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31-03-2015

Pedraza pidió su detención domiciliaria

El ex líder ferroviario aduce "razones de salud" para continuar cumpliendo la condena a 15 años de prisión por el crimen del militante Mariano Ferreyra. "Está en riesgo su salud y su vida", indicó su abogado.

BUENOS AIRES.- El ex líder sindical ferroviario José Pedraza pidió hoy a la Corte Suprema de Justicia que le conceda la prisión domiciliaria "por razones de salud" para continuar cumpliendo la condena a 15 años de prisión por el crimen del militante del PO Mariano Ferreyra.

Mediante un escrito presentado ante el máximo tribunal por su abogado, el penalista Carlos Froment, Pedraza -detenido desde febrero de 2011 por el homicidio de Ferreyra- reclamó que sea revocado el fallo de la Sala Tercera de la Cámara Federal de Casación, que el 18 de marzo rechazó el pedido de prisión domiciliaria.

Ese tribunal, sostuvo Froment, "omitió efectuar un tratamiento adecuado del asunto y se apartó del derecho vigente con aplicación a las circunstancias comprobadas en la causa".

La permanencia de Pedraza en la cárcel de Ezeiza, donde cumple su condena, le causa "un perjuicio de imposible subsanación", pues por su estado de salud "requiere de una atención médica con la que no cuenta el establecimiento carcelario y su institución hospitalaria".

Froment recordó que la legislación vigente en materia carcelaria "no exige un riesgo de muerte inminente de la persona sino que se prevé el arresto domiciliario para personas enfermas cuya dolencia no pueda ser tratada adecuadamente en prisión".

"No se busca beneficiar al interno por el solo hecho de encontrarse enfermo sino de evitar que el encierro se transforme en una situación más gravosa y lo afecte en otros derechos, como viene ocurriendo hasta el presente", añadió.

"Que mi defendido continúe detenido en el penal de Ezeiza pone en riesgo su salud y su vida", insistió el escrito.

El ex sindicalista está detenido desde febrero de 2011 en la cárcel de Ezeiza y en abril de 2013 fue condenado por el TOC 21 a 15 años de prisión por ser partícipe necesario, en su rol de líder del gremio ferroviario, del crimen de Ferreyra.

El homicidio ocurrió el 20 de octubre de 2010, cuando empleados tercerizados del ferrocarril Roca reclamaban por sus condiciones laborales y fueron atacados por una patota de la Unión Ferroviaria.