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20-09-2013

Edelmiro Molinari y ?Los pioneros del rock?

Esta noche en el Auditorium, Molinari y Alejandro Medina, Black Amaya y Luis Robinson proponen un show musical con lo mejor del repertorio de cada uno y de otros grandes del género. "Vemos que nuestra música sigue perdurando a través del tiempo?, dijo Molinari. Lo que le falta al rock actual.

?Al principio nos íbamos a llamar ?Los pistoleros del rock?, después quedó ?Los pioneros?. Es que somos todos viejos compañeros de ruta?. Edelmiro Molinari, integrante de los ya míticos Almendra y Color humano, define así a sus colegas: Luis Robinson, Black Amaya y Alejandro Medina, todos rockeros de la primera hora de este movimiento musical, quienes vuelven, juntos, a un escenario para hacer lo que más les gusta: ?Somos tocadores, esa es la mejor definición, nos encanta seguir tocando hasta que pasemos a otro mundo?, agrega este músico incansable, que en 2012 editó el disco ?Contacto?.

En grupo, ejecutando canciones propias y de otros grandes del rock argentino, se los podrá ver hoy a las 21.30 en la sala Astor Piazzolla del Auditorium. Allí volverán a la mística, como a fines de los ?60 y principios de los ?70, cuando abrían camino a un ritmo que, por entonces, empezaba a cantarse en castellano. ?Fue una época intensa, muy buena música y buenas actitudes, yo no sentía celos de nadie?, rememora el guitarrista, que luego de aquellos años se radicó en Estados Unidos.

?Nos conocíamos todos. Manal, con Alejandro Medina, nació en la misma época que Almendra, casi inmediatamente después de Los Gatos, que fueron los primeros en cantar en castellano. Manal fue un trío de blues alucinante. Al negro Black Amaya lo conozco porque, después de Almendra nos multiplicamos, no nos dividimos, de Almendra salió Aquelarre, el conjunto formado por Rodolfo García y Emilio del Guercio, y también salió Pescado Rabioso, que fue donde intervino Black con Luis Alberto Spinetta, ahí Black tocaba la batería. Y yo arranqué con Color humano, toqué con David Lebon y después entró Moro, que le dio una solidez impresionante a Color humano??, rememora Molinari, en un paréntesis mientras prepara el desembarco a Mar del Plata.

Con la experiencia previa que les dio haberse presentado en Comodoro Rivadavia, Ushuaia y en teatros de la provincia de Buenos Aires con ?Pioneros del rock?, Molinari asegura que el público es una alquimia entre los viejos oyentes de rock y las nuevas generaciones, ávidas por conocer el pasado del género. ?La conexión que se establece con la gente es muy buena, vienen chicas y muchachos de alrededor de 20 años y algunos compañeros nuestros, con los que formábamos el círculo de entonces, gente que conoce a Manal y Almendra y a Los gatos, que son los que empezaron la historia. Y gente joven que investiga lo que pasaba. Eso es importante en nuestras carreras, porque vemos que nuestra música sigue perdurando a través del tiempo?.

-¿Cómo es la dinámica del espectáculo, qué temas ejecutan?

-Estamos juntos sobre el escenario todo el tiempo, el protagonismo está compartido entre los que estamos ahí, por ahí uno canta un tema y otro otra canción, pero tiramos todos con el mismo porcentaje de protagonismo, todos para adelante. Yo salpico con alguna canción actual mía, pero también tocamos canciones que tienen que ver con nuestro repertorio en general y el de otros artistas argentinos, es lindo tocar canciones de otras personas a las que siempre admiré, como de Luis Alberto Spinetta, Pappo, Javier Martínez, hay varias. Además, el repertorio va oscilando a medida que vamos tocando.

-¿Qué opinión tiene del rock actual?

-En el rock actual se nota algo que pasa mundialmente, no sólo en la Argentina. Se perdió, se diluyó la canción, los temas, las letras, entramos en una época de mucha tecnología, muy ?high tech?, pero desapareció la esencia, es decir las buenas canciones, que era eso que transmitían todos los grupos. Vos escuchas Escalera al cielo de Led Zapellin y te parte la cabeza hoy como hace cuarenta años, lo mismo con Los Beatles. Esa época de fines de los 60 y comienzos de los 70 fue muy creativa mundialmente. Cada grupo tenía canciones que nos han quedado grabadas para siempre. Después lo otro es que el exceso de tecnología llevó a una comercialización asquerosa de todo. Entonces, a los nuevos músicos les cuesta mucho seguir adelante profesionalmente por todo lo que han hecho las grandes compañías y los monopolios de la música. Y hay talentos, hay una muchachada impresionante.

-¿Tiene que seguir siendo combativo el rock?

-De alguna manera eso tiene que estar. Hacer canciones de amor como hacían los Beatles en un comienzo? eso ya está. Siempre hubo una cosa que va en contra de la corriente, por así decirlo, en el espíritu del rock estará siempre el amor, la paz, como en las épocas de Woodstock pero ahora también la conciencia total del desastre ecológico que la humanidad está haciendo. Ya no se pueden ignorar las cosas que están pasando porque estamos viviendo en un mundo muy jodido. Esto tiene que estar presente en quien escriba una canción.