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10-01-2016

"Soy un actor que mira la realidad con ojos de niño ácido y sarcástico"

El humorista que regresó a Mar del Plata con su ya clásico espectáculo cuenta los muchos proyectos en los que está trabajando y da pistas para entender su visión del teatro.

El actor y humorista Eduardo Calvo abrió el sábado último la temporada marplatense con "Muchas pelucas para un solo Calvo", un espectáculo que ya recorrió el país y el mundo durante muchas temporadas y del cual el artista dice que ésta será la última. Se lo ve todos los sábados en el Teatro Municipal Diagonal, Diagonal Pueyrredón 3338, con funciones viernes y sábados a las 22,30.

El espectáculo, para todo público, cuenta desde su origen con numerosos personajes -algunos han llegado a programas de radio- que durante una hora y media demuestran una versatilidad poco común, en un 2016 que tendrá al actor en la reposición porteña de la obra "Té de ceibo", de Gonzalo Demaría, y los estrenos de "La lechera", "Evito el musical", "Cartagho" y "Cardenio", de William Shakespeare, con dirección de Patricio Orozco.

En tren de definirse, Calvo expresó: "Soy un actor que mira la realidad con ojos de niño ácido y sarcástico" y en tanto a la trayectoria con "Muchas pelucas..." señaló que hay muchas diferencias entre el estreno de hace más de una década: "Es otra etapa, de más experiencia, tiene otra energía, otros textos y nuevos personajes y más impro; además la disfruto muchísimo más".

Respecto de la "última temporada" de su obra, señaló que "es una cuestión interna que el espectáculo parta, siempre hice las 'Pelucas...' de una forma diferente y eso hizo que el show se mantenga vivo, pero es también la excusa para no romper con viejos códigos y siento que es el momento de sacar a la luz otras cosas humorísticas como mi nuevo unipersonal 'Fenómeno', una historia futurista 'in vitro'.

A ese proyecto se sumarán una comedia musical y dos obras dramáticas, "Cardenio", de William Shakespeare, con dirección de Patricio Orozco, y "Carthago", dirigida por Gastón Troiano.

Consultado sobre su versatilidad, que le permite pasar de los unipersonales de humor a otra clase de obras, Calvo apuntó que "personajes tan diversos, tan ricos, tan profundos como el Bufón de 'La tempestad' o los de 'Té de ceibo' o 'Víctor o los niños al poder hacen que tenga sentido la profesión".

"Estoy muy agradecido y honrado de componer semejantes criaturas para esos grandes autores y directores -añadió-, la relación con el público es distinta pero siempre es con el mismo respeto, tanto actúe en un sótano o en un gran escenario, porque para mí las dimensiones son de las obras y no de las salas".

En cuanto a la creación de sus personajes señaló que "el trabajo es el mismo, imaginar y componer, pero primero entender; la diferencia está en que en una obra de teatro de otro autor el mandato lo da la pieza y en los personajes propios uno puede hacer lo que quiere y un personaje puede ser cualquier cosa".

"Yo suelo entregarme mucho a la creatividad de los directores, el talento de quien está al frente de una obra es un buen incentivo y una gran ayuda para ir sorteando las dificultades que aparecen, aunque en caso de dirigir yo si el proyecto me gusta mucho pierdo la necesidad de mostrarme ante el espectador -apuntó-, aunque cuando actúo y dirijo a la vez acepto la opinión de gente que admiro y llamo para la ocasión".

Sobre "La lechera", escrita y dirigida por Carlos Correa, que está entre sus múltiples proyectos, dijo que es "un cuento telúrico, una obra campera, un poema humorístico, un pedazo de tierra árido, el desierto, la soledad y una vaca, una historia de amor entre dos gauchos, la vaca y un pájaro; dos gauchos rudos en permanente disputa, condenados a un ritual del que no pueden escapar, la construcción del mito machista que ambos sostienen".

"Pero entre las grietas de esa máscara monstruosa asoma también la fragilidad de sus existencias; la contracara es un pájaro, dueño de las alturas y de su destino, que ama y se sumerge en las dulces complejidades que cada amor le depara. ¿Y la vaca lechera? Bueno, ella ha elegido, y en su elección declara su esencia", describió.