Más allá de los vientos de 70 kilómetros por hora que soplaron alrededor de las 4 de la madrugada de ayer -luego decreció a 40 kilómetros- y los cerca de 40 milímetros de agua caídos también en la víspera, la junta municipal que coordina las tareas logísticas a raíz del fenómeno meteorológico reiteró a la población que mantenga las medidas preventivas.

Si bien en la víspera la tormenta causó menos problemas de los que se creía, se estima que todavía esta madrugada y a lo largo del día continuará el mal tiempo, caracterizado por fuertes ráfagas de viento, lluvias intermitentes y un brusco descenso de temperatura que podría facilitar la caída de agua-nieve e incluso nevadas en la zona serrana de General Pueyrredon.

Es por ello que el secretario de Gobierno, Ariel Ciano, recomendó a la población no salir de sus hogares, en especial a los sectores más vulnerables (niños y adultos mayores) hasta tanto no cese el alerta meteorológico.

"Tenemos todo previsto para tratar que los efectos de la tormenta afecten lo mínimo posible a todos los habitantes del Partido de General Pueyrredon", había manifestado anteayer Ciano.

En medio de la ola nacional de frío polar, la ciudad tuvo que interrumpir el paseo costero Dávila, frente al monumento a Alfonsina Storni, debido al peligro que representaba que las rompientes de las olas se producían sobre la vereda.

Con respecto al puerto, las autoridades de Prefectura Naval dispusieron el cierre tanto para el ingreso como para el egreso de embarcaciones, mientras más de una decena de barcos poteros aguardaban frente a la costa marplatense poder descargar. 

Otras medidas

El municipio había entregado información a la comunidad, para que adopte medidas preventivas. Se reiteró nuevamente a no sacar los residuos o solamente hacerlo minutos antes que pase el camión recolector; evitar arrojar elementos que puedan tapar las alcantarillas; y no dejar restos de poda. Asimismo, sujetar aquellos elementos como carteles y marquesinas que puedan ser sensibles a fuertes vientos.

El equipo especial que integran, entre otros organismos, Defensa Civil, varias ONG como Cruz Roja, las Fuerzas Armadas, los bomberos, delegados de Sierra de los Padres, Batán y Puerto, mantuvo tal cual lo previsto el estado de alerta durante las 24 horas y montó guardia desde las 4 de la madrugada en la sede del Ente Municipal de Obras y Servicios Urbanos (Enosur), ante los pronósticos de fuertes vientos e intensas lluvias.

"Desde hace tiempo venimos trabajando en forma conjunta a la Secretaría de Desarrollo Social para poder ayudar a la gente en situación de calle", remarcó el secretario de Gobierno, Ariel Ciano.

No tan intenso

Durante la madrugada de la víspera se registraron vientos de fuerte intensidad y en varios pasajes de la jornada el fenómeno se hizo sentir sobre el sector costero. La zona del Paseo Dávila, entre La Perla y Punta Iglesia, fue la más afectada por los vientos, aunque alejada de las proyecciones manejadas en un principio.

Defensa Civil intervino por la mañana luego de que cayera una cartelera en avenida Luro y La Rioja, provocando daños en un auto pero sin ninguna persona lastimada.

Pasado el mediodía la fuerza del viento se incrementó y volvieron las lluvias, y se registraron cortes de luz aislados, producto de la caída de cables y árboles en algunos barrios como Bosque de Peralta Ramos.

En general, "la situación es normal. No hubo evacuados. Podemos afirmar que la población entendió el mensaje con medidas preventivas que dio a conocer la junta municipal. Hubo, eso sí, alrededor de 18 llamados para ayudar a gente en situación de calle, que fue trasladada a la Casa del Deportista, teniendo en cuenta los pronósticos de -0° de sensación térmica que suponía un riesgo de congelamiento", resaltó Alberto Quintana, jefe de Departamento de Defensa Civil.

Con respecto al tránsito en las rutas, la Dirección de Vialidad Nacional pidió precaución para circular, en especial las que confluyen en la zona aledaña a Bahía Blanca. Se aconsejó a los automovilistas conducir con precaución, a 60 kilómetros por hora, con luces encendidas y los cinturones de seguridad colocados, y los camiones a 40 kilómetros por hora. También se sugirió salir recién después de las 10.

El plan preventivo municipal incluyó limpieza de cauces, zanjas y bocas de tormenta y una tarea especial en las adyacencias del estadio mundialista, para evitar que se repita el fenómeno de inundación de la cancha, como en 1992. "Hubo algunos anegamientos en ciertos sectores propensos, pero se trabajó rápido para solucionar la situación", señaló Quintana, de Defensa Civil.

El frente de clima frío avanza desde la zona de Bahía Blanca hacia Mar del Plata. Y si bien ya hubo agua nieve en la Sierra de los Padres, se estima que este fenómeno se repetirá -e incluso podría intensificarse- esta madrugada.

"De todos modos, para que nieve como en 1991 deben coincidir varios factores, debe haber una particularidad, que incluye humedad en baja y frío intenso desde unos días antes", señaló el pronosticador Luis Viera.

Sí se espera que continúen los vientos de entre 30 y 40 kilómetros por hora, con fuertes ráfagas. Ayer soplaron vientos de hasta 70 km por hora en alrededores de Villa Gesell y también en otros lugares costeros, añadió. Para los próximos días Viera estimó máximas que no superarían los 7 grados y mínimas de 0 grado, con sensación térmica en el orden de 7 a 9 grados bajo cero.

Sigue el alerta

El Servicio Meteorológico Nacional (SMN), dependiente de la Fuerza Aérea Argentina (FAA), advirtió ayer que continúa vigente el alerta meteorológico por el mal tiempo.

El aviso abarca la zona de cobertura del Río de la Plata, sector marítimo adyacente, noreste de Chubut, este de La Pampa y Río Negro, Capital Federal y la provincia de Buenos Aires.

Se trata de un fenómeno de vientos intensos y la intensificación de un sistema de baja presión al sudeste de la provincia de Buenos Aires da lugar a vientos muy fuertes, con velocidades estimadas entre 50 y 80 km/h, con ráfagas superiores.

El SMN adelantó que en el área marítima adyacente los vientos podrían alcanzar velocidades superiores a los 100 hm/h.

En tanto, en Capital Federal, Río de la Plata y centro y este de Buenos Aires los vientos serán del sector oeste, mientras que sobre el noreste de Chubut, este de Río Negro, y sur de Buenos Aires, serán del sur.

La velocidad de los vientos irán en disminución a partir de la tarde-noche de hoy, jueves.

En relación al clima que se espera para el resto de la semana, no cesarán las bajas temperaturas debido a una masa de aire frío que llegará desde la Patagonia. Así, se mantendrá la baja sensación térmica y los fuertes vientos helados.

Para hoy, en Mar del Plata se aguarda nubosidad variable, con lluvias y lloviznas, vientos fuertes con ráfagas del sudoeste y una máxima de 7°. Se prevé tiempo inestable para mañana, viernes, con probables precipitaciones.

Varios trastornos previsibles

Los intensos vientos del sudoeste que soplaron ayer generaron previsibles inconvenientes, sobre todo en el frente costero de la ciudad, que en algunos tramos provocó olas que cayeron sobre la calle. Es por ello que autoridades municipales decidieron el cierre del Paseo Dávila, ante el peligro latente que suponía para el tránsito vehicular y debido a la rotura de veredas.

Además de anegamientos, en varios sectores de Mar del Plata hubo cortes de luz por la caída de cables y árboles.

El fenómeno climático afectó también la operatoria del puerto, que fue anulada a la espera de una mejora en la jornada de hoy.

Complicaciones en Sierra de

los Padres y en Mar Chiquita

Sabido es que en la zona serrana se intensifican las características del mal tiempo, sobre todo cuando hay vientos fuertes y mucho frío. Por eso, ante las perspectivas de ráfagas del sudoeste y caída de agua nieve en la Sierra de los Padres, autoridades municipales, de las fuerzas de seguridad y los bomberos voluntarios de esa jurisdicción mantuvieron la guardia permanente y trabajaron en tareas de mantenimiento y prevención.

"Sabemos que es una noche complicada. Por eso nos mantuvimos en alerta constante, trabajando en tareas de remoción de ramas caídas, como en el acceso. Se espera mucha agua y fuertes vientos", señaló al caer la tarde de la víspera el delegado Juan Carlos García.

Por la tarde, vecinos de la zona del balneario-parque Mar Chiquita informaron que había desbordado la laguna y que habían quedado afectadas instalaciones del lugar.