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05-02-2010

"Lo mío es naif si comparás mis cuentos con todo lo que está pasando"

En "El pueblo quiere gozar", Jorge Corona vuelve sobre lo que mejor sabe hacer: contar chistes y aflojar al público. Como computadora, usa su cabeza, y dice que ya nadie se sonroja por el tenor de sus cuentos verdes.

El enorme cariño de la gente lo ayudó a curar aquellas viejas adicciones, dice Jorge Corona, el humorista que supo construir un estilo único de contar chistes y que hoy se luce en el escenario del teatro Mar del Plata, dentro del espectáculo que encabeza Miguel Angel Cherutti, "El pueblo quiere gozar".

Junto a la cantante María Martha Serra Lima y la vedette Iliana Calabró, Corona asegura que el tenor picaresco de sus cuentos (suelen bordear la temática sexual) ya no sonroja a los espectadores que cada noche lo aplauden. Más bien ellos buscan ese rasgo tan propio de la revista actual y pasada.

"Lo mío es naif si comparás mis cuentos con todo lo que está pasando, yo soy Piñón Fijo, con las cosas que se ven por televisión... en un teatro que es para gente grande mis cuentos no llaman la atención, además el teatro de revistas es así, se jacta de ser verde, así eran Barbieri, así son (Antonio) Gasalla o (Enrique) Pinti, son estilos. Las malas palabras son hambre, guerra y que te morís y nadie se acuerde de vos", define Corona, que hace treinta y siete años viene a hacer temporada a Mar del Plata.

A la hora de preparar su cuadro, el humorista cuenta que la única computadora que usa es su cabeza. Allí almacena los miles de chistes que sabe y, observador como pocos, asegura que va adaptando el repertorio según el carácter del público.

"Yo soy de la escuela de los cómicos de antes -indica-, soy de la escuela de José Marrone, de Don Pelele, tengo todo en la cabeza y voy viendo la cara del público, según el público que sea voy contando".

"Hay veces que el público es más serio, aunque después la gente se afloja, siempre le digo cosas para que se afloje, lo voy manejando. La verdad es que nunca me pasó que la gente no se ría conmigo, el hacer reír es un don que uno lleva adentro, porque no hay escuelas para cómicos, fijate que no hay cómicos pibes, casi todos los grandes son personas con experiencia, con autoridad", sigue y, sin poder dejar de lado la comicidad, asegura que se viste con traje de levita de colores llamativos y diseño extravagante porque "todas las noches me voy al velorio de un payaso".

Sus apariciones en el escenario de Mar del Plata también incluyen una serie de monólogos sobre lo que la gente hace en el verano en Mar del Plata. "Hablo sobre cómo camina la gente en la Peatonal, qué cara ponen cuando van a la Iglesia, cómo juegan al tejo en la playa" y se define como un tipo observador, sobre todo cuando concurre a la playa, donde toma sol pero no prueba los baños de mar. Es que "el agua está muy fría".

Más allá de su estilo único de hacer reír, Corona machaca una y otra vez con lo mismo: con la necesidad de que los argentinos se rían más. "Me gustaría que la gente tomara conciencia de que estamos de paso en el mundo, por eso hay que tratar de reírse, tratar de pasarla bien, por eso el título de esta revista es 'El pueblo quiere gozar' y Corona está para hacer gozar. Yo siempre le cuento a la gente lo que es el humor y la importancia de la alegría", pronuncia este hombre cuyo nombre artístico se lo dio hace bastante tiempo Juanito Velmonte. "Me divierto mucho cuando veo que se ríen", confiesa.

Este año, el cómico asegura estar tranquilo, siempre bajo el amparo de su mujer Mónica, quien llegó a ser productora de sus espectáculos y con quien comparte la casa en esta ciudad y las dos mascotas. "Estoy tranquilo, estoy pasando un buen momento, la gente se ríe mucho, hablaron bien de lo que hago Mirtha Legrand, Rolando Hanglin, vino a vernos Carmen Flores", cuenta, contento por ese gesto que tuvieron sus colegas del mundo del espectáculo.

Popular, feliz por el reconocimiento del público, Jorge hace suyas las palabras que un día le escuchó decir a su amigo Luis Landriscina, cuando éste recibía los saludos de la gente en la rambla local. "Yo no me escondo de la gente, el día que la gente no venga a saludarme me voy a molestar". Y confirma que el enorme cariño de sus espectadores fue como un grano de arena a la hora de lograr su rehabilitación. "Estoy recogiendo los frutos, la gente me agradece", concluye.

¿Rumbo a Buenos Aires?

Jorge Corona analiza por estas horas la posibilidad de contratar a algunos de sus compañeros del elenco de "El pueblo quiere gozar" para armar un espectáculo de humor destinado a la plaza teatral porteña.

Cabe recordar que en su larga carrera, el cómico trabajó con figuras de la talla de Zulma Faiad, Florencia de la V y Panam, al tiempo que muchas de las actuales vedettes hicieron sus primeros pasos con él, entre ellas Evangelina Anderson, María Eugenia Ritó y Adabel Guerrero.