgas en Santa Cruz al inicio del ciclo lectivo 2011- a hacer una suerte de constricción y pensar que se puede negociar sin suspender el servicio, como lo hacen otros gremios, según dijeron.
Asimismo, la Presidenta les anunciaba que al igual que para mejorar la calidad educativa hay que evaluar a los niños, también "es necesario evaluar a los maestros".
Sileoni intentó convencer al magisterio nacional y provincial de la necesidad de sacar del centro de la escena a las negociaciones paritarias, y de sumergirse en la nueva experiencia de discutir salarios en medio del dictado de clases.
Por el momento, la nueva cultura paritaria en apariencia no está instalada y habrá que contemplar si la histórica negociación antes del ciclo lectivo y buen acuerdo, no redunda en definitiva en los principales destinatarios de la educación, niños y jóvenes.
(*): DyN.
