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10-02-2016

"Para los premios, yo he sido invisible en Mar del Plata"

Zulma Fayad Siente que al fin recibe un reconocimiento: una nominación al Estrella de Mar en la categoría Actuación Protagónica Femenina de Comedia Dramática. Con la calma que la caracteriza, cuenta cómo vive este verano: mimos, salud y paz.

Un comentario de Graciela Alfano de hace un tiempo le causó gracia. Recuerda que le dijo, sorprendida: "¡Zulma, yo no sabía que vos eras actriz!". Ella ríe, dice que entiende la frase y que no la irrita. "Me han visto en revistas, pero no en las comedias que hice con (Rodolfo) Bebán, con (Claudio García) Satur, con Mercedes (Carreras) inclusive, hice montones de cosas en Mar del Plata", asegura Zulma Fayad.

Este verano realiza la segunda temporada de "Mujeres de ceniza", en el remozado Teatro Santa Fe, una sala "sin escaleras", describe y dice que un teatro así es más cómodo para todos, público y actrices.

Además de su calma habitual, este año Zulma dice estar más contenta que nunca por la nominación al Estrella de Mar, que recibió recientemente por su trabajo en esta pieza, en la que se lucen también Nora Cárpena y Mercedes Carreras, ambas nominadas y la última de ellas ganadora del Estrella. Mercedes se quedó con el galardón en la categoría Actuación Protagónica Femenina de Comedia Dramática.

"Sentí la emoción de que me estaban dando un mimo", dispara la actriz, sobre la mención. "Después de cincuenta años de venir a Mar del Plata... es que yo venía haciendo un género que entonces era un género menor, la revista", recuerda y dice que también por trayectoria se merecería un Estrella de Mar.

"Para los premios, yo he sido invisible en Mar del Plata, no con la gente -sigue-. A lo mejor tiene que ver con el lema de mi vida: uno transmite la paz que tiene su alma, nada tengo y tengo todo, nada es fácil y todo es posible, nada pido y todo recibo, nada soy y soy en todo, porque en este pequeño cielo que yo anido logro avanzar. No tenía que ser y no tenía que ser, por algo este año dijeron 'uy, mirá'".

-¿Y cómo te llevás con el hecho de ser invisible a la hora de los reconocimientos? Para una actriz ser invisible...

-En un momento de mi vida, yo decía 'En este país soy quién soy porque hice ese aviso de la lechuguita, acepté ese reto'. Pero resulta que en México hice una carrera en un mes y me quedé ocho años. Por lo tanto mi ego... mi ego está bien, pero ¿por qué está bien? Porque cuando era chica y venía del colegio llorando porque mis compañeros me decían que como estudiaba danzas era una atorranta, mi mamá y mi papá me hablaban y me aseguraban que el valor a mi persona me lo tenía que poner yo. Y bien, lo aprendí. Esa ha sido mi vida, no hirió mi ego porque mi ego está bien y aparte porque a mi ego lo guardé hace años. Si llegué hasta acá, vida nada me debes.

-¿Dónde lo guardaste al ego?

-En un cajón, en el cajón de los recuerdos. Apuesto a otras cosas: nada tengo y tengo todo. No soy una mujer que apostó al ego, no soy competitiva, soy muy segura y en el escenario ni te cuento. Y en la vida solo se pueden vivir las emociones, porque en el mundo en que vivo yo sigo pensando con el corazón. Por eso renuncié a mi candidatura política. Como política soy un fracaso. La vida no está hecha para sufrir, la vida es para disfrutar. Y ni te cuento si estás haciendo lo que te gusta: a mi me tomó Dios de su mano.

Tener en claro la salud

Tan frontal como espiritual, Zulma agradece el aplauso del público que cada noche viste la sala con ese sonido tan buscado por los actores. "Si hay algo a esta altura de mi vida que valoro es el amor del público... y vos me preguntás cómo está mi ego... y cómo querés que esté si me miman tanto. Los actores buscamos el aplauso, yo no tengo de qué quejarme, fui la primera sobrina, la primera nieta, la primera en todo, he ligado y ligo al dia de hoy mucho mimo, mucho amor, soy querendona", se describe.

Ese amor que recibe la ayuda en estos momentos a superar un problema de salud que empezó a preocuparla. "Tengo problemas desde que llegué (a Mar del Plata) y llegamos a un punto en el que el doctor decidió hacer una tomografía computada para sacarme una pregunta de encima y recuperar la alegría. Soy una persona que necesita tener en claro su salud, soy ansiosa... hay que cuidar el cuerpo, el alma y la cabeza, que se pudre rápido", entiende la actriz que todas las noches le pone el cuerpo al personaje de Isabel.

Con "Mujeres de ceniza", pieza en la que este verano se sumó Adriana Salgueiro en reemplazo de Luisa Albinoni, ya planea una gira por algunas ciudades del país, una gira que le demandará esfuerzo pero en la que volverá a sentir el alimento de los actores: la mirada del otro.